Que la aventura de ternar a Gregorio Eljach (GE) al cargo de procurador se haya concretado en un aquelarre en la Casa de Nariño, presidido por Petro y al que asistieron uno que otro ministro, el contralor general, el jefe del conservatismo, el descabezado abogado del presidente Héctor Carvajal, y otros especímenes de la guardia pretoriana del mandatario, simplemente confirma el deterioro ético que enfrentamos.
Notas de buhardilla
Como anillo al dedo
29 de septiembre de 2024 - 05:05 a. m.