Con el debido respeto por quienes en los últimos días, a través de diferentes medios de comunicación, se vienen pronunciando en contra de la construcción del Aeropuerto del Café (Aerocafé), deberían documentarse mejor, pues dicho proyecto se encuentra en el Plan de Desarrollo 2020-2022, artículo 67, con todo el presupuesto incluido, que será manejado a través de una fiducia.
Cuando un proyecto ha sido incluido en el Plan de Desarrollo de los gobiernos es porque se han surtido todos los trámites legales, técnicos, jurídicos y financieros sobre la viabilidad del mismo. Por consiguiente, no es procedente ponerlo en duda ahora, bajo ningún punto de vista, así hubiese estado plagado de errores en el pasado.
Si bien es cierto que se han presentado algunos inconvenientes, producto de malos manejos de diseño, construcción y presupuesto, en los actuales momentos todo está subsanado y se encuentra bajo control, avalado por los gobiernos nacional y departamental, así mismo por las diferentes entidades internacionales, nacionales y regionales vinculadas al proyecto.
De acuerdo al cronograma previsto por los directivos y la señora gerente, Amparo Sánchez Londoño, la licitación para la adjudicación de la obra se tiene prevista para el próximo mes de octubre; su inicio, para enero del 2021 y la entrega del primer tramo, para el mes de mayo del 2022.
Es importante también aclarar que los terrenos sobre los cuales se construirá la obra han sido adquiridos de forma legal y pacífica; para el primer tramo ya están legalizados en su totalidad y para el segundo están en su proceso final. Es bueno explicar esta parte, pues no han faltado los comentarios malintencionados y politiqueros en sentido contrario.
Cuando se presentó el problema con la construcción de los terraplenes en la administración de Francisco Cruz, en esta misma columna nos pronunciamos, generándose un debate con importantes medios de comunicación. Eso llevó a que se diera la corrección inmediata de todos los problemas y se pusiera en marcha la continuidad de tan importante obra para beneficio del Eje Cafetero y del país.
Desde luego que la obra, después de tanto tiempo de programación y de tantos inconvenientes que se han presentado, no deja de levantar suspicacias y comentarios adversos, por eso sería muy importante que quienes así piensan visitaran las oficinas de Aerocafé, en la ciudad de Manizales, para que se formen una idea clara de lo que va a ser el proyecto a futuro.
Hace pocos días se celebró en la ciudad de Manizales una importante reunión sobre Aerocafé, con la participación de los organismos de control, representantes de los gobiernos nacional, departamental y municipal, y de todas las entidades vinculadas a la obra.
De suerte pues, queridos caldenses, que en lugar de ser pesimistas, entusiasmémonos con una obra tan importante para la región y el país.
Con el debido respeto por quienes en los últimos días, a través de diferentes medios de comunicación, se vienen pronunciando en contra de la construcción del Aeropuerto del Café (Aerocafé), deberían documentarse mejor, pues dicho proyecto se encuentra en el Plan de Desarrollo 2020-2022, artículo 67, con todo el presupuesto incluido, que será manejado a través de una fiducia.
Cuando un proyecto ha sido incluido en el Plan de Desarrollo de los gobiernos es porque se han surtido todos los trámites legales, técnicos, jurídicos y financieros sobre la viabilidad del mismo. Por consiguiente, no es procedente ponerlo en duda ahora, bajo ningún punto de vista, así hubiese estado plagado de errores en el pasado.
Si bien es cierto que se han presentado algunos inconvenientes, producto de malos manejos de diseño, construcción y presupuesto, en los actuales momentos todo está subsanado y se encuentra bajo control, avalado por los gobiernos nacional y departamental, así mismo por las diferentes entidades internacionales, nacionales y regionales vinculadas al proyecto.
De acuerdo al cronograma previsto por los directivos y la señora gerente, Amparo Sánchez Londoño, la licitación para la adjudicación de la obra se tiene prevista para el próximo mes de octubre; su inicio, para enero del 2021 y la entrega del primer tramo, para el mes de mayo del 2022.
Es importante también aclarar que los terrenos sobre los cuales se construirá la obra han sido adquiridos de forma legal y pacífica; para el primer tramo ya están legalizados en su totalidad y para el segundo están en su proceso final. Es bueno explicar esta parte, pues no han faltado los comentarios malintencionados y politiqueros en sentido contrario.
Cuando se presentó el problema con la construcción de los terraplenes en la administración de Francisco Cruz, en esta misma columna nos pronunciamos, generándose un debate con importantes medios de comunicación. Eso llevó a que se diera la corrección inmediata de todos los problemas y se pusiera en marcha la continuidad de tan importante obra para beneficio del Eje Cafetero y del país.
Desde luego que la obra, después de tanto tiempo de programación y de tantos inconvenientes que se han presentado, no deja de levantar suspicacias y comentarios adversos, por eso sería muy importante que quienes así piensan visitaran las oficinas de Aerocafé, en la ciudad de Manizales, para que se formen una idea clara de lo que va a ser el proyecto a futuro.
Hace pocos días se celebró en la ciudad de Manizales una importante reunión sobre Aerocafé, con la participación de los organismos de control, representantes de los gobiernos nacional, departamental y municipal, y de todas las entidades vinculadas a la obra.
De suerte pues, queridos caldenses, que en lugar de ser pesimistas, entusiasmémonos con una obra tan importante para la región y el país.