Por: Camilo A. Enciso V.
El pasado 22 de julio de 2019 la Empresa Férrea Regional S.A.S. publicó el Aviso de Invitación Pública para la contratación de un concesionario que desarrolle el Proyecto Regiotram de Occidente, el cual debe conectar a Bogotá con Facatativá. El Regiotram de Occidente es un proyecto que ha madurado bajo el liderazgo del gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, y que busca beneficiar a más de 130,000 pasajeros cada día.
La licitación que se adelantó desde finales de julio, LP-EFR-009 de 2019, ha contado desde entonces con el interés nutrido de un grupo importante de empresas que cuentan con la capacidad y experiencia para desarrollar el proyecto. Curiosamente, sin embargo, como resultado del proceso de licitación se presentó un único proponente: la compañía China Railway ConstructionCorporation Ltd., de propiedad estatal.
Las demás empresas decidieron no participar en la licitación, después de haber expresado por diferentes medios, incluyendo concurridas audiencias públicas, que los pliegos de condiciones que definían los términos del proyecto tenían serias deficiencias, y que tenían la potencialidad de direccionar el contrato.
A pesar de las advertencias de los proponentes interesados, la licitación siguió su curso. Según información publicada en la página web de la Empresa Férrea Regional S.A.S., el 23 de diciembre de 2019 tendrá lugar a las nueve de la mañana la audiencia de adjudicación del contrato, que asciende a 3,4 billones de pesos, un dineral. A modo de contraste, el presupuesto para todo el sector agrícola del país durante el 2020 será de 1,8 billones de pesos. Si todo avanza como va, muy probablemente la Empresa Férrea Regional S.A.S. adjudicará el contrato a la empresa china.
Ahora bien, resulta que el 4 de junio de 2019 la única proponente fue incluida en la Lista Negra de Contratistas del Banco Mundial, al igual que sus subsidiarias China Railway23rd Bureau Group Co. Ltd., China Railway Construction Corporation International Ltd. y 730 empresas vinculadas a ellas que operan en todo el mundo, prohibiendo contratar con ellas por al menos nueve meses.
La inclusión de China Railway Construction Corporation Ltd. en la Lista Negra se debió que el Banco Mundial comprobó que durante la etapa de precalificación y durante la licitación para la construcción de una carretera en Georgia, suministró información fraudulenta sobre el personal y el equipo con el que contaba. Adicionalmente atribuyó falsamente la experiencia de otras empresas de su grupo empresarial a la empresa oferente. Según la Guía de Contratación del Banco Mundial ese tipo de conductas son consideradas prácticas fraudulentas.
Si bien la ley general de contratación pública vigente en Colombia, la Ley 80, no establece como una causal de inhabilidad para contratar con el Estado el hecho de estar incluido en la Lista Negra del Banco Mundial, lo cierto es que el hecho de estar incluido en esa lista por entregar información fraudulenta a las entidades contratantes de otro país, así como el hecho de ser el único proponente en la licitación del Proyecto Regiotram de Occidente, es un campanazo que llama a realizar una revisión exhaustiva de todo el proceso de licitación, así como de la compañía proponente y de la información y documentación aportada.
Si bien en la administración pública debe primar el principio de presunción de buena fe, también es cierto que es aún más importante el deber de actuar con la debida diligencia para proteger el patrimonio público y la moralidad administrativa, como se evidencia en los artículos 209 y 267 de la Constitución. En caso de encontrar irregularidades debería declararse desierto el proceso de licitación, de conformidad con el artículo 25 de la Ley 80. Seguir adelante negligentemente con el proceso,después de encontrar alguna irregularidad, sería transgredir de manera grave el principio de selección objetiva. El gobernador Rey y su equipo aún están a tiempo de poner el freno de mano y dedicarse unos días más para revisar con calma de manera integral todos los factores de riesgo que rodean esta licitación. Les tocó posponer las vacaciones.
