La senadora del Centro Democrático Paola Holguín compartió la semana anterior en sus redes sociales una fotografía de una valla publicitaria que causó un profundo debate sobre alimentar la polarización.
La valla, patrocinada por un equipo denominado “los Paolos”, del que la congresista es líder junto al representante a la Cámara por Antioquia Juan Espinal, da dos opciones a los colombianos, “Víctimas: no (apoyar la) JEP” o “Victimarios: (apoyar la) JEP”.
La senadora Holguín acompañó la foto diciendo: “Este es el verdadero dilema, más que JEP o no JEP, se trata de victimarios o víctimas, impunidad o justicia. ¿Tú de qué lado estás?”. (Ver Trino).
Pues no del de la doctora Holguín, ya que ella y su familia han estado varias veces del lado equivocado, principalmente en lo que tiene que ver con la ley. Me explico.
Paola Andrea Holguín Moreno se dio a conocer en marzo de 2009 cuando reemplazó a José Obdulio Gaviria en la oficina de asesoría al entonces presidente Álvaro Uribe Vélez.
El primo hermano de Pablo Escobar Gaviria fue asesor presidencial entre agosto de 2002 y marzo de 2009 y renunció un mes después de que la revista Semana revelara que el DAS estaba siguiendo e interceptando a la oposición y a magistrados que el presidente Uribe consideraba sus enemigos. Como se sabe, distintos testimonios vinculan a José Obdulio con el famoso caso de las “chuzadas” del DAS.
Paola Holguín y José Obdulio Gaviria no solo han tenido y tienen los mismos cargos, asesores de Uribe y luego senadores de la República, sino que sus familias tienen una indudable cercanía con el narcotráfico, especialmente en su natal Antioquia.
De José Obdulio ya lo sabemos.
Vamos al caso de Paola Andrea. El padre de la senadora se llama Frank Holguín Ortiz, una persona que, según informaciones de prensa, durante los años 90 tuvo nexos con el Cartel de Medellín.
Vaya, vaya, vaya.
El 20 de febrero de 1999 el periódico El Tiempo publicó una nota en la que el ministro de Justicia de la época, Parmenio Cuéllar, reveló que habían detectado a personas vinculadas a la Dirección de Estupefacientes que estaban entregando información reservada a organizaciones de abogados que trabajaban al servicio de los narcotraficantes.
Con la infiltración a Estupefacientes los narcos buscaban conocer de antemano las pruebas que tenía el Estado en contra de ellos para quitarles sus bienes y así eliminarlas o buscar mecanismos para contrarrestarlas en los tribunales. Suena similar a lo que sigue pasando hoy en día.
Con la información de la Fiscalía, El Tiempo publicó la lista de los procesos en la Dirección Nacional de Estupefacientes que habían tratado de torcer. El caso número 31402 es el proceso que relaciona como narcotraficante y testaferro al padre de la senadora del Centro Democrático. (Ver Narcos infiltraron Oficina Antidrogas).
El señor Frank Holguín Ortiz fue procesado por el delito de narcotráfico y se le realizó una extinción de dominio por ser testaferro del capo Pablo Escobar Gaviria, primo de José Obdulio.
Los bienes del narcotraficante Pablo Escobar que estaban a nombre de Frank Holguín Ortiz habían sido ocupados en marzo de 1998 por la Fiscalía en una operación en la que se recuperaron 20.000 bienes de la mafia. La operación fue tan grande que los medios dieron un importante cubrimiento, siempre mencionando al padre de la senadora Holguín. (Ver DAS y Policía han ocupado 20.000 bienes).
Pero nada de esto importó a la hora de volverse una de las personas más cercanas del expresidente Uribe. Por el contrario, es tan cercana la relación, que la senadora Holguín terminó escribiendo una biografía del expresidente titulada Uribe de carne y hueso, con la que pretendía “contarle a la gente que la imagen de autoritario que tenía no era la real”, según un perfil de La Silla Vacía.
Ahora la senadora Paola Holguín ha consolidado un subgrupo dentro del Centro Democrático denominado “los Paolos” donde se enorgullecen de repetir que “a los Paolos no llega el que quiera, sino el que pueda. El que entienda que Uribe es nuestro jefe único, y Paola nuestra líder”. (Ver La cara radical del uribismo).
Los Paolos fue el grupo que financió las polémicas vallas de la JEP en Antioquia que preguntan “¿Tú de qué lado estás?”. Definitivamente no del lado acobijado por una historia familiar de narcotráfico.
