Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
La violencia continúa siendo el principal obstáculo para que los niños vayan a las escuelas en Colombia. Las cifras son alarmantes. Por ejemplo, este martes, el Consejo Noruego para los Refugiados (NRC), una ONG internacional de ayuda humanitaria con presencia en el país, denunció un ataque a la escuela primaria ‘La Pacheca’, ocurrido en la región del Catatumbo el pasado 4 de julio.
"Este ataque brutal contra lo que se supone es un espacio seguro para que los menores de edad aprendan, crezcan y jueguen es una grave violación de los derechos del niño. Poner fin a estos ataques debe ser una prioridad para el gobierno" afirmó Christian Visnes, director nacional del NRC en Colombia. La Organización manifestó que en lo que va corrido del año, 80 escuelas han tenido que detener las clases por temor a la violencia en el Catatumbo.
Le puede interesar: Los niños siguen yendo a la guerra
Desde el NRC llaman la atención, además, sobre la situación de las escuelas en la región del Catatumbo en medio de los enfrentamientos entre los actores armados con presencia en los municipios que componen esta región de Norte de Santander. “Durante el primer semestre del año, 44.829 estudiantes y 2.285 docentes fueron obligados a suspender las clases como resultado de los enfrentamientos entre los grupos armados en el Catatumbo” señaló la organización en un comunicado.
“La educación es clave para proteger a los niños en situación de riesgo, pero también para lograr una paz duradera en Colombia. Sólo una adecuada inversión económica en la educación y una efectiva protección podrán promover una generación en paz en este territorio, disminuir el conflicto armado y contribuir a la estabilidad y el progreso económico” afirmó Visnes.
Lea también: Organizaciones de niños le piden a Iván Duque escuelas más seguras
Aunque en el Catatumbo la situación es más crítica, el panorama de la violencia contra menores, que impide el acceso a la educación, no es mejor en otras regiones del país. En la Comuna 13, por ejemplo, donde se ha venido presentando una nueva oleada de violencia, la Personería de Medellín ha denunciado un aumento en la deserción escolar. De acuerdo con Juan Fernando Gómez, personero delegado para los derechos humanos en esta ciudad, en lo que va del año, 178 estudiantes han tenido que cancelar o ausentarse de sus estudios académicos "por causa del orden público en la Comuna 13 de Medellín".
Lea: Reportan dos nuevos asesinatos en la Comuna 13
La Secretaría de Educación de Medellín no está de acuerdo con las cifras de la Personería, dado que considera que lo que está sucediendo no es deserción escolar -porque los estudiantes siguen matriculados en las instituciones- sino que es inasistencia o desescolarización. Sin embargo, tanto la Personería como la Secretaría de Seguridad de la ciudad coinciden en que la situación de orden público en la comuna está teniendo repercusiones en la asistencia de los menores a las instituciones educativas, reportando un 10% de inasistencia escolar.
A nivel nacional, la violencia contra menores también es preocupante. De acuerdo con un informe de la organización ‘Save the Children’ publicado en junio pasado, Colombia tiene la tercera tasa de homicidio infantil más alta (0 a 19 años) entre 175 países, solo superado por Honduras y Venezuela.
En dicho informe, Colombia también ocupa otra dolorosa posición: el quinto país con el mayor porcentaje de niños desplazados por el conflicto armado.
Con respecto a ello, el Consejo Noruego para los Refugiados señala que “los niños y niñas que no asisten a la escuela en las zonas de conflicto están más expuestos al reclutamiento forzado por parte de los grupos armados, y se convierten en víctimas del trabajo y el abuso infantil.”
“NRC insta al gobierno colombiano a respaldar la Declaración de Escuelas Seguras del 2015, donde los países se comprometen a proteger a los estudiantes, los docentes y los establecimientos educativos de los ataques durante los conflictos armados. 75 naciones han firmado la declaración hasta el momento", puntualiza.