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En su informe anual sobre la situación de derechos humanos en el país, la ONU trató temas de distinta índole como son la situación de los defensores y líderes sociales, el panorama de la violencia contra reinsertados, entre otras situaciones que han marcado la agenda del país. En la edición de este año, el ente plurinacional tuvo un capítulo especial para las posibles violaciones al derecho a la reunión pacífica y la acción policial durante el paro nacional.
Uno de los primeros señalados por la ONU fue el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad). De acuerdo al informe, varios de sus miembros “no cumplieron con las normas y estándares internacionales relacionados con el uso de la fuerza”. Para la ONU, a pesar de que se hicieron advertencias previas, se presentaron posibles irregularidades durante las movilizaciones sociales de 2019 por parte del Esmad.
(Puede ver: En 2019 hubo 36 masacres en Colombia, la cifra más alta desde 2014: ONU)
“El ACNUDH documentó una presunta privación arbitraria de la vida de un estudiante de 18 años en Bogotá, cometida por un agente del Esmad armado con un rifle de calibre 12 cargado con munición del tipo ‘bean bag’”, dice el informe al reportar el caso de Dilan Cruz, el joven que le faltaba pocos días para graduarse y que murió por el resultado de un proyectil menos letal disparado por uno de los oficiales del Esmad durante las protestas del 23 de noviembre.
Según la ONU, en tres de las ciudades más importantes del país (Bogotá, Cali y Medellín) hubo varios casos en los que manifestantes tuvieron lesiones en los ojos y en cráneo por proyectiles disparados por el Escuadrón Antidisturbios. En ese bloque, el informe reseñó cifras del Ministerio de Salud que demuestran que en los primeros 5 días del paro (21-26 de noviembre) se reportaron 40 hospitalizaciones (36 manifestantes y 4 uniformados) por los disturbios durante las marchas.
Antes este panorama, la Organización de Naciones Unidas, representada en la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos en Colombia, pidió que se inicien investigaciones independientes para clarificar los casos “de presunto uso excesivo de la fuerza por parte del Esmad durante las recientes protestas sociales”.
(Vea: El año pasado, el Esmad condujo a 11.903 personas al Centro de Traslado por Protección)
Asimismo, la ACNUDH pidió una profunda transformación del Esmad. Este cambio debe incluir, según el informe, una revisión de los protocolos “sobre el uso de la fuerza y de las armas y municiones menos letales para que cumplan con las normas y estándares internacionales”.
Otras fuerzas señaladas
La ONU no solo se enfocó en el Esmad durante su informe, esta también mencionó acciones irregulares presuntamente cometidas por miembros de la Policía. Entre las conductas reprochadas que habrían sido realizadas por los uniformados está la desnudez forzada, amenazas de muerte con “matices racistas” y golpizas, todos estos hechos fueron calificados como malos tratos y/o torturas en contra de los participantes de las protestas.(Puede ver: Distrito hace cambios al protocolo de movilizaciones sociales)
“Algunos manifestantes fueron presuntamente arrestados y golpeados por miembros de la policía, trasladados a las estaciones de policía y forzados a admitir comportamientos violentos, siendo multados por ello”, declaró la ONU en el informe, en el que también se lee que hubo el caso de una mujer, cuya identidad no se revela, que fue golpeada por 5 uniformados mientras que hacía un registro en video de las protestas. Estas agresiones le causaron lesiones graves en la cabeza a la joven, señaló la entidad supranacional. En este caso la ONU hizo la advertencia de que a pesar de que la Fiscalía se hizo cargo de la investigación, solo lo catalogó como abuso de la autoridad, un cargo de limitada gravedad.
En el informe también se reseñó sobre posibles detenciones arbitrarias bajo la figura de “traslado por protección”. Según la ACNUDH, esta categoría le permite a la Policía hacer detenciones arbitrarias para limitar la libertad de los manifestantes En este caso, el informe usó como ejemplo las detenciones del 7 de diciembre en el que varias personas fueron detenidas en el aeropuerto El Dorado mientras realizaban una protesta pacífica en silencio. Bajo esta figura, de acuerdo con Policía, cerca de 1.662 personas fueron detenidas.
Por último, la ONU mencionó posibles actos de violencia en contra de periodistas y medios de comunicación durante el paro nacional. Tan solo entre el 21 y 23 de noviembre, basándose en las estadísticas llevadas por la Fundación para Libertad de Prensa, se reportaron 32 agresiones contra comunicadores, de las cuales 23 fueron posiblemente realizadas las autoridades y 9 por los manifestantes. De todos estos casos, la Oficina liderada por Alberto Brunori pudo verificar, 3 casos de uso excesivo de la fuerza y 4 detenciones arbitrarias contra periodistas.
(Para más infromación: 15 casos de agresiones a la prensa en 2019 documentados por la FLIP)
La ONU hizo especial mención sobre los allanamientos ordenados por la Fiscalía antes del paro a distintos medios de comunicación alternativos. El ente señaló que, de las 36 operaciones realizadas, 10 de ellas fueron declarada ilegales y solo dos casos llegaron a presentación de casos, pero sus acusados fueron dejados en libertad porque “la evidencia no era suficiente”.
Entre las recomendaciones frente a la protesta social, la ONU le pidió al Gobierno que restrinja el uso del Ejército en situaciones relacionadas. Además, pidió que la supervisión de la Policía pasar del Ministerio de Defensa al del Interior para “fortalecer la capacidad institucional” de esta fuerza. Además, pidió que las posibles violaciones a los derechos humanos en las que estén vinculados miembros de la Fuerza Pública sean investigadas por la justicia ordinaria.