La senadora del Centro Democrático Paola Holguín compartió la semana anterior en sus redes sociales una fotografía de una valla publicitaria que causó un profundo debate sobre alimentar la polarización.
La valla, patrocinada por un equipo denominado “los Paolos”, del que la congresista es líder junto al representante a la Cámara por Antioquia Juan Espinal, da dos opciones a los colombianos, “Víctimas: no (apoyar la) JEP” o “Victimarios: (apoyar la) JEP”.
La senadora Holguín acompañó la foto diciendo: “Este es el verdadero dilema, más que JEP o no JEP, se trata de victimarios o víctimas, impunidad o justicia. ¿Tú de qué lado estás?”. (Ver Trino).
Pues no del de la doctora Holguín, ya que ella y su familia han estado varias veces del lado equivocado, principalmente en lo que tiene que ver con la ley. Me explico.
Paola Andrea Holguín Moreno se dio a conocer en marzo de 2009 cuando reemplazó a José Obdulio Gaviria en la oficina de asesoría al entonces presidente Álvaro Uribe Vélez.
El primo hermano de Pablo Escobar Gaviria fue asesor presidencial entre agosto de 2002 y marzo de 2009 y renunció un mes después de que la revista Semana revelara que el DAS estaba siguiendo e interceptando a la oposición y a magistrados que el presidente Uribe consideraba sus enemigos. Como se sabe, distintos testimonios vinculan a José Obdulio con el famoso caso de las “chuzadas” del DAS.
Paola Holguín y José Obdulio Gaviria no solo han tenido y tienen los mismos cargos, asesores de Uribe y luego senadores de la República, sino que sus familias tienen una indudable cercanía con el narcotráfico, especialmente en su natal Antioquia.
De José Obdulio ya lo sabemos.
Vamos al caso de Paola Andrea. El padre de la senadora se llama Frank Holguín Ortiz, una persona que, según informaciones de prensa, durante los años 90 tuvo nexos con el Cartel de Medellín.
Vaya, vaya, vaya.
El 20 de febrero de 1999 el periódico El Tiempo publicó una nota en la que el ministro de Justicia de la época, Parmenio Cuéllar, reveló que habían detectado a personas vinculadas a la Dirección de Estupefacientes que estaban entregando información reservada a organizaciones de abogados que trabajaban al servicio de los narcotraficantes.
Con la infiltración a Estupefacientes los narcos buscaban conocer de antemano las pruebas que tenía el Estado en contra de ellos para quitarles sus bienes y así eliminarlas o buscar mecanismos para contrarrestarlas en los tribunales. Suena similar a lo que sigue pasando hoy en día.
Con la información de la Fiscalía, El Tiempo publicó la lista de los procesos en la Dirección Nacional de Estupefacientes que habían tratado de torcer. El caso número 31402 es el proceso que relaciona como narcotraficante y testaferro al padre de la senadora del Centro Democrático. (Ver Narcos infiltraron Oficina Antidrogas).
El señor Frank Holguín Ortiz fue procesado por el delito de narcotráfico y se le realizó una extinción de dominio por ser testaferro del capo Pablo Escobar Gaviria, primo de José Obdulio.
Los bienes del narcotraficante Pablo Escobar que estaban a nombre de Frank Holguín Ortiz habían sido ocupados en marzo de 1998 por la Fiscalía en una operación en la que se recuperaron 20.000 bienes de la mafia. La operación fue tan grande que los medios dieron un importante cubrimiento, siempre mencionando al padre de la senadora Holguín. (Ver DAS y Policía han ocupado 20.000 bienes).
Pero nada de esto importó a la hora de volverse una de las personas más cercanas del expresidente Uribe. Por el contrario, es tan cercana la relación, que la senadora Holguín terminó escribiendo una biografía del expresidente titulada Uribe de carne y hueso, con la que pretendía “contarle a la gente que la imagen de autoritario que tenía no era la real”, según un perfil de La Silla Vacía.
Ahora la senadora Paola Holguín ha consolidado un subgrupo dentro del Centro Democrático denominado “los Paolos” donde se enorgullecen de repetir que “a los Paolos no llega el que quiera, sino el que pueda. El que entienda que Uribe es nuestro jefe único, y Paola nuestra líder”. (Ver La cara radical del uribismo).
Los Paolos fue el grupo que financió las polémicas vallas de la JEP en Antioquia que preguntan “¿Tú de qué lado estás?”. Definitivamente no del lado acobijado por una historia familiar de narcotráfico.