Por: Camilo A. Enciso V.
El pasado 22 de julio de 2019 la Empresa Férrea Regional S.A.S. publicó el Aviso de Invitación Pública para la contratación de un concesionario que desarrolle el Proyecto Regiotram de Occidente, el cual debe conectar a Bogotá con Facatativá. El Regiotram de Occidente es un proyecto que ha madurado bajo el liderazgo del gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, y que busca beneficiar a más de 130,000 pasajeros cada día.
La licitación que se adelantó desde finales de julio, LP-EFR-009 de 2019, ha contado desde entonces con el interés nutrido de un grupo importante de empresas que cuentan con la capacidad y experiencia para desarrollar el proyecto. Curiosamente, sin embargo, como resultado del proceso de licitación se presentó un único proponente: la compañía China Railway ConstructionCorporation Ltd., de propiedad estatal.
Las demás empresas decidieron no participar en la licitación, después de haber expresado por diferentes medios, incluyendo concurridas audiencias públicas, que los pliegos de condiciones que definían los términos del proyecto tenían serias deficiencias, y que tenían la potencialidad de direccionar el contrato.
A pesar de las advertencias de los proponentes interesados, la licitación siguió su curso. Según información publicada en la página web de la Empresa Férrea Regional S.A.S., el 23 de diciembre de 2019 tendrá lugar a las nueve de la mañana la audiencia de adjudicación del contrato, que asciende a 3,4 billones de pesos, un dineral. A modo de contraste, el presupuesto para todo el sector agrícola del país durante el 2020 será de 1,8 billones de pesos. Si todo avanza como va, muy probablemente la Empresa Férrea Regional S.A.S. adjudicará el contrato a la empresa china.
Ahora bien, resulta que el 4 de junio de 2019 la única proponente fue incluida en la Lista Negra de Contratistas del Banco Mundial, al igual que sus subsidiarias China Railway23rd Bureau Group Co. Ltd., China Railway Construction Corporation International Ltd. y 730 empresas vinculadas a ellas que operan en todo el mundo, prohibiendo contratar con ellas por al menos nueve meses.
La inclusión de China Railway Construction Corporation Ltd. en la Lista Negra se debió que el Banco Mundial comprobó que durante la etapa de precalificación y durante la licitación para la construcción de una carretera en Georgia, suministró información fraudulenta sobre el personal y el equipo con el que contaba. Adicionalmente atribuyó falsamente la experiencia de otras empresas de su grupo empresarial a la empresa oferente. Según la Guía de Contratación del Banco Mundial ese tipo de conductas son consideradas prácticas fraudulentas.
Si bien la ley general de contratación pública vigente en Colombia, la Ley 80, no establece como una causal de inhabilidad para contratar con el Estado el hecho de estar incluido en la Lista Negra del Banco Mundial, lo cierto es que el hecho de estar incluido en esa lista por entregar información fraudulenta a las entidades contratantes de otro país, así como el hecho de ser el único proponente en la licitación del Proyecto Regiotram de Occidente, es un campanazo que llama a realizar una revisión exhaustiva de todo el proceso de licitación, así como de la compañía proponente y de la información y documentación aportada.
Si bien en la administración pública debe primar el principio de presunción de buena fe, también es cierto que es aún más importante el deber de actuar con la debida diligencia para proteger el patrimonio público y la moralidad administrativa, como se evidencia en los artículos 209 y 267 de la Constitución. En caso de encontrar irregularidades debería declararse desierto el proceso de licitación, de conformidad con el artículo 25 de la Ley 80. Seguir adelante negligentemente con el proceso,después de encontrar alguna irregularidad, sería transgredir de manera grave el principio de selección objetiva. El gobernador Rey y su equipo aún están a tiempo de poner el freno de mano y dedicarse unos días más para revisar con calma de manera integral todos los factores de riesgo que rodean esta licitación. Les tocó posponer las vacaciones.