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Después de siete meses de disputas judiciales y férreas oposiciones, el Gobierno anunció que el 13 de enero de 2016 -entre las 8 a.m. y las 9 a.m.- los interesados en quedarse con la participación de la Nación en Isagén tendrán que hacer sus ofertas.
Después de la decisión del Ejecutivo de aumentar el precio mínimo de la acción en 21,5 %, dejándolo en $4.130, cuando estaba en $3.399, el comportamiento del papel en el mercado de valores sigue estando muy por debajo de las expectativas (en las últimas dos jornadas la variación no ha superado el 11%).
Esta dinámica ha dado para que las principales casas de bolsa del país alerten sobre los riesgos que puede tener la decisión en el interés de las tres empresas que desde el inicio del proceso de enajenación manifestaron su interés por el generador de energía eléctrica más importante de Colombia.
El valor que dio el Ejecutivo a su participación (57,6%) no ha generado una reacción pública por parte de las compañías interesadas, entre las que están GDF Suez, la empresa del sector eléctrico y gas más importante de Francia, la chilena Colbún y el grupo inversor Brookfield con presencia en Europa, América y Asia.
Engie (GDF Suez), la franco-belga que viene a Colombia
GDF Suez (Engie) es una de las empresas más importantes del mundo, con inversiones en generación de energía eléctrica y gas natural. El cambio de nombre obedece a su intención de buscar nuevos mercados, sobre todo en países emergentes, según explicó este año el presidente del grupo, Gérard Mestrallet.
La firma franco-belga ha hecho esfuerzos por hacerse a activos de generación de energía limpia y alternativa. El líder de la compañía ha manifestado su interés por aumentar en 125 megavatios anuales su capacidad de generación eólica y solar. Incluso, la totalidad de sus inversiones en energía solar llega a 3.668 MW, poco más de los que produce Isagén con todos sus activos. Actualmente el 14% de su capacidad de producción de energía, que llega a 115,3 GW, depende de sus activos hidroeléctricos.
Este conglomerado se especializa en generación eléctrica mediante procedimientos amigables con el medioambiente. Cuenta con más de 7.284 unidades eléctricas en todo el mundo, de las cuales 5.372 son de generación hidroeléctrica, 1.577 del tipo eólico y 335 de otro tipo. Gracias a esta infraestructura tiene una capacidad instalada de 7.300 MW. La mayor presencia que tiene Brookfield en negocios del sector eléctrico es en Canadá, con 81 centrales eléctricas. Asimismo, genera energía en tres diferentes estados de Estados Unidos: Nueva York, Luisiana y California. En Suramérica Brookfield sólo se encuentra en Brasil, en donde tiene una capacidad instalada de 821 MW.
Además dijo que la meta de recaudo para el próximo año pasará de $116 a $121 billones. “Esto requerirá un enorme esfuerzo por parte de la DIAN, porque deberá tapar el hueco de $5 billones que dejó el menor pago de impuestos por parte de las petroleras. Asimismo, la entidad deberá recaudar $4 billones mediante su plan antievasión”.
Sin embargo, Cárdenas destacó que el desempeño de la economía colombiana ha sido sobresaliente, teniendo en cuenta la difícil coyuntura internacional, en particular la fuerte caída en los precios del petróleo y una menor perspectiva de crecimiento de importantes socios comerciales para el país.
El Ministerio también anunció un menor endeudamiento en los mercados de capitales para 2016, reflejado en menores colocaciones de Títulos de Tesorería (TES).
Juan David Ballén, analista de Casa de Bolsa, explicó que “desde mediados de este año el Gobierno ha venido realizando un canje en sus TES debido a que en 2016 vencen alrededor de $30 billones en estos papeles, y no hay caja para pagarlos. De manera que aunque en el plan financiero se diga que se redujeron las emisiones, el saldo final de deuda permanecerá igual. Hay que tener en cuenta que a raíz del alza de la tasa de interés de la Reserva Federal, se espera que el costo del endeudamiento para el país aumente”.