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En la medida en que se van acercando las discusiones de fondo en el Congreso de cara a nuevas reformas para el país, varios sectores aún con dudas frente al ánimo constructivo del gobierno para lograr la reconciliación han querido profundizar en lo propuesto por el presidente Iván Duque para tomar una determinación definitiva. Es el caso del partido de la U que, aunque se declaró oficialmente del lado del gobierno, aún presenta profundas divisiones con quienes comulgaron del lado de las políticas del expresidente Juan Manuel Santos.
En una carta firmada, entre otros, por los congresistas Roy Barreras, Armando Benedetti y Rooslvet Rodríguez, le plantean al presidente Iván Duque un diálogo para conocer detalles del gran pacto social por Colombia que propone. “Estamos seguros de que ese diálogo constructivo permitirá encontrar cada vez más puntos de acuerdo que nos permitan acompañar las iniciativas y políticas públicas que usted lidere”, señalan. No obstante, los legisladores aclaran que quieren ejercer la independencia y el control político de aquellas propuestas que consideren inconvenientes para el país.
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Desde esa perspectiva, lanzan una crítica a su propia colectividad en el sentido de que, aunque en el pasado defendió el Acuerdo de Paz, decidió adherir a la candidatura de Duque pese a que su partido, el Centro Democrático, fue férreo crítico del mismo. “Sólo la coherencia ideológica y la identificación programática generan alianzas sólidas. Las adhesiones ciegas y sin sustento programático suelen ser frágiles, deleznables y de corto vuelo”, agrega la carta enviada al primer mandatario.
Esos sí, los ‘disidentes’ de la U aclaran que no pretenden, bajo ningún contexto, ejercer oposición y menos aún, una de talante “destructivo” o “hirsuto” pues reconocen que el jefe de Estado sí tiene el compromiso de implementar lo pactado en Cuba con la hoy desarmada guerrilla de las Farc. “El partido de la U reconoce sus reiteradas expresiones en favor de la implementación de la paz y la creación de un clima de reconciliación y unidad”, dice la carta.
Finalmente, junto a la carta, los congresistas firmantes le entregaron al primer mandatario un documento en el que expresan sus principios en torno a temas que consideran fundamentales para Colombia, además de mantener el compromiso con el Acuerdo de Paz. Entre ellos, la solución dialogada a los conflictos (como el del Eln), la promoción de una política de desarrollo rural integral, o la reforma política.