Las perlas en el patrimonio del “Ñoño” Elías

De acuerdo con registros judiciales en poder de este diario, el excongresista tiene deudas por más de $1.163 millones, a pesar de que no posee ni un solo bien a su nombre. Además, pagaba $34 millones mensuales en obligaciones, aunque sólo se ganaba $29 millones. ¿Cómo hacía?

Juan David Laverde Palma @jdlaverde9
18 de febrero de 2018 - 02:00 a. m.
Bernardo Miguel Elías Vidal es hoy testigo de la Corte Suprema en el escándalo de Odebrecht. / Archivo
Bernardo Miguel Elías Vidal es hoy testigo de la Corte Suprema en el escándalo de Odebrecht. / Archivo
Foto: ARCHIVO PARTICULAR
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

El exsenador Bernardo Miguel Elías Vidal, más conocido como el Ñoño Elías, nacido en Sahagún, Córdoba, el 7 de noviembre de 1976, antes patrocinador de la ñoñomanía y hoy en camino de convertirse en el principal delator de la corrupción de Odebrecht y la cúpula del poder político bogotano, a sus escasos 42 años, con los coletazos de sus revelaciones prometidas, podría generar un terremoto político tan solo comparable con el proceso 8.000. A ese escenario de colaboración no llegó por voluntad propia. Durante meses la Corte Suprema de Justicia le respiró en la nuca, al punto de descubrir la trasescena de su imperio político. (Le puede interesarCorte Suprema ordena traslado de "Ñoño" Elías a una guarnición militar).

Mientras la Sala Penal del alto tribunal evalúa el peso y las evidencias del ventilador del Ñoño, en su expediente quedaron constancias conocidas por El Espectador sobre sus enlaces del pasado, los tentáculos que durante años desplegó como cacique regional, el dominio de su clan político, los herederos de hoy y los patrocinadores de ayer, y hasta las cuentas y patrimonio del excongresista y su familia. En un informe de 19 páginas elaborado por el CTI de la Fiscalía se documentaron varias perlas sobre el manejo de las campañas del Ñoño al Senado. En 2010, por ejemplo, reportó que solo se había gastado $501 millones, muy a pesar del poder que ya exhibía su maquinaria.

De ese monto, $370 millones fueron aportados por su familia y él mismo. Según las cuentas de sus ingresos y gastos, en 2010 puso $100 millones, su primo el exalcalde de Sahagún Carlos Elías Hoyos puso $20 millones, su tío y exgobernador de Córdoba Jorge Ramón Elías Náder aportó $50 millones, su padre Bernardo Elías Náder $150 millones y su hermana Nidia Carmiña Elías Vidal dio $20 millones. El documento de la Fiscalía, sin embargo, hizo énfasis en los $180 millones que recogió la campaña del Ñoño en el año 2010 como donaciones de particulares. La mitad de los donantes tienen investigaciones o figuran como denunciantes en distintos procesos. (Lea también: La estrategia del exsenador “Ñoño” Elías para ser testigo en la Corte Suprema).

Para la campaña de 2014, el excongresista aseguró que sólo se gastó $628 millones y que a propaganda electoral –es decir, en su ñoñomanía– apenas destinó $362 millones. En esa ocasión, el Ñoño aportó $30 millones y su hermano Julio Alberto Elías Vidal –hoy su heredero y candidato a la Cámara de Representantes– puso casi $100 millones.

“En la información disponible no se especifica el origen de los recursos ni modo, ni fecha de la transacción”, advirtió el reporte de policía judicial. Con otras particularidades reseñadas: en los libros contables figura un crédito por $100 millones que le hizo a la campaña la empresa Promotora de Negocios de Córdoba (Procord). Según una investigación de Noticias Uno de abril de 2017, citada por la Fiscalía en el documento, la gerente de Procord es Martha Elena Torres Lequerica, prima de Rafael Pérez Lequerica, exsocio del exviceministro Gabriel García Morales, condenado por el caso Odebrecht y confeso delator del entramado de corrupción.

Precisamente, con el fin de aclarar el manejo y cuentas de Bernardo Ñoño Elías y su círculo familiar, la Corte ordenó un pormenorizado estudio financiero que incluyó a sus padres, hermanos, hijos, suegros, primos y hasta cuñados conocidos de autos como el exgobernador de Córdoba Alejandro Lyons Muskus. El CTI revisó cámaras de comercio, bases de datos de sus historiales crediticios, seguros adquiridos, propiedades registradas en las oficinas de instrumentos públicos y el Instituto Agustín Codazzi, entre otro largo etcétera. Dicho arqueo se hizo entre 2009 y 2017. Y los resultados del informe resultaron sorprendentes.

