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Como ha sido costumbre desde hace tiempos, se dedica la primera columna del año a dar cuenta de los centenarios y sesquicentenarios importantes en el mundo de la cultura que se conmemorarán en este nuevo 2025, no solo como información sino también como guía a entidades culturales y otras interesadas sobre posible programas que se pueden hacer. Nuevamente, hay que advertir que esta es una lista muy selecta y no necesariamente estarán todos los que son por razones obvias.
En el mundo de la música hay abundantes nombres que deberán ser conmemorados. Entre ellos el de Palestrina, el padre de la polifonía de quien se cumplirán 500 años de su nacimiento, Pierre Boulez, uno de los revolucionarios de la música moderna, que nació hace cien años y Dmitri Shostakovich, un gran músico ruso, infortunadamente recordado tanto por su debilidad política como por sus grandes creaciones, que murió hace 50 años. Otros músicos por recordar en este fructífero 2025 son Vivaldi, nacido en 1675, Bizet que murió en 1875, el mismo año que nació Ravel. También se cumplen cien años de la muerte de Erik Satie, el excéntrico músico francés y dos cientos de la muerte de Salieri, injustamente acusado de la muerte de Mozart. Qué bueno sería que se revivieran algunas de sus óperas, muchas de ellas del mayor interés.
El campo de la literatura presenta ricas efemérides, tales como los 150 años del nacimiento de dos grandes de la literatura alemana y universal, Thomas Mann y el inmenso poeta Rilke Para el mundo de habla hispana será importante recordar que Lope de Vega nació hace 400 años y que se cumplen.250 del nacimiento de Jane Austen. El gran cuentista danés Andersen murió en 1825 y un novelista que aún es popular y cuyas obras han sido llevadas con frecuencia al cine, el italiano Rafael Sabatini nació en 1875.
Muy importante es recordar que Miguel Ángel nació en 1475 y que el gran pintor inglés Turner nació en 1775. Dos grandes nombres para recordar. El evocativo y enigmático, pero inmenso, Jan Vermeer, murió hace 350 años, Los amantes del cine igualmente conmemorarán los cien años del estreno de dos películas básicas, Potemkin de Eisenstein y En pos del oro de Chaplin.
Como se ve por lo descrito, este será un año rico en conmemoraciones y ojalá no se echen al olvido como sucede con frecuencia. Pero quienes nos interesamos en la cultura seguramente haremos nuestras celebraciones privadas y eso también es fructífero.