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El comando de la Fuerza de Tarea Hércules de las Fuerzas Militares acaba de encontrar dos fosas comunes en el municipio Olaya Herrera, en Nariño. El pasado 26 de diciembre de 2019, luego de un enfrentamiento armado entre dos grupos enemigos de disidencias de las Farc, unidades del Comando Operativo Pegaso, presentes en la zona, iniciaron operaciones de registro y control territorial con el propósito de garantizar la seguridad de la población civil en el área.
En medio de esas operaciones en la vereda Barro Caliente se logró la ubicación de dos fosas comunes en las que, tras un registro detallado por parte de la unidad militar y la SIJIN, de la Policía Nacional, fueron hallados seis cuerpos, que al parecer corresponden a integrantes de las disidencias que delinquen en la zona. Actualmente, los cuerpos fueron sacados de esa zona y se encuentran en Medicina Legal, donde se adelanta el proceso de identificación.
En la región operan el frente Oliver Sinisterra y Guerrillas Unidas del Pacífico, que se disputan el control de los cultivos de coca, de igual manera las rutas de salida de los cargamentos de droga con destino a México y Estados Unidos. El primer grupo armado se autodenomina así ya que el cabecilla de las Farc en Nariño se llamaba. Este murió en febrero del 2015 y hasta hace poco fue liderado por alias Guacho, quien murió en diciembre de 2018, luego de un bombardeo de la Fuerza Pública.
Según el portal especializado en crimen organizado Insigth Crime, "En este escenario, los exguerrilleros no dan muestras de ningún compromiso ideológico y simplemente se convierten en pequeños actores en un panorama criminal cada vez más fragmentado. (...) no logran unirse y, de hecho, terminan enfrentándose entre sí por el control de las economías ilegales, como el narcotráfico, la extracción de oro o la extorsión".
En 2015, en este mismo municipio la Fiscalía encontró una fosa común con cerca de 60 cuerpos que serían de personas víctimas de grupos paramilitares. El entonces fiscal general Eduardo Montealegre, anunció que en la zona conocida como Bocas de Satinga, ubicada en la costa pacífica, se exhumaron aproximadamente 61 cuerpos no identificados en el cementerio del corregimiento.
Esta última fosa, hace parte de un plan a nivel nacional que adelanta Medicina Legal para hallar los restos en otros camposantos como Cimitarra, La Plata, Florencia, Puente Nacional, Bojayá, Pitalito, y el recientemente encontrado en Dabeiba (Antioquia) en la que la Jurisdicción Especial para la Paz trabaja para identificar los cuerpos de presuntas víctimas de ejecuciones extrajudiciales del Ejército.