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Gazapera

Sobre el lenguaje no sexista: recordemos que la lengua, como la gente, cambia

María Alejandra Medina Cartagena, Gazapera
15 de febrero de 2021 - 03:00 a. m.
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Pocas veces se enarbolan tanto los diccionarios como cuando de temas de sexo y género se trata. Sobre el lenguaje incluyente, inclusivo, no sexista o igualitario, cuya polémica revivió en días pasados a raíz de una decisión de la Corte Constitucional, es preciso recordar varias cosas. En esta columna hay espacio para unas pocas.

Lo primero es que la lengua no es estática, sino cambiante. Quizá las transformaciones que más tiempo toman (más que, por ejemplo, introducir un término en los diccionarios) son las gramaticales, en las que entra el asunto del género de los sustantivos, los determinantes, etc.

Lo segundo: los dueños de la lengua somos quienes la hablamos. Por eso, las palabras que surgen o las formas más prácticas que vamos encontrando para expresarnos, con el tiempo y la difusión, pueden llegar a los manuales y diccionarios. La Real Academia Española se reconoce como una «notaria» de esto.

Finalmente, quisiera parafrasear algo que la Fundéu (antes de que quedara en manos de la RAE) expresó en su guía de lenguaje inclusivo: sería imposible que la creciente participación de las mujeres en el sistema laboral, en el Estado, etc., no produjera cambios en la lengua. Por eso han nacido palabras como presidenta, música, jueza, arquitecta... que no solo existen y están en los diccionarios, sino que deberían usarse.

Me despido con este trino de la RAE: «Los sustantivos que denotan profesiones, cargos, títulos o actividades humanas y que, por su configuración morfológica, posean moción de género deben usarse en femenino cuando se refieran a una mujer: “la ingeniera”, “la abogada”, “la médica”, etc.».

En próximas columnas (por si me siguen leyendo después de esta) quisiera ahondar en por qué esto no es un capricho, las complejidades a las que nos enfrentamos y las alternativas que tenemos.

mmedina@elespectador.com, @alejandra_mdn

María Alejandra Medina Cartagena, Gazapera

Por María Alejandra Medina Cartagena, Gazapera

Periodista e historiadora. Es editora de la sección Internacional, directora editorial de Impacto Mujer y columnista de la Gazapera, en El Espectador.@alejandra_mdnmmedina@elespectador.com

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Manuel(6280)16 de febrero de 2021 - 01:21 a. m.
Usted dice: "... los dueños de la lengua somos quienes la hablamos ..." y en parte tiene razón, pero yo diría mejor que si hay algo que NO pueda tener dueño es la Lengua y que el Habla va por donde se le da la gana; así, para el Castellano la RAE apenas va detrás, tomando nota de los cambios. Entonces con el lenguaje de género "amanecerá y veremos" porque tampoco será la misandria la que disponga
  • Julio Roberto(23169)16 de febrero de 2021 - 11:15 a. m.
    Nada que ver la misandria con el lenguaje incluyente; tal vez la misoginia sí esté relacionada con lo opuesto.
abolectrico(03577)15 de febrero de 2021 - 11:48 p. m.
claro que la seguiré leyendo, porque mi hija adolescente está de acuerdo con usted salvo que ella maneja otro idioma más afrancesado, según ella no se dice chico o chica sino chique o chike (?) no se dice los policías o las policías sino les policías, les perros (ah que en animales no aplica), el piloto y la pilota, les pilote. para donde llevan el idioma?
Romeo Dolorosa(earx4)15 de febrero de 2021 - 10:53 p. m.
Me encantan sus columnas. :)
Liliana(13412)15 de febrero de 2021 - 08:53 p. m.
María Alejandra, por supuesto que te seguiré leyendo!!
DONALDO(67774)15 de febrero de 2021 - 05:17 p. m.
En el habla, esa "inclusión" ya no la para nadie; para fortuna de la lengua nos quedan los buenos escritores, genuinos orfebres de la palabra.
  • Luis(14946)23 de febrero de 2021 - 04:17 p. m.
    y las escritoras ??
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