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Insistir en la paz, a pesar de todo


03 de julio de 2024 - 05:05 a. m.
La percepción positiva del Acuerdo de Paz en los municipios más afectados por la violencia es un mandato de apostarle a los diálogos en curso.
La percepción positiva del Acuerdo de Paz en los municipios más afectados por la violencia es un mandato de apostarle a los diálogos en curso.
Foto: Óscar Pérez

Hace un par de semanas, se publicaron los resultados de la tercera medición de Escuchar la paz: entre contrastes y anhelos de paz con desarrollo humano, realizada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Sus hallazgos no deben pasar desapercibidos, menos ahora que la paz está en cuestión y el acuerdo con las extintas FARC ha sido criticado por el mismo Gobierno ante los incumplimientos. En síntesis, las zonas del país más afectadas por la violencia han mostrado un aumento en su satisfacción con la implementación de lo pactado y, a la vez, les extienden su generosidad a los procesos que están en curso. Persiste, no obstante, la sensación de que el Estado no llenó los espacios de la violencia y que la inseguridad es una amenaza constante.

La medición del PNUD es una excelente radiografía de lo que ha funcionado y lo que no en la Colombia posacuerdo de paz del 2016. Entre finales del año pasado e inicios de este, entrevistaron a 11.800 habitantes, mayoritariamente en los municipios más afectados por el conflicto armado —en los Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial (PDET)—, y con una muestra de 1.172 personas de Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla y Bucaramanga. Nos quedamos, en particular, con un hallazgo: aumentó la satisfacción general en las regiones PDET con la implementación del Acuerdo de Paz, pues pasó de 35,9 % en 2019 a 58,1 % en 2023.

Esa cifra nos parece importante porque fue precisamente para esos pobladores que se hizo el esfuerzo de la paz con las FARC. Es muy diciente que la satisfacción sea menor en las ciudades principales, que históricamente tuvieron cierta distancia del conflicto y luego de la implementación de lo pactado. En este punto, como ocurrió con el plebiscito, es importante ver que las zonas que más apoyaron y siguen apoyando los diálogos de paz son las que experimentaron los peores efectos de la violencia. Merece especial atención Montes de María, que es la región más satisfecha, con 74,7 %. Allí se han llevado a cabo proyectos de intervención en salud mental, de construcción de tejido social y de justicia y reparación. Hace poco, desde allí, han surgido reclamos de un deterioro en la seguridad; no podemos perder lo que se avanzó hasta ahora.

Esto no significa que haya un delirio colectivo sobre las bondades del Acuerdo de Paz. El Catatumbo, en Norte de Santander, tiene la menor satisfacción con la implementación (29,8 %). Las quejas con lo pactado son ya conocidas: en los municipios PDET no han sentido un aumento de la presencia estatal ni la abundancia de oportunidades que se prometieron después de la firma; la Jurisdicción Especial para la Paz y el resto del aparato de justicia transicional no han tenido impacto suficiente en las poblaciones víctimas, que aún buscan ser reparadas; la inseguridad y la corrupción siguen en el foco de las preocupaciones.

Pero volvemos a la insistencia en la apuesta por la paz. A propósito de los diálogos con la guerrilla del ELN, el PNUD encontró que “la mayoría de las subregiones PDET donde tiene presencia activa este grupo, como Arauca, sur de Córdoba, Chocó, sur de Bolívar, Alto Patía y norte del Cauca, Pacífico medio y Sierra Nevada se ubican en un rango alto de satisfacción y un mayor optimismo frente a un eventual acuerdo con el ELN”. Es decir que los colombianos más vulnerables nos piden que, a pesar de todo, insistamos en salidas negociadas. Qué necesario es redoblar esfuerzos.

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DORA(2370)04 de julio de 2024 - 02:16 a. m.
Los que sufren las consecuencias de la guerra son los que apoyan el proceso de paz, los que pueden verla desde la comodidad de sus sillones y además se lucran de ella son los que satanizan el proceso de paz, por fin el editorialista dijo lo que es. ¿Tai malito?
Edgar(40706)03 de julio de 2024 - 11:07 p. m.
Lo comparto totalmente.
Carlos H(21141)03 de julio de 2024 - 10:30 p. m.
Las personas que no están de acuerdo con el proceso de paz, residen en las ciudades y en su mayoría no han sufrido directamente las consecuencias de la violencia. Con soberbia se oponen y desconocen, con egoismo, el beneficio que trae para la población que está obligada a residir en zonas de conflicto.
alexandrs(m841l)03 de julio de 2024 - 04:48 p. m.
Sí, quienes critican y se rehúsan a aceptar los diálogos de paz son los habitantes de las ciudades que no han sufrido de cerca el conflicto. Sin embargo, el gobierno no puede bajar la guardia con esos grupos al margen de la ley.
JAIME(xdik9)03 de julio de 2024 - 04:14 p. m.
Jaime Todo mi respaldo y confianza para los diálogos de paz, el pueblo asi lo exige, nada para la guerra.
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