En el consejo de ministros del pasado 30 de septiembre, el presidente Iván Duque aceptó el impedimento presentado por el ministro de Ambiente, Ricardo Lozano, para emitir un concepto ante el consejo consultivo de la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) dentro del proceso de licenciamiento del proyecto de explotación de oro que promueve la empresa Sociedad Minera de Santander (Minesa).
En su lugar, el Ejecutivo expidió el decreto 1787 del 4 de octubre a través del que nombra como minambiente ad hod al actual ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, quien será el encargado de llevar dicho concepto ante el consejo consultivo.
Sin embargo, el nombramiento en encargo de Carrasquilla no cayó muy bien en algunos sectores políticos de la oposición. El senador de la Alianza Verde, Antonio Sanguino, llamó la atención en su cuenta de Twitter ante la delegación de ese asunto en el minhacienda.
“Eso es como mandar a un pirómano a apagar un incendio. Eso tiene que ver con la solicitud de explotación de Minesa contra la que se han movilizados miles de personas en Bucaramanga y Santander y que busca explotar y convertir el área cerca del páramo de Santurbán, que hoy es un reservorio de agua y un patrimonio, e un escenario de explotación de oro”, comentó el congresista, para quien se debió designar a un ministro más cercano a los temas ambientales.
En efecto, se trata del proceso de otorgamiento de una licencia que Minesa solicitó al Gobierno en enero de este año en la que pide autorización para explotar oro en Soto Norte (Santander), una zona adyacente al páramo de Santurbán, cercana a los municipios de California y Suratá. En esa fecha, la multinacional minera presentó un nuevo estudio de impacto ambiental y se había planteado, incluso, la reubicación de algunas familias.
La presentación de esa solicitud fue la segunda, luego de que en marzo de 2018 la minera retirara un primer estudio de impacto ambiental que había sido entregado en agosto de 2017. La intención de Minesa de explotar la zona ha generado protestas por parte de la comunidad, que en varias ocasiones ha pedido a las autoridades locales de California que aprueben una consulta popular para rechazar la realización de proyectos mineros.
En varios documentos presentados al Gobierno, Minesa ha asegurado que el proyecto Soto Norte está localizado en los municipios de California y Suratá, “por fuera de los límites del páramo de Santurbán”.
“Minesa honra con este proyecto minero su compromiso de conservar la calidad y la cantidad de los recursos hídricos accediendo a fuentes de agua subterráneas independientes, sin afectar la oferta hídrica de los acueductos municipales ni veredales incluyendo el metropolitano de Bucaramanga, a la vez que no interfiere con el ecosistema delimitado del páramo de Santurbán”, dice en uno de los estudios de impacto ambiental presentador por la multinacional.
La operación de este proyecto fue negada recientemente por la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, argumentando que la preparación de la obra, la explotación, la construcción de la mina, la extracción y el cierre, estimado para 2043, va en detrimento de los recursos naturales del ecosistema.
Vea el decreto 1787 de 2019