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Que el viraje en la política antidrogas se ejecute

13 de septiembre de 2023 - 02:05 a. m.
"Falta ver si la teoría va acompañada de la práctica, pero celebramos algo de sentido común en un debate estéril a nivel mundial”.
"Falta ver si la teoría va acompañada de la práctica, pero celebramos algo de sentido común en un debate estéril a nivel mundial”.
Foto: EFE - Ernesto Guzmán
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Dentro de todo lo que ha dicho el gobierno de Gustavo Petro sobre su nueva política antidrogas, una frase del ministro de Justicia, Néstor Osuna, nos parece la más importante. En la explicación de todo lo que se propone hacer la administración, el plan, que implicará una inversión de unos $21 billones en la próxima década, “promete que el Estado va completo”. Tan sencillo y, sin embargo, tan poderoso, en una Colombia que ha estado secuestrada por una guerra contra las drogas impuesta desde Estados Unidos y donde la única solución ha sido castrense, algo altamente ineficiente. Claro, persisten dudas y, como ha sido habitual en este Gobierno, falta ver si la teoría va acompañada de la práctica, pero celebramos algo de sentido común en un debate estéril a nivel mundial.

El fin de semana pasado en Cali, Colombia fue anfitrión de 17 países latinoamericanos para discutir la política antidrogas. Luego, el sábado, el Gobierno presentó su política a escala nacional. Ambos hechos mostraron la dificultad del tema: aunque hubo voluntad por parte de los representantes que asistieron a la cumbre, el comunicado final fue tibio y habló de seguir buscando una estrategia unificada. Mientras tanto, la política en el país se estrella con las limitaciones del paradigma prohibicionista internacional. Colombia no puede avanzar solo, pero el mundo sigue siendo reacio a las ideas de cambio.

Para completar el panorama, el Sistema Integrado de Monitoreo de Cultivos Ilícitos (Simci) dijo que en 2022 rompimos un récord y llegamos a 230.000 hectáreas de hoja de coca cultivadas. Se trata de un aumento del 12,7 % sobre 2021 y del 43 % a lo que teníamos en 2020. En respuesta el ministro Osuna, quien está de viaje por Estados Unidos socializando la política antidrogas, afirmó que “la idea de que estamos inundados de coca no es cierta”, y señaló cómo el incremento está concentrado en Putumayo, mientras el resto del país se ha mantenido estable. Sin embargo, el problema es evidente: Colombia sigue sin saber qué hacer con tanta droga cultivada. Con el agravante de que, si el año entrante Joe Biden pierde la reelección en Estados Unidos, podríamos tener a un presidente hostil a los ajustes que ha pedido Colombia.

Entonces, ¿a qué le apostamos? A lo que se ha pedido durante años: menos represión y que llegue el Estado, con la Fuerza Pública, pero también con oportunidades. El Gobierno se compromete a no perseguir a los pequeños cultivadores, a brindarles la opción de cultivos alternativos, a no utilizar el glifosato y a empujar por una estrategia que nos aleje del prohibicionismo terco. Con esto, de nuevo en palabras del ministro Osuna, espera “acompañar en el tránsito a economías lícitas a 50.000 familias” y “disminuir la producción de cocaína en un 40 %”.

Compartimos el diagnóstico y la necesidad de un cambio en la política antidrogas. Llevamos años pidiendo que el Estado entero aparezca, que se abandone la violencia como estrategia. No obstante, después de un año de gobierno, los resultados han sido decepcionantes. Con el documento ya publicado, ¿ahora sí empezaremos a ver el cambio aterrizar?

¿Está en desacuerdo con este editorial? Envíe su antieditorial de 500 palabras a elespectadoropinion@gmail.com.

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Felipe(94028)13 de septiembre de 2023 - 11:12 p. m.
Cada país combate el narcotráfico como quiere o puede, es su responsabilidad. Nuestra responsabilidad es no producir ni exportar cocaína. El campesino cocalero no es inocente, elabora pasta base y sabe perfectamente para qué sirve, nadie le va a poner a cultivar yuca para ganar una miseria ni los traquetos que controlan su territorio se lo permitirán. El gobierno quiere que más de 50 organizaciones traquetas, también mejicanas, presenten carta de renuncia voluntaria pacíficamente ¿Es chiste?.
Felipe(94028)13 de septiembre de 2023 - 11:02 p. m.
Colombia no puede imponer al mundo que legalice la cocaina ni puede legalizarla unilateralmente para convertirse en proveedor de las mafias, aunque cobre IVA. Nuestros traquetos y sus socios internacionales crearon y mantienen los mercados en los países consumidores, pero aquí culpamos al consumidor, que es otra víctima de la codicia traqueta y como si aquí no hubiese problema de consumo o guerras entre bandas por el control del microtráfico interno. El traqueto nunca renunciará a su negocio.
DORA(2370)13 de septiembre de 2023 - 10:10 p. m.
Con todo respeto, la droga no se cultiva, la coca es una inofensiva planta con poderes medicinales y alimenticios, lo que la convierte en droga son los químicos que le mezclan, pero a los que los traen nada les pasa, los traficantes, frescos diversificando su lucrativo negocio. Y nosotros, los bobos del paseo agachados obedeciendo las ordenes del amo del norte. Ojo, el fentanilo va a voltear la arepa.
  • haji(3766)13 de septiembre de 2023 - 11:12 p. m.
    De acuerdo
Carlos(34560)13 de septiembre de 2023 - 09:32 p. m.
Sigan de ingenuos y verán los resultados, para ejemplo lo que hizo López Obrador en México con su política de "abrazos por balazos" y hoy es un País mas violento que antes, mas defensores de los DD.HH y periodistas asesinados. El Estado primero debe brindar seguridad con su Fuerza Pública y una vez asegurados los territorios pueden llegar con confianza los médicos, los profesores, la inversión, el progreso. Lo demás es puro bla, bla, bla.
Gerardo(55409)13 de septiembre de 2023 - 04:23 p. m.
Error señor editor, la droga no se cultiva, se cultiva la mata y la" mata no mata", elbprobkema es la élite colombiana que quiere seguir viviendo del narcotrafico, para llegar a droga se necesita un proceso que lo hacen las personas y ya sabemos quienes son, porque hasta embajadores hemos tenido con laboratorios en sus fincas, así que no sigamos estigmatizan o al campesino, que recibe las migajas
  • Miriam(12336)13 de septiembre de 2023 - 05:40 p. m.
    Completamente de acuerdo,
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