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Todo está listo para que Víctor Hugo Cuéllar Silva, quien es señalado de ser un gran proveedor de cocaína del cartel de Sinaloa, sea extraditado a Estados Unidos. Luego de que la Corte Suprema de Justicia diera su visto bueno para el traslado de Cuéllar Silva, quien está detenido desde enero pasado, el presidente de la República hizo lo mismo el pasado 21 de junio, según notificó el diario El Tiempo. En cuestión de días, semanas máximo, Cuéllar Silva será enviado a California en un avión de la DEA, donde enfrenta cinco cargos relacionados con narcotráfico.
Pero Cuéllar Silva no es el único de su familia que interesa a la justicia estadounidense. Desde 2014, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Ofac, en inglés) incluyó a su padre, el colombo-mexicano Hugo Cuéllar Hurtado, en la Lista Clinton. Este hombre, oriundo de Caquetá y de 68 años, es señalado por las autoridades extranjeras de ser proveedor del poderoso cartel de Sinaloa y sucesor de Juan José Esparragoza Moreno, alias El Azul, otro capo al igual que Joaquín Guzmán Loera, el Chapo Guzmán, e Ismael Zambada García, conocido como Mayo.
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Desde ese año, la Ofac también incluyó en la Lista Clinton a otros dos hermanos de Víctor Hugo Cuéllar Silva: John Fredy y Jenny Johanna Cuéllar Silva; a Ofelia Margarita Miramontes Gutiérrez, esposa de Hugo Cuéllar Hurtado, y una de las nueras de este último, Gabriela Amarillas López. También a la supuesta administradora de sus activos, Lucy Amparo Vargas Núñez.
Víctor Hugo Cuéllar Silva es señalado de participar en una organización internacional que consistía en traficar con cocaína desde Colombia a Estados Unidos por vía aérea o marítima. Presuntamente también usaba rutas en México y varios países de Centroamérica para transportar el narcótico. Las autoridades estadounidenses determinaron a raíz de comunicaciones interceptadas, vigilancias a los sospechosos en lugares públicos y entrevistas, que Cuéllar Silva cooperaba en la trasferencia de millonarias cantidades de dinero provenientes de dichas actividades.
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Con estas evidencias, y otras más, en noviembre del año pasado Estados Unidos solicitó la detención con fines de extradición de Cuéllar Silva, que se hizo efectiva el 26 de enero en la capital del país. En el expediente, por ejemplo, reposa el envío de casi tres toneladas de cocaína en un submarino de origen ruso desde la zona de Esmeraldas, en Ecuador, con destino a Guatemala. En ese envío, que se habría dado en 2016, las autoridades interceptaron varias fotografías que Cuellar Silva registró en ese momento.
Por su parte, Hugo Cuéllar Hurtado, quien según Estados Unidos se hace pasar por un próspero empresario cuya versatilidad iría desde la cría de avestruces hasta las casas de empeño, es para la Ofac un objetivo de alto valor por su trayectoria, que lo ubica como un colaborador de viaja data en temas de envíos de cocaína y crimen organizado. De hecho, Estados Unidos dice que colaboró con el cartel de Medellín y que a finales de la década de los 90 comenzó a vivir en suelo azteca, donde habría empezado a colaborar con el cartel de Sinaloa. (Le podría interesar: Los asesinos de Leónidas Vargas)
Según registros oficiales, Hugo Cuéllar Hurtado figura como propietario de empresas en Girardot (Cundinamarca), Huila (Neiva), Bogotá y México, y habría tenido nexos con Leonidas Vargas Vargas, viejo narcotraficante colombiano asesinado en 2009 en Madrid (España) y heredero de Gonzalo Rodríguez Gacha, alias El Mexicano.