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Lo ocurrido este fin de semana en Charlottesville (Virginia) –donde hubo fuertes disturbios en medio de protestas de neonazis y supremacistas blancos– puso en evidencia que los fantasmas del racismo, la intolerancia y la xenofobia están más vivos que nunca en Estados Unidos. Ilia Calderón, una periodista de origen afrocolombiano al servicio de la cadena hispana Univisión, es hoy una víctima de la violencia y el odio que amenazan con posarse nuevamente en Norteamérica.
Armada de valor, Calderón se ofreció a entrevistar a Chris Barker, líder de una facción del Ku Klux Klan denominada ‘Leales caballeros blancos’, para indagar por la manera en que estos grupos supremacistas están operando, su forma de organización y las ideas que defienden en pleno siglo XXI. Sin embargo, lo que sería un diálogo noticioso terminó por poner a prueba su capacidad profesional y tocó una de sus dimensiones más personales e íntimas.
“(Me recibió con) un poco de desconcierto también, no se imaginaba quién era yo, cómo era yo y lo primero que me dijo fue que yo era la primera persona negra que pisaba su propiedad. Todo mi equipo me advirtió que me iban a insultar y yo lo sabía, pero nunca me imaginé el nivel”, narra Ilia en un apartado de la entrevista que divulgó Univisión, que prepara un especial informativo de la problemática denominado ‘En la boca del lobo’.
En las imágenes, que corresponden a un encuentro pactado el pasado 24 de julio, figura la periodista en la propiedad de Barker en Carolina del Norte. Se trata de un área boscosa donde el grupo supremacista –que participó de las protestas en Virginia– realiza sus reuniones e incluso, se observa a personas que visten el atuendo blanco distintivo de los miembros del Ku Klux Klan mientras queman una cruz.
“Para mí eres una negra”, le dice Barker de forma despectiva a la periodista en medio de la entrevista. “Eso me parece ofensivo”, le responde ella, mientras que el integrante de los ‘Leales caballeros blancos’ se levanta y opta por abandonar el lugar. “No te vayas, no te vayas”, le reclama Calderón. “Me enoja haberte visto, y a todos los de tu tipo que veo cada día (…) Para mí eres mongoloide”, se escucha decir a Barker en otro de los apartados.
“Yo estaba simplemente preparándome mentalmente para lo que tenía que hacer, para lo que me iba a enfrentar (…) Y en ese momento sentí realmente mucho miedo por mi seguridad y la seguridad de todo mi equipo”, declaró Ilia Calderón.
“Le dije que yo era una productora del noticiero Univisión y que tenía una corresponsal, una mujer hispana de color, que quería entrevistarlo, que si nos daban una entrevista. Me dijeron que sí. Éramos un camarógrafo mexicano, uno americano –al que le decimos el gringo– Ilia y yo, que soy cubana (…) Cuando uno de ellos (un integrante del grupo supremacista) va al carro de Ilia y se sorprende: yo nunca he visto a nadie mirar a alguien con tanto odio, tanto rencor (…) Enseguida comenzaron a usar un lenguaje totalmente inaceptable para cualquiera de nosotros”, sostiene Guzmán, quien señala que durante la filmación pudieron evidenciar todo tipo de elementos y objetos asociados al Ku Klux Klan que no dudó en calificar de “horrorosos”.
En diálogo con la emisora Blu Radio, Ilia Calderón admitió que tuvo miedo durante la entrevista y manifestó que se ofreció a hacerla por lo que representa, “una mujer, negra, hispana e inmigrante”. “Como parte de las reuniones editoriales veníamos discutiendo los incidentes de odio que se habían presentado y cómo, del 2016 para acá, estas personas y estos grupos se sienten con el derecho de levantar su voz más alto, quizá respaldados por un presidente con un discurso muy débil al respecto”.