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El barrio San Alonso, de Bucaramanga, amaneció el miércoles con panfletos amenazantes hacia migrantes venezolanos que residen en la ciudad. En el pasquín advertían que había llegado “la hora de limpieza” para toda la zona.
La amenaza supuestamente firmada por el bloque central Colombia de las Águilas Negras, aseguró que dicha limpieza “se hará por petición de la misma ciudadanía” e indicó que daban 48 horas a los comerciantes del sector reemplazar el personal venezolano de sus negocios.
Por medio de una carta, el embajador de Venezuela en Colombia designado por Juan Guaidó, Humberto Calderón Berti, denunció las amenazas y señaló que agradecería a las autoridades colombianas una investigación al respecto.
En el mismo documento, el diplomático venezolano se dirigió al canciller Carlos Holmes para que “se tomen las medidas de seguridad necesarias” y así garantizar la vida y protección de los ciudadanos colombianos y venezolanos que viven en Bucaramanga.
Migración Colombia rechazó las amenazas a través de un comunicado. En el documento aseguran que un equipo de la institución viajará a la capital de Santander para adelantar una reunión en la que se analizará la situación con las autoridades locales.
Además, la entidad solicitó a Dirección de Seguridad Ciudadana de la Policía iniciar las investigaciones pertinentes y dar con el paradero de quienes están detrás de estos panfletos.
“La gran mayoría de los venezolanos son personas de bien, personas que han tenido que migrar por necesidad y han llegado a Colombia con la esperanza de tener un futuro”, señaló Andrés Martínez, director encargado de Migración Colombia.
La vicepresidenta Marta Lucía Ramírez, rechazó las amenazas a través de Twitter y aseguró que en el país no hay espacio para el odio ni para este tipo de actos.
La comunidad también se pronunció ante los pasquines que aparecieron en la ciudad y solicitan a las autoridades que verifiquen la procedencia y veracidad de estos.