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                                                                                                                                Deepak Chopra y el misticismo cuántico

                                                                                                                                De plácemes debe estar la comunidad “New Age” en Colombia con la visita anunciada de su máximo gurú, Deepak Chopra.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Pero cualquiera que posea una fórmula para detener el paso inexorable de los años merece reclamar sumas aún mayores. El problema es cobrar cuando el mismo inventor de ese elixir de la eterna juventud luce viejo y canoso. Al parecer, ni la meditación trascendental ni la herbolaria ayurvédica le fueron provechosas al otrora vigoroso autor de “Cuerpos sin edad, mentes sin tiempo”.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Solo un hombre con la confianza en sí mismo y la arrogancia de Chopra es capaz de reclamarles a científicos de renombre mundial, que si su discurso les resulta incomprensible, es porque carecen de la preparación para entenderlo, cuando en realidad lo que hay detrás es palabrería, pareidolia verbal al mejor estilo de un posmoderno esotérico. He aquí un buen ejemplo: “Somos campos localizados de energía e información con bucles de retroalimentación cibernética que interactúan con campos no locales de energía e información”. La fórmula se repite en la literatura seudocientífica, como en el siguiente texto, esta vez de un “experto en hipnosis y medicina poliédrica”: “El cuerpo humano posee un campo electromagnético que lo rodea (cuerpo bioplásmico): auras, chakras: centros de energía… Cuando la enfermedad aparece se altera ese campo, la vibración diferente va a anunciar que el daño físico va a aparecer, o que ya existe una lesión”. Las analogías con ondas y vibraciones fascinan a los bioenergéticos, y Chopra no se queda atrás. En cierta ocasión manifestó que el virus del SIDA podía ser tratado utilizando "sonido primordial ayurvédico". El problema, supongo yo, es conseguir un instrumento que lo produzca.

                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                Quizá Chopra tenga razón al pensar que nuestras mentes construyen la realidad, si con ello hace referencia al enorme poder del lenguaje como instrumento para crear espejismos, para construir fantasías lingüísticas donde caben los conceptos más absurdos y sibilinos. De otra manera, ¿cómo se entiende que los humanos seamos capaces de “metabolizar el tiempo”? En un debate reciente con el biólogo y escritor británico Richard Dawkins, Chopra nos regala el siguiente silogismo: estamos hechos de estrellas, y tenemos consciencia, por tanto la materia deberá exhibir esta elusiva propiedad puesto que no somos otra cosa que polvo estelar.

                                                                                                                                Pero no todo lo que Chopra escribe posee siempre esa ilusoria aura de profundidad. En ocasiones su discurso es elemental, directo, abiertamente falaz, como cuando atribuye las alergias a problemas de mala digestión o cuando recomienda enjuagarse los ojos con un brebaje preparado a base de escupitajos y raspado de lengua para prevenir las cataratas, o incluso para revertirlas. Y si creíamos enterrada la teoría de los humores, resulta conveniente saber que, mediante aromaterapias, el doctor Chopra nos promete restablecer el equilibrio del Vata, el Pitta y el Kapha, los tres humores de la medicina ayurvédica. Y como tantos otros médicos alternativos, el gurú hindú no requiere costosos equipos de diagnóstico: le basta con tomarles el pulso a sus pacientes para conocer si sus energías vitales se encuentran “desbalanceadas”.

                                                                                                                                No ad for you

                                                                                                                                Algunos se preguntarán si el más célebre practicante de la medicina ayurvédica vive en India dedicado a poner sus conocimientos al servicio de los más enfermos, pobres y desvalidos. Hasta donde conozco, vive en la Jolla, California, en una mansión donde se recluye a escribir sus éxitos literarios. Y a la vez que nos predica sobre los peligros de llevar un vida materialista, alejada de la espiritualidad, el gran Gurú se la pasa viajando alrededor del mundo, no precisamente visitando hospitales de caridad, sino codeándose con los ricos y famosos, promocionando su negocio millonario.

                                                                                                                                De plácemes debe estar la comunidad “New Age” en Colombia con la visita anunciada de su máximo gurú, Deepak Chopra.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Pero cualquiera que posea una fórmula para detener el paso inexorable de los años merece reclamar sumas aún mayores. El problema es cobrar cuando el mismo inventor de ese elixir de la eterna juventud luce viejo y canoso. Al parecer, ni la meditación trascendental ni la herbolaria ayurvédica le fueron provechosas al otrora vigoroso autor de “Cuerpos sin edad, mentes sin tiempo”.

                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                PUBLICIDAD

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                                                                                                                                Solo un hombre con la confianza en sí mismo y la arrogancia de Chopra es capaz de reclamarles a científicos de renombre mundial, que si su discurso les resulta incomprensible, es porque carecen de la preparación para entenderlo, cuando en realidad lo que hay detrás es palabrería, pareidolia verbal al mejor estilo de un posmoderno esotérico. He aquí un buen ejemplo: “Somos campos localizados de energía e información con bucles de retroalimentación cibernética que interactúan con campos no locales de energía e información”. La fórmula se repite en la literatura seudocientífica, como en el siguiente texto, esta vez de un “experto en hipnosis y medicina poliédrica”: “El cuerpo humano posee un campo electromagnético que lo rodea (cuerpo bioplásmico): auras, chakras: centros de energía… Cuando la enfermedad aparece se altera ese campo, la vibración diferente va a anunciar que el daño físico va a aparecer, o que ya existe una lesión”. Las analogías con ondas y vibraciones fascinan a los bioenergéticos, y Chopra no se queda atrás. En cierta ocasión manifestó que el virus del SIDA podía ser tratado utilizando "sonido primordial ayurvédico". El problema, supongo yo, es conseguir un instrumento que lo produzca.

                                                                                                                                Read more!

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                                                                                                                                Quizá Chopra tenga razón al pensar que nuestras mentes construyen la realidad, si con ello hace referencia al enorme poder del lenguaje como instrumento para crear espejismos, para construir fantasías lingüísticas donde caben los conceptos más absurdos y sibilinos. De otra manera, ¿cómo se entiende que los humanos seamos capaces de “metabolizar el tiempo”? En un debate reciente con el biólogo y escritor británico Richard Dawkins, Chopra nos regala el siguiente silogismo: estamos hechos de estrellas, y tenemos consciencia, por tanto la materia deberá exhibir esta elusiva propiedad puesto que no somos otra cosa que polvo estelar.

                                                                                                                                Pero no todo lo que Chopra escribe posee siempre esa ilusoria aura de profundidad. En ocasiones su discurso es elemental, directo, abiertamente falaz, como cuando atribuye las alergias a problemas de mala digestión o cuando recomienda enjuagarse los ojos con un brebaje preparado a base de escupitajos y raspado de lengua para prevenir las cataratas, o incluso para revertirlas. Y si creíamos enterrada la teoría de los humores, resulta conveniente saber que, mediante aromaterapias, el doctor Chopra nos promete restablecer el equilibrio del Vata, el Pitta y el Kapha, los tres humores de la medicina ayurvédica. Y como tantos otros médicos alternativos, el gurú hindú no requiere costosos equipos de diagnóstico: le basta con tomarles el pulso a sus pacientes para conocer si sus energías vitales se encuentran “desbalanceadas”.

                                                                                                                                No ad for you

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                                                                                                                                Ver todas las noticias
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