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En medio de la crisis por el coronavirus, desde el Instituto Anticorrupción se revelaron los primeros resultados de CabilVeo, proyecto que busca establecer visitas, viajes, regalos a los funcionarios del gobierno y así identificar acciones de cabildeo que podría estar influenciando sus actuaciones. Entre las primeras denuncias hechas por el proyecto están las reuniones que, a puerta cerrada, tuvo el ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, con excongresistas vinculados con la parapolítica y otros exfuncionarios vinculados a escándalos de corrupción e irregularidades.
Tras acceder a la información sobre los registros del Ministerio Hacienda, el proyecto CabilVeo encontró que la cabeza de la cartera de Hacienda tuvo reuniones a puerta cerrada en su despacho con el condenado por parapolítica Miguel Pinedo Vidal y su hijo, el representante José Luis Pinedo; el también parapolítico Juan Manuel López Cabrales y su esposa, y concejal de Montería, Arleth Casado; entre otros señalados de haber favorecido a los paramilitares con sus acciones en el Congreso.
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El Espectador tuvo la oportunidad de dialogar con Camilo Enciso, cabeza del Instituto Anticorrupción sobre estos y más hallazgos que encontraron al revisar los registros del Ministerio de Hacienda y otras dependencias. Estas últimas revelaciones, según Enciso, prenderían las alarmas sobre los encuentros que estarían llevando a cabo los magistrados del Consejo Nacional Electoral (CNE).
¿Cuáles fueron los hallazgos que hicieron al revisar las visitas al Ministro de Hacienda?
Encontramos que el ministro Alberto Carrasquilla se ha reunido repetidamente con personas de dudosa reputación, incluyendo excongresistas condenados por parapolítica, con otros condenados por corrupción y con personas involucradas con el caso del abuso de poder del DAS durante la era Uribe. Entre ellos los excongresistas Miguel Pinedo, Juan Manuel López Cabrales, Luis Eduardo Vives Lacouture, Jesús Bernal Amorocho y Mario Aranguren, quien siendo director de la UIAF le pasaba a la Coneja (María del Pilar Hurtado), directora del DAS de ese momento, información clasificada sobre movimientos financieros de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia que en esa época investigaban la parapolítica.
¿Se tiene alguna idea de los temas que fueron tocados por estas personas relacionadas con la parapolitica y el ministro de Hacienda?
El Ministerio de Hacienda dio una respuesta absolutamente insatisfactoria, publicada ayer por El Poder, el programa que dirige Ariel Ávila. A mí me parece que el Congreso de la República debería tomar cartas en el asunto y pedirle al ministro en un debate de control político que explique esas reuniones. El retorno de los parapolíticos a los despachos de los ministros es un asunto demasiado serio como para dejarlo pasar por alto.
¿Hay otros hallazgos similares en otras dependencias?
Esto lo contaremos con mayor detalle en una próxima entrega de CabilVeo, pero a modo de chiva puedo contar que hemos encontrado reuniones de magistrados del Consejo Nacional Electoral con cabezas de algunas entidades ejecutoras. Uno se pregunta: ¿Qué podrían estar hablando los magistrados con las cabezas de entidades que no tienen absolutamente nada que ver con su función? Que cada quién saque sus conclusiones.
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Además de relacionados con la parapolitica, ¿Hay otros hallazgos que prendan las alarmas frente al ministerio de Hacienda?
Pues a mí me parece que los resultados que arroja encienden alarmas serias en otros frentes. En particular en la forma en que opera la democracia. Uno ve al ministro reunido con banqueros, grandes empresarios, gente poderosa, pero no ve reuniones con las asociaciones campesinas, con los pequeños confeccionistas, con los maestros, con líderes estudiantiles. Para completar, el 72% de todas las reuniones son con hombres, frente a un 28% con mujeres. Y si se trata de congresistas, 84% son hombres y solo 16% mujeres. Mejor dicho, acá la mayor influencia sobre cómo se hace la política tributaria, fiscal, de gasto público, etc., la están ejerciendo los banqueros y empresarios, los poderosos y el género masculino, sin mayor participación del resto del país y de las mujeres.
¿Estos hallazgos podrían ser un ejemplo de gobierno en cuerpo ajeno, que estos caciques condenados siguen mandando escudados en sus familiares?
Sin duda. Los resultados que nos arroja CabilVeo comprueban, con evidencia documental en mano, cómo funciona el testaferrato político y la mermelada en Colombia. Esa mermelada que nos dijeron que no existía. Puro cuento.
¿Cuál fue la respuesta que les dio el Ministerio de Hacienda frente a estás visitas?
Me permito citar la respuesta del Ministerio Hacienda: “el estado judicial de las personas son materia de interés para las autoridades judiciales. Si bien es posible que algunos tengan antecedentes, hoy se encuentran en libertad porque su situación ha sido juzgada y han sido absueltos o sus penas surtidas y su situación judicial redimida”. Debería darles vergüenza, tanto el fondo como la forma de su respuesta. Especialmente si se tiene en cuenta que los parapolíticos nunca le pidieron perdón al país, nunca se comprometieron con la paz y la reconciliación, taparon y negaron con cinismo sus crímenes hasta el final. Y muchos parecerían seguir sintiéndose orgullosos de la violencia que ayudaron a engendrar.
¿Pudieron encontrar alguna relación entre las visitas al ministerio y alguna de las decisiones tomadas por Carrasquilla?
Estamos revisando esto con detalle. Esperamos compartir los hallazgos de esa parte de nuestra investigación pronto.
¿Cómo va el desarrollo de CabilVeo?
Muy bien. Estamos procesando la información de 40 entidades del Estado. Ahora estamos empezando a mirar no solo información de ingresos a entidades del Gobierno Nacional, sino también al Consejo Nacional Electoral, el Consejo de Estado y la Corte Suprema de Justicia. Creemos que con toda la información que hemos obtenido y estamos procesando contribuiremos a construir una radiografía valiosísima de cómo funcionan los hilos del poder en Colombia.