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La organización no gubernamental Oxfam admitió este viernes que varios de sus miembros contrataron prostitutas en Haití y realizaron orgías durante la misión humanitaria que tuvo lugar después del terremoto que destruyó el país en 2010.
Mediante un comunicado, la prestigiosa ONG británica respondió a la publicación de una investigación del diario The Times publicada este viernes y titulada ‘Oxfam en Haití: Era como una orgía de Calígula con prostitutas en camisetas de Oxfam’.
El comunicado recalca que “algunos miembros del equipo actuaron de una forma totalmente inaceptable”.
En la nota de prensa, la ONG menciona una investigación de 2011 en la que no descarta que entre los explotados también hubiese menores de edad y aclara que no es la primera denuncia sobre “comportamiento sexual inapropiado que encara Oxfam en los últimos meses”.
La ONG afirma que se despidieron cuatro personas y se aceptó la renuncia de otras tres, entre ellos el director para el país, el belga Roland van Hauwermeiren.
Según el rotativo británico, la salida del Hauwermeiren, de 68 años, ocurrió sin tomar ningún tipo de medidas disciplinarias o legales, e incluso sin informarle a las autoridades haitianas al respecto.
Después del terremoto, ocurrido hace ocho años, que dejó 220.000 muertos, 300.000 heridos y 1,5 millones de damnificados, Oxfam desplegó unos 200 cooperantes para brindar ayuda humanitaria.
Según The Times, un año después de la misión, un oficial de la organización se comunicó con la sede central en Oxford, Inglaterra, para denunciar las irregularidades en el país caribeño. Luego de esto, la ONG abrió una investigación interna.
Oxfam también negó haber encubierto este hecho. Esta ONG recibe al año USD 400 millones de fondos del Gobierno británico y donaciones públicas.
Este no es el único caso similar en Haití. En los últimos años se conocieron las denuncias que involucraban a los cascos azules y otro personal de Naciones Unidas, en repetidos casos de abusos sexuales e intercambio de ayuda humanitaria a cambio de sexo.
Un informe más reciente, de The Associated Press (AP) en abril de 2017, revelaba unas 2.000 denuncias, al menos 300 de menores de edad, sobre una red de abuso infantil perpetrada por los cascos azules.