“La violencia crea más problemas sociales que los que resuelve”, Martin Luther King.
Es el momento para que la violencia en los estadios de nuestro país haga un parte total, para que lo ocurrido en el estadio Atanasio Girardot y en sus alrededores ojalá no se vuelva a presentar allí ni en ningún estadio colombiano.
Por muchas diferencias que tengamos a todo nivel: ideológico, conceptual, filosófico o económico, entre otros, la vía de buscar soluciones nunca será la violencia psíquica ni física. Cada vez se muestra más que la primera herramienta para buscar alternativas de salida es el diálogo abierto, sincero y ejemplar, acompañado de soluciones según la problemática planteada. Las partes deben ceder, cada una en su narcisismo, para poder dialogar. Entender y comprender que la humanidad actualmente requiere más momentos de tranquilidad y armonía que de zozobra y violencia.
Cada equipo, en su estructura organizacional, procedimientos, misión, visión y principios, debe tener muy claro cómo se implementarán dentro y fuera de la institución. Para que los componentes de la organización actúen bajo los parámetros anteriores, es la institución la que toma las decisiones a seguir.
En el mundo del fútbol y, en particular, en esa alianza entre clubes e hinchadas, es muy común, eso ha sido vox populi, que cada institución la desarrolla de diferentes maneras; por tanto, lo que sucede en un equipo de tanto pergamino como Nacional no es exclusivo del club verde de Antioquia. Seguramente estarán otros equipos en esa práctica, lo importante es cómo cada equipo lo ha llevado a cabo. Solo que aquí la decisión la debía tomar era el club, y eso desató todo lo ya conocido por los colombianos. Ahora lo más importante es continuar buscando acuerdos, para que se pueda retomar el camino de la tranquilidad. Los involucrados puedan continuar haciendo acciones en beneficio del club y de su hinchada. Hay importantes retos futbolísticos para el Atlético Nacional: la liga colombiana y la Copa Libertadores, donde el verde de Antioquia debe ser gran protagonista. Por el bienestar de todos, es preciso que podamos volver a tener un deporte tan importante como el fútbol en tranquilidad y respetando un valor fundamental: la vida.
🚴🏻⚽🏀 ¿Lo último en deportes?: Todo lo que debe saber del deporte mundial está en El Espectador
“La violencia crea más problemas sociales que los que resuelve”, Martin Luther King.
Es el momento para que la violencia en los estadios de nuestro país haga un parte total, para que lo ocurrido en el estadio Atanasio Girardot y en sus alrededores ojalá no se vuelva a presentar allí ni en ningún estadio colombiano.
Por muchas diferencias que tengamos a todo nivel: ideológico, conceptual, filosófico o económico, entre otros, la vía de buscar soluciones nunca será la violencia psíquica ni física. Cada vez se muestra más que la primera herramienta para buscar alternativas de salida es el diálogo abierto, sincero y ejemplar, acompañado de soluciones según la problemática planteada. Las partes deben ceder, cada una en su narcisismo, para poder dialogar. Entender y comprender que la humanidad actualmente requiere más momentos de tranquilidad y armonía que de zozobra y violencia.
Cada equipo, en su estructura organizacional, procedimientos, misión, visión y principios, debe tener muy claro cómo se implementarán dentro y fuera de la institución. Para que los componentes de la organización actúen bajo los parámetros anteriores, es la institución la que toma las decisiones a seguir.
En el mundo del fútbol y, en particular, en esa alianza entre clubes e hinchadas, es muy común, eso ha sido vox populi, que cada institución la desarrolla de diferentes maneras; por tanto, lo que sucede en un equipo de tanto pergamino como Nacional no es exclusivo del club verde de Antioquia. Seguramente estarán otros equipos en esa práctica, lo importante es cómo cada equipo lo ha llevado a cabo. Solo que aquí la decisión la debía tomar era el club, y eso desató todo lo ya conocido por los colombianos. Ahora lo más importante es continuar buscando acuerdos, para que se pueda retomar el camino de la tranquilidad. Los involucrados puedan continuar haciendo acciones en beneficio del club y de su hinchada. Hay importantes retos futbolísticos para el Atlético Nacional: la liga colombiana y la Copa Libertadores, donde el verde de Antioquia debe ser gran protagonista. Por el bienestar de todos, es preciso que podamos volver a tener un deporte tan importante como el fútbol en tranquilidad y respetando un valor fundamental: la vida.
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