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La líder de restitución de tierras, Ludys Pedraza, fue amenazada el 4 de diciembre, un día después de organizar una marcha pacífica para exigir la restitución de la parcelación El Prado, en el Cesar.
“Que piensas que estas protejida y te las sabes toda hases marchas bloqueas vias y si te ponemos un ataud pa que te gejes no te metas en lo que no te importa te vamos a pelar ijueputa te sigues metiendo te dijimos que no lo hicieras y por ese te vas a morir abogada ijueputa nuestro poder es mas que el tuyo ellos no te van a salbar de nosotros”. Fue la amenaza en mensaje de texto que recibió la abogada Ludys Pedraza el 4 de diciembre a las 6pm. El mensaje fue enviado desde el teléfono celular número 310 604 0590.
No es la primera amenaza que recibe. El caso que Ludys Pedraza adelanta contra el Instituto Colombiano de Desarrollo Rural (INCODER) es uno de los más importantes en el proceso de restitución de las tierras en Colombia. Al margen de la nueva ley de Restitución de Tierras y mediante un proceso penal en la justicia ordinaria, Ludys Pedraza logró que la Corte Suprema de Justicia fallara el 12 de junio de 2012 a favor de 48 familias campesinas desplazadas de la parcelación El Prado, en la Jagua de Ibirico, Cesar, en el año 2002.
La masacre que antecedió al desplazamiento fue ordenada por el comandante paramilitar Óscar José Ospino, alias Tolemaida, quien confesó ante la Fiscalía que el desplazamiento se había hecho para vender las tierras a “la multinacional” porque las tierras tenían carbón.
Desde el año 2007, Glencore Xstrata, la principal comercializadora de commodities y la cuarta minera más grande del mundo, mediante su subsidiaria en Colombia, Prodeco, adelantan una permuta de estas tierras. El proceso se detuvo cuando iniciaba el proceso judicial en contra del INCODER, que sólo alcanzó a traspasar cinco parcelas a nombre de Prodeco (Glencore Xstratra).
La permuta fue interrumpida y desde hace un año y medio el INCODER ha estado en la obligación de devolver estas 1.231 hectáreas, pero no lo ha hecho. Dilata el cumplimiento del fallo. Hoy martes se realiza una reunión entre el INCODER, la doctora Ludys Pedraza y representantes de las víctimas de El Prado, para solucionar la situación.
Entretanto Ludys Pedraza sigue siendo amenazada, y el Estado, en lugar de aumentar su protección, la reduce. Hace dos meses el Comité de Evaluación de Riesgo y Recomendación de Medidas (CERREM) estimó que el peligro de Ludys Pedraza era menor y redujo su esquema de seguridad. En plata blanca, le recomendaron a la Agencia Nacional de Seguridad quitarle un escolta y una camioneta blindada.
En parte su decisión se basó en el informe que presentó uno de sus escoltas. En él, decía que la doctora Pedraza abusaba del esquema de seguridad. Decía que la abogada cambiaba los vales de gasolina por dinero y que el esquema era utilizado por personas distintas a ella. El informe no fue corroborado por su segundo escolta. Nunca se hizo una investigación ni se cotejó la información. Sencillamente creyeron una versión sin comprobarla, y la hicieron un motivo para reducirle el esquema de seguridad a Ludys Pedraza.
Esta amenaza obliga al CERREM a revaluar su decisión. Ludys Pedraza corre peligro y es urgente restituirle el esquema de seguridad que le fue retirado. El INCODER, por su parte, debe devolverles las tierras a las 48 familias desplazadas.
Twitter: @santiagovillach