La JEP acaba de admitir a Mancuso, con base en dos argumentos centrales: el primero es el de hacer posible la construcción de una verdad más amplia sobre el conflicto; el segundo consiste en reconocerle un rol de “bisagra” entre el Estado y los paramilitares.
Conviene precisar, ante todo, que la opción de incorporar paramilitares dentro del proceso de paz con las FARC-EP fue expresamente discutida en La Habana, dado que tuvieron un papel determinante en una época del conflicto. La conclusión fue que ellos tenían ya un modelo transicional que incluía su sometimiento y un tratamiento punitivo especial (Justicia y Paz), lo que hacía...