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Sobre la estrategia del Gobierno con las Fuerzas Armadas y las cuencas en Bogotá

Cartas de los lectores
14 de noviembre de 2024 - 05:00 a. m.
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El deseo del Gobierno con las Fuerzas Militares

A propósito del editorial del 6 de noviembre, titulado “Sembrar terror no protege a las Fuerzas Armadas”. Como dice el dicho: “Más claro no canta el gallo”. Excelente análisis, sin sesgo, sin cizaña e interpretando objetivamente la nueva estrategia. Solo que queda al descubierto la forma malintencionada y ruin con la que la oposición quiere presentar las decisiones del actual gobierno. El Gobierno del presidente Petro jamás ha querido amarrar las manos de las FF. MM.; solo quiere que esas manos no se ensucien con sangre como en el pasado reciente.

Javier Marín Padilla


La tarea pendiente del ordenamiento de cuencas en Bogotá

Estoy totalmente de acuerdo con el editorial del 8 de noviembre, titulado “Soluciones urgentes para Bogotá”, y con lo que expresa Sabina, la nieta de nuestro recordado científico y maestro Thomas van der Hammen, en general con todos sus planteamientos; solo que el problema es mayor.

Hace más de 24 años comenzamos a cumplir con una tarea que precisamente nos dejó Thomas van der Hammen ante la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR). En mi trabajo desde la Secretaría Distrital de Ambiente y fuera de ella, he estado enfocado en el ordenamiento de las cuencas Fucha, Salitre y Tunjuelo, pero los avances siempre se ven truncados por los cambios de gobierno distrital, lo que impide que se cumpla el ordenamiento ambiental que necesita todo el sistema hídrico (ríos, quebradas y humedales, reconocidos y no reconocidos).

¿Sabían ustedes que los ríos Fucha, Salitre y Tunjuelo tienen formulación de ordenamiento de cuenca y que esta no se ha cumplido?

Son muchas más las situaciones, pero lo que puedo asegurar, en síntesis, es que el Acuerdo 790 de 2020 del Concejo de Bogotá, D. C., por el cual se declara la emergencia climática en Bogotá, se reconoce como un asunto prioritario de gestión pública y se definen lineamientos para la adaptación, mitigación y resiliencia frente al cambio climático. Este acuerdo seguirá vigente mientras no se cumpla el ordenamiento ambiental del Distrito Capital, con determinantes ambientales que trasciendan al menos tres planes de desarrollo distrital.

Pedro Julio Aldana Alonso

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