Por ejemplo, se asegura que el exsenador tiene deudas con el sistema financiero por más $1.078 millones, por las cuales cancelaba cuotas mensuales por un valor de $34 millones. Y que, además, había suscrito créditos con particulares que rondaban los $85 millones. Es decir, que el Ñoño tiene pasivos por más de $1.163 millones. Pero, ¿dónde está la plata de Bernardo Elías Vidal? La Fiscalía se hizo la misma pregunta y concluyó en el reporte conocido por este diario: “Se desconoce hasta la fecha la destinación específica de este endeudamiento, puesto que tal y como se presenta en el presente informe parcial, el señor Elías Vidal no tiene bienes registrados a su nombre”.

Con otra inquietud que valoran los investigadores. El exsenador pagaba al mes deudas que superaban en $5 millones su sueldo mensual. ¿Cómo hacía? A las autoridades también les llamaron la atención las obligaciones ya canceladas por parte del excongresista, deudas que equivalían a $1.865 millones, de los cuales “se desconoce su destinación, así como la procedencia de los recursos por medio de los cuales fueron cancelados esos pasivos”. Mientras al Ñoño sólo le figuran pérdidas, su grupo familiar, integrado por 27 personas, tiene bienes adquiridos desde el año 2005 que ascienden a los $9.200 millones. De acuerdo con el informe, entre 1984 y 2016, el clan Elías adquirió 56 inmuebles, de los cuales hoy sólo tiene 24 y cuyos negocios superan los $3.700 millones.

En todo caso, se aclara que el círculo del Ñoño indagado tiene un endeudamiento que ronda los $4.300 millones. En este informe de policía judicial de 80 páginas aparecen los nombres, las fotografías, números de cédula, lugares de nacimiento y nexo puntual de la guardia pretoriana de Bernardo Elías Vidal. En distintas partes del documento aparecen Julio Alberto Elías, elegido por su hermano detenido para continuar el legado de la ñoñomanía en las próximas elecciones de marzo, y Eduardo José Tous de la Ossa, quien aspira a ocupar la curul del Ñoño en el Senado. Más conocido como Joche Tous, este congresista aparece junto a Otto Bula y el Ñoño en las fotos que se tomaron en Barcelona en el estadio Camp Nou en 2016.

El reporte del CTI reseña que Érick Julio Morris Taboada –el primer parapolítico condenado en Colombia– es el suegro de Bernardo Miguel Elías, y que su hermana Johanna está casada con el exgobernador Alejandro Lyons, hoy testigo de la justicia norteamericana contra el exfiscal anticorrupción Luis Gustavo Moreno e investigado en Colombia por el saqueo a Córdoba y el crimen de Jairo Zapa, exdirector de regalías. El documento de la Fiscalía también revela los pasos empresariales del Ñoño Elías y su clan familiar. Así, por ejemplo, se lee que en la firma de ingeniería civil Diseño y Construcciones (Dicecon), en liquidación, aparecen como socios capitalistas el exalcalde Carlos Alberto Elías y el congresista Joche Tous.

El informe judicial detalla el listado de predios y matriculas inmobiliarias de la familia del excongresista, sus inversiones en la bolsa de valores y las razones sociales de sus compañías, las placas y marcas de los carros que usan, los seguros de sus vehículos, pólizas familiares, reportes de la DIAN y de la banca sobre sus maniobras financieras, aportes a pensiones y cesantías y hasta registros migratorios. Este ítem lo encabeza Bernardo Miguel Elías Vidal con 64 salidas del país, la mayoría a Panamá y Estados Unidos. La Corte Suprema tiene en su poder además unos chats de Whatsapp que hoy cobran relevancia. (En contexto: El exsenador “Ñoño” Elías quiere reducir su tiempo en la cárcel).

Uno de ellos, conocido por El Espectador, tiene como protagonistas al Ñoño y al secretario privado del presidente Santos, Enrique Riveira. En ese intercambio, del que se desconoce la fecha, el entonces senador le dice a Riveira que lo vio montándose al avión y éste le contesta: “Y por qué no me dijiste, se hubieran venido con nosotros”, en clara alusión a la comitiva del primer mandatario. Elías le dijo que iba con su fórmula a la Cámara Joche Tous y sus familias y le añade: “Bueno, pa la próxima. Saludos, Kike, me le das un abrazo a mi presidente. Muéstrale el mensaje. Un abrazo. Jajajajajá, yo soy un sapo”. Hoy el escenario es muy distinto y de aquellos tiempos en que el Ñoño hablaba de “mi presidente” ya nada queda. O quizás sí, el ventilador anunciado.

Nota del Editor: Este artículo fue modificado para eliminar información errónea que fue rectificada posteriormente. (Ver: RECTIFICACIÓN “Las perlas en el patrimonio del “Ñoño” Elías”)

Por Juan David Laverde Palma @jdlaverde9

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar