El presidente de EE. UU., Donald Trump, anunció hoy la muerte del líder del Estado Islámico (EI), Al Bagdadi, en una operación militar de su país en el noroeste de Siria. “Abu Bakr Al Bagdadi está muerto”, informó Trump en una declaración a la nación desde la Casa Blanca. “Anoche EE. UU. hizo justicia con el terrorista número uno del mundo”, agregó.
Al Bagdadi se suicidó con un cinturón de explosivos al final de un túnel tras ser perseguido durante la acción de los comandos electrónicos. “Murió como un perro, como un cobarde”, subrayó el presidente. Le puede interesar: El líder del Califato tiene el poder de morir y revivir varias veces
Trump felicitó a las fuerzas especiales y los servicios de inteligencia estadounidenses por una “operación muy, muy peligrosa”. La CIA, agencia de seguridad de Estado Unidos, ayudó a localizar al líder de ISIS según comentó el jefe de Estado. El mandatario agradeció, localizará, la colaboración de Turquía, Rusia, Siria, Irak y los kurdos para localizar al jefe del EI.
Según la prensa local estadounidense, Trump aprobó la misión contra al-Bagdadi hace semanas. El operativo estuvo bajo estricta vigilancia y se habían descartado dos misiones planificadas antes de que se desarrollara la que tuvo éxito. El Ejército de Estados Unidos voló sobre el espacio aéreo ruso para llegar a su destino final. Trump vigiló junto a sus asesores cada movimiento desde la Sala de Situación en Washington. Además del líder del Estado Islámico, tres niños y dos mujeres también murieron. Ningún militar fue asesinado en la operación.
Se presume que al-Badhdadi estuvo escondido en zonas sirias durante los últimos cinco años. En febrero de 2018, funcionarios estadounidenses dijeron que el jefe del Estado Islámico había resultado herido en un ataque aéreo en mayo de 2017 y que tuvo que renunciar al control del grupo terrorista durante hasta cinco meses debido a sus heridas. Baghdadi se convirtió en el líder del del movimiento en 2010.