Es de su entero conocimiento que nuestra familia durante varias generaciones ha sido amiga y colaboradora de este diario, y que, como ciudadanos, hemos servido al país en la mejor de nuestras capacidades de manera honorable, correcta y con absoluto respeto a la legalidad.
Escribo solicitando una rectificación, debido a que esta es la segunda vez en que se vincula mi nombre a actividades a las que he sido totalmente ajeno en materia de contratación estatal, y pido que se desliguen el nombre y la foto de mi señor padre Fabio Echeverri Correa (Q.E.P.D.), y el nombre de mi hijo, Emanuel Echeverri Correa, del contexto del artículo “Los contratistas cercanos al Centro Democrático que reconstruyeron San Andrés”, que habla de contratos estatales cuestionados, durante la administración Duque, ya que nunca fuimos consultados en la materia por quien escribe el artículo, y nunca hemos sido contratistas del Estado colombiano por lo cual resulta inexplicable e inconcluyente la forma en que se trata de vincular nominalmente nuestro buen nombre al fundamento del escrito, sin ninguna relación de causalidad debidamente acreditada.
Ignoro la intención con la cual se escribe el artículo, no viene al caso entrar en esa materia. Pero es importante que en un país que pasa por un momento tan complejo en materia de corrupción e inseguridad, se maneje con respeto la vinculación de nuestros nombres, en este caso acompañados de una fotografía de mi padre, en un asunto tan delicado, sin que medien acusaciones concretas ni pruebas vinculantes que demuestren fundamento real alguno.
Como ustedes mejor que nadie lo saben, este tipo de errores, presumo que involuntarios, eventualmente pueden engañar al lector al llevarlo a inferir que, por aparecer mencionados allí, no somos nosotros personas correctas y honorables, lo cual puede afectar nuestro buen nombre, la memoria de mi padre, y nuestra seguridad personal. Al final de cuentas como lo han sido ustedes en los medios, somos personas que hemos contribuido con nuestro trabajo honorable a nuestra sociedad democrática, en nuestro caso entre otras, con el manejo de varias campañas presidenciales debidamente acreditadas por las autoridades.
Luis Guillermo Echeverri Vélez.
R: Ha lugar que la inclusión en la versión digital del artículo de una fotografía de Fabio Echeverri Correa resultaba impropia, y por eso fue eliminada. La información incluida en un párrafo de contexto en el artículo es, en cambio, cierta y relevante, además de no incriminatoria en sentido alguno.
Envíe sus cartas a lector@elespectador.com
Es de su entero conocimiento que nuestra familia durante varias generaciones ha sido amiga y colaboradora de este diario, y que, como ciudadanos, hemos servido al país en la mejor de nuestras capacidades de manera honorable, correcta y con absoluto respeto a la legalidad.
Escribo solicitando una rectificación, debido a que esta es la segunda vez en que se vincula mi nombre a actividades a las que he sido totalmente ajeno en materia de contratación estatal, y pido que se desliguen el nombre y la foto de mi señor padre Fabio Echeverri Correa (Q.E.P.D.), y el nombre de mi hijo, Emanuel Echeverri Correa, del contexto del artículo “Los contratistas cercanos al Centro Democrático que reconstruyeron San Andrés”, que habla de contratos estatales cuestionados, durante la administración Duque, ya que nunca fuimos consultados en la materia por quien escribe el artículo, y nunca hemos sido contratistas del Estado colombiano por lo cual resulta inexplicable e inconcluyente la forma en que se trata de vincular nominalmente nuestro buen nombre al fundamento del escrito, sin ninguna relación de causalidad debidamente acreditada.
Ignoro la intención con la cual se escribe el artículo, no viene al caso entrar en esa materia. Pero es importante que en un país que pasa por un momento tan complejo en materia de corrupción e inseguridad, se maneje con respeto la vinculación de nuestros nombres, en este caso acompañados de una fotografía de mi padre, en un asunto tan delicado, sin que medien acusaciones concretas ni pruebas vinculantes que demuestren fundamento real alguno.
Como ustedes mejor que nadie lo saben, este tipo de errores, presumo que involuntarios, eventualmente pueden engañar al lector al llevarlo a inferir que, por aparecer mencionados allí, no somos nosotros personas correctas y honorables, lo cual puede afectar nuestro buen nombre, la memoria de mi padre, y nuestra seguridad personal. Al final de cuentas como lo han sido ustedes en los medios, somos personas que hemos contribuido con nuestro trabajo honorable a nuestra sociedad democrática, en nuestro caso entre otras, con el manejo de varias campañas presidenciales debidamente acreditadas por las autoridades.
Luis Guillermo Echeverri Vélez.
R: Ha lugar que la inclusión en la versión digital del artículo de una fotografía de Fabio Echeverri Correa resultaba impropia, y por eso fue eliminada. La información incluida en un párrafo de contexto en el artículo es, en cambio, cierta y relevante, además de no incriminatoria en sentido alguno.
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