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Lamentablemente, muchas han sido las personas que han fallecido o han tenido graves secuelas en su salud, por haberse sometido a una cirugía plástica o estética irregular en el país.
Uno de los casos más sonados en los últimos años hace referencia a la agente de inteligencia de la Policía Nacional, Deisy Garzón, de 35 años, que falleció el 5 de agosto de 2014 por un mal procedimiento estético. Casos como este se dan a conocer con una periodicidad alarmante, registrándose un deceso casi mensual, por fallas en las cirugías plásticas.
Este panorama recalcó en el Congreso de la República la necesidad de regular dicha profesión para evitar futuras tragedias por las malas prácticas en las cirugías.
Es así como empezó a tramitarse en el Senado el llamado proyecto de ley ‘Jessica Cediel’, presentadora que es otra de las víctimas reconocidas de quienes se dedican a llevar a cabo cirugías estéticas irregulares. A la modelo en 2009 le fueron inyectados biopolímeros en los glúteos en un procedimiento estético fraudulento.
El proyecto tiene como objetivo reglamentar el ejercicio de la cirugía plástica, estética y reconstructiva, con el fin de que se brinde por personal idóneo y en condiciones de seguridad y salubridad para el paciente.
Al respecto, crea el Registro Único de la Profesión Médica. El propósito es que el Ministerio de Salud cree un listado de médicos que contará con información actualizada al público sobre las personas acreditadas para ejercer la medicina y sus especialidades. En éste aparecerán relacionados el nombre, documento de identificación, títulos académicos y la universidad o institución que los otorgó. Así cualquier ciudadano podrá buscar al médico en el Registro antes de someterse a una cirugía plástica.
Frente a las responsabilidades, la iniciativa también establece que responderá solidaria e ilimitadamente, quien lleve a cabo un procedimiento quirúrgico regulado por esta ley, que no reúna los requisitos.
El proyecto vivirá esta semana un momento decisivo en la Plenaria del Senado pues se encuentra en el orden del día para ser discutido en segundo de cuatro debates con el ánimo de evitar futuras tragedias relacionadas con la mala práctica de cirugías plásticas.