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"Usted dice que todo el mundo tiene smartphone", declaró Putin, reaccionando a un discurso del director del Instituto nacional de investigaciones Kurchatov, Mijaí Kovalchuk, durante una reunión con investigadores académicos rusos en Novosibirsk (Siberia occidental).
Kovalchuk acababa de afirmar en su discurso que actualmente "todo el mundo tiene un smartphone en su bolsillo".
"Yo no tengo smartphone", anunció Putin, de 65 años.
En 2005, ya había afirmado no disponer de teléfono móvil.
A la cabeza de Rusia desde hace 17 años y candidato a su propia sucesión en las elecciones presidenciales del 18 de marzo, Putin había asegurado el año pasado, durante un encuentro con jóvenes rusos, que él se sentía una "persona corriente", quien cuando la jornada de trabajo "termina muy tarde" sólo piensa en "irse a la cama lo más pronto posible y no en consultar Instagram".
"Si los empleados de mi administración utilizan internet de manera muy activa (...), personalmente, yo casi no la utilizo", confió entonces.
A diferencia de Putin, el primer ministro Dmitri Medvedev, de 52 años, es visto con frecuencia en público con su iPhone y publica regularmente las fotos que toma en sus páginas oficiales en Instagram y Facebook.