Faltan cuatro meses para que concluya el mandato de la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad (CEV), pero es tal el impacto positivo que su labor está teniendo en la conciencia de esta sociedad, tan proclive a aupar el odio, que se debería prorrogar su vigencia por un buen tiempo. O al menos por el año que la Comisión perdió a causa de la pandemia, pues durante ese tiempo a sus miembros les fue imposible ir a las zonas más apartadas a recoger testimonios que les servirían de base para elaborar su informe final.
Que continúe la Comisión de la Verdad
02 de julio de 2021 - 05:30 a. m.