Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Luis Gustavo Moreno, quien fuera uno de los promotores del llamado cartel de la toga y hoy es su principal delator, no está dispuesto a dejarse hundir. En la declaración que le entregó a la Corte Suprema hace poco, en la cual se refirió al cacique liberal Álvaro Ashton, al exfiscal anticorrupción le preguntaron qué pensaba sobre la aseveración del expresidente de la Corte José Leonidas Bustos, quien dijo: “Moreno como que me perseguía”. Moreno, con contundencia, señaló que Bustos no tenía cómo desmentirlo.
Según la declaración que dio Moreno en el marco del caso de Ashton, revelada por Noticias Caracol en sus emisiones nocturnas de este domingo y lunes, Luis Gustavo Moreno aseguró: “Él puede decir que no, pero no es una relación normal: los ingresos al despacho (de la Corte Suprema) siendo yo abogado litigante de esta corporación, tener negocios de tipo comercial, encontrarnos fuera del país…”.
Luego, Moreno se refirió al fin de año de 2014, que pasaron Moreno, Bustos y sus respectivas familias en el hotel Marriot de Miami: “En el caso de Miami él me invitó y si la Corte dispone que lo puede hacer a través de la DEA, a través de algún tipo de cooperación, pueden verificar que incluso que la gerente que es una colombiana dispuso de una cena de fin de año, cena que estuvo en cabeza de una familiar o supuesta familiar de la doctora Cristina (esposa de Bustos). Yo no creo que uno pase como magistrado de la Corte Suprema de Justicia un fin de año con un abogado que litiga en la Corte Suprema, por fuera del país, no”.
“Y agregó: “Esa reunión fue para hablar sin ningún tipo de apuros y sin ningún tipo de testigos, con algún tipo de descanso y tranquilidad, de los temas que teníamos con Pacho (el exmagistrado Francisco Ricaurte), unos temas que se manejaban por el grupo, concretamente de actos de corrupción”.
El expresidente Bustos ha sido enfático en que él no cometió ningún delito de la mano de Moreno. “Él (Moreno) ve una salida: negociar un principio de oportunidad con la Fiscalía, y así todas sus fechorías se quedan en veremos, la Fiscalía renuncia a la persecución penal con el cuento de que él está destapando el cartel de la toga”, le dijo a la Corte Suprema el pasado 9 de noviembre.
Moreno, sin embargo, insiste en su versión: José Leonidas Bustos, le dijo a la Corte, fue quien lo inició en el mundo de los “torcidos”. “Yo ingreso por conducto del doctor Bustos a litigar en nombre del doctor Gerardo Torres aproximadamente en el 2011 (…) Ahí noto que, independiente de que sea legal o no legal, pues no era moral ni ético que el esposo (Gerardo Torres) de su magistrada auxiliar (Luz Mábel Parra) me refiriera por conducto del magistrado titular (Bustos) casos para litigar en la corporación de la que hacía parte”.
(En contexto: El enredo en que terminó el congresista Musa Besaile por haber confesado su soborno)
Según las revelaciones de Caracol Noticias, Moreno le dijo a Bustos que no estaba “muy contento” porque a sus defendidos, gente del Congreso, sólo los conocía momentos ante de las diligencias y, además, se tenía que ajustar a los honorarios que decidiera Torres. Este último, asesor del senador de Cambio Radical Germán Varón, renunció a ese cargo en julio de este año, cuando se supo que él presentó a Moreno ante Varón y el congresista, a su vez, lo recomendó en la Fiscalía.
“Le manifiesto mi inconformidad al doctor Leonidas Bustos (sobre los pagos de Torres), me dice, no se preocupe, preséntese a la oficina del doctor Francisco Ricaurte”, contó Moreno. Ricaurte está detenido en la cárcel La Picota desde el pasado 20 de septiembre. La Fiscalía le imputó cargos, los cuales él rechazó, por su presunta participación en el cartel de la toga.
Las grabaciones de Álvaro Asthon
En su edición de este domingo, Noticias Caracol reveló también unos audios en poder de las autoridades que confirman, por lo menos, algún tipo de cercanía entre el senador Álvaro Ashton, Gustavo Moreno y el exfiscal general Eduardo Montealegre.(Le puede interesar Álvaro Ashton: el senador que más visitó a Francisco Ricaurte)
“¿Usted me puede dedicar un minuto? Tengo 15 días de estar persiguiéndolo”, le dijo en una de las llamadas Ashton a Moreno, quien le respondió en un tono casi reverencial: “Perdóneme mi doctor Ashton. Hagamos una cosa. Yo tengo una diligencia de 2 de la tarde a 5 de la tarde en el centro de la ciudad de Bogotá. Me desocupo y lo llamo y lo ubico donde usted esté”. La llamada se cierra con un Ashton que, apurado, manifiesta: “Es urgente, oyó”.
Moreno ha admitido ya que Ashton, como Musa Besaile y otros congresistas, le dio al dinero al cartel de la toga para verse beneficiado en la indagación preliminar en su contra por parapolítica, la cual lleva varios años en los anaqueles de la justicia sin que se archive o se vuelva investigación formal. Ashton, por su parte, ha negado tales pagos.
Moreno aseguró también que el exfiscal Eduardo Montealegre era tan cercano a Ashton que le permitió tener acceso a información reservada de las pesquisas que hacía el CTI sobre el senador. Cuando se supo de la declaración de Moreno contra Montealegre en relación con Ashton, el exfiscal general de inmediato lo denunció por fraude procesal y falso testimonio.
“Qué hubo, mi querido Álvaro”, lo saludó una vez Montealegre en uno de los audios revelados, mientras le explicaba que estaba en una entrevista con Yamid Amat. “Ya tengo una parte de los, de los…”, dijo Ashton, sin especificar exactamente la parte de qué tenía. “Entonces 9:30 te espero en mi casa”, dijo Montealegre para cerrar la conversación. “El afecto y el cariño es muy grande, mi querido senador”, le dijo Montealegre en otra llamada.
Aquí puede ver la nota que emitió este domingo Noticias Caracol.