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Tras 12 años de militancia en el Partido de la U, este jueves el senador Roy Barreras anunció su “ruptura definitiva” de la colectividad, hoy declarada partido de gobierno. Según el congresista, las diferencias ideológicas a esas mayorías que respaldan al gobierno de Iván Duque “han generado una fractura irreparable”.
Hace casi un mes, Barreras –quien incluso propone un referendo con cuatro preguntas, entre ellas, revocar el mandato del presidente vía Constitución (ver abajo)–, había insistido en la escisión del partido, es decir, la división o separación de este sin que pierda su personería jurídica. Incluso, ante la renuncia de Barreras a la colectividad, se abrió el debate de si el propio senador pierde o no su curul, bajo el entendido de que los escaños pertenecen a los partidos.
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Ante ello, el congresista dio cuenta de fallos del Consejo de Estado que indican, según su interpretación, que en tanto no haya una expulsión formal, no se pierde la curul, pues “está de por medio el derecho fundamental a elegir y ser elegido y la voluntad de quienes con su voto permitieron la elección del respectivo congresista”. De acuerdo con Barreras, así las cosas, “queda sin pertenecer a ninguna bancada y actuando en libertad”.
Sin embargo, desde ya hay quienes dicen que, bajo los términos de la ley 974 de 2005, que reglamenta la actuación en bancadas, Barreras podría llegar a ser sancionado. En su artículo 4, el proyecto reza: “El retiro voluntario de un miembro de corporación pública del partido o movimiento político o ciudadano en cuyo nombre se eligió, implica el incumplimiento del deber de constituir bancada, y como tal podrá sancionarse como una violación al Régimen de Bancada en los términos de la Constitución y la ley”.
En su carta de renuncia, el senador aseguró que apostará por la construcción de una fuerza colectiva que “recupere los caminos de la paz completa” y de una sociedad más justa y equitativa. En esa línea, sostuvo que será necesario “la suma de todas las voluntades” para ofrecerle a Colombia una alternativa democrática y legítima “que derrote un régimen cada vez más autoritario”.
Barreras recordó el legado del expresidente Juan Manuel Santos, fundador del partido, destacando la vocación de construcción de paz, reivindicación de las víctimas y solución dialogada de conflictos. No obstante, recordó que en 2018 llegó al poder el Centro Democrático y que, pese a que se opuso al gobierno, la U terminó adhiriendo y declarándose partido afín a este.
“No habían transcurrido dos meses del nuevo gobierno cuando en una inexplicable e incoherente decisión, el 5 de septiembre del 2018, las mayorías parlamentarias de la U decidieron proclamarse partido de gobierno, acompañando al Centro Democrático en sus propósitos hostiles contra el legado de paz de Juan Manuel Santos”, reprochó Barreras, quien dijo que desde entonces se declaró en independencia.
Incluso, alertó por “la radicalización hacia la extrema derecha del gobierno”, reclamando que dicha actitud contó con la activa participación del Partido de la U. También hizo referencia a la decisión de la bancada parlamentaria de la colectividad de apoyar la elección de Margarita Cabello como procuradora General, “sirviendo al propósito de la concentración de poder de un gobierno cada vez menos democrático, y cada vez más arrogante y autoritario”.
El senador dijo también que por oponerse a esa determinación y su intención de promover una moción de censura contra el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, “ha generado fuertes reacciones y presiones en público y en privado de otros miembros del Partido de la U que no comparten mis críticas a este gobierno”.
“Todas las separaciones son dolorosas. Los divorcios son indeseables, pero a veces son inevitables. A mis excompañeros en lo personal les deseo mucha suerte en sus caminos, aunque auguro que compartirán el destino de este gobierno que desafortunadamente para el país va de mal en peor. Cuenten conmigo; los espero en el futuro, ojalá compartiendo el propósito de construir una paz completa y un país donde quepamos todos y cada colombiano y cada colombiana tengan las oportunidades que se merecen”, precisa Barreras en su carta.
Propuesta de referendo
Barreras anunció además que promoverá un referendo para que, a través la participación ciudadana, se someta a consideración del pueblo cuatro propuestas. La primera de ellas es que, tal como sucede con alcaldes o gobernadores, se consagre la revocatoria del mandato presidencial.
Según el senador, dicha figura tendría validez siempre y cuando haya “falta de gestión del Gobierno Nacional”, decrecimiento en materia económica que implique un aumento en más de diez puntos porcentuales en los índices de pobreza monetaria y en más de cinco puntos porcentuales en los índices de pobreza extrema, o cuando los indicadores de desempleo y de pobreza extrema se hayan deteriorado en más de un 50 %.
Adicionalmente, cuando se compruebe deterioro del orden público y la seguridad ciudadana de conformidad con el aumento de las cifras de homicidios, homicidios contra líderes sociales y defensores de derechos humanos, masacres, desplazamientos forzados, hurtos a personas y se limite la implementación del Acuerdo de Paz.
“Un porcentaje equivalente al 10 % de los miembros del Senado y la Cámara de Representantes, una vez haya transcurrido un término mínimo de dos años de gobierno, podrá solicitar a los órganos oficiales correspondientes la certificación de estas cifras”, reza la iniciativa, que insta a la Registraduría a convocar a la ciudadanía en un término de 30 días, una vez sea presentada la solicitud por parte del Congreso de la República.
Para la aprobación de la revocatoria se requerirá que el número de sufragios sea igual o superior al 40 % de los votos válidos emitidos el día de la elección. La decisión ciudadana se tomará por mayoría simple.
En segundo lugar, se propone que los colombianos tengan derecho a percibir un salario mínimo universal. Tercero, una pensión universal y una mesada mínima mensual de carácter vitalicio. Finalmente, se propone que el acceso a la educación pública sea gratuito.