El primer balance sobre el día sin IVA, el primero de tres planeados, tiene que ser humano. Aunque el Gobierno nacional se ha concentrado en exaltar los resultados económicos y subestimar las aglomeraciones, la realidad es que las imágenes compartidas de manera masiva en redes sociales cuentan otra historia. Un país que ha hecho tantos esfuerzos por mantener contenido el COVID-19 no puede descontrolarse, menos aún debido a una estrategia mal pensada desde el mismo Gobierno que noche tras noche insiste en que debemos cuidarnos. Colombia no puede cantar victoria anticipada: estamos en riesgo de que la tragedia empeore.
Por supuesto que la economía necesita incentivos; sin embargo, es fundamental que seamos coherentes. La apertura debía ser gradual para ir garantizando que no haya rebrotes. Si hemos logrado reducir la velocidad del contagio, como ha pasado por ejemplo en Bogotá, uno de los focos principales, es gracias a la disciplina y los esfuerzos de los colombianos. Por eso causa una disonancia que, desde el Gobierno nacional, se decrete un día sin IVA que incentiva que las personas salgan. ¿Nadie pudo prever todos los contactos indebidos que se iban a producir?
Estamos, además, parados sobre simbolismos importantes. Más allá de los esfuerzos policivos, el triunfo de la cuarentena depende del convencimiento que tengan los ciudadanos sobre su utilidad. Si después de tres meses encerrados ven que las personas salen desmedidas en un día nacional de compras y sin controles efectivos, se está fomentando más desobediencia. Además, se afectan los discursos que los epidemiólogos y el mismo Gobierno han venido construyendo.
Perú es un testimonio de alerta. Aunque empezaron muy bien la crisis, tomando las medidas adecuadas, hoy son uno de los epicentros de la pandemia y uno de los puntos negativos fue la concentración de los momentos de salida de la estricta cuarentena inicial. No podemos perder el trabajo bien hecho que han hecho los colombianos en estos meses.
José Manuel Restrepo, ministro de Comercio, Industria y Turismo, dijo que se dio un crecimiento inicial de cinco veces en las ventas a lo largo del día en comparación con uno en situación de pandemia y, por lo menos, un 30 % adicional respecto a un día normal antes de la pandemia. Además, dijo que los centros comerciales y los almacenes de cadena “han funcionado adecuadamente. Han garantizado y cumplido con esos protocolos de bioseguridad, se ha garantizado también el distanciamiento físico en la entrada. De la misma forma, los almacenes pequeños y medianos en centros de comercio como fuera de ellos han cumplido con esos requisitos y protocolos de bioseguridad”. Aunque reconoció que hubo “34 aglomeraciones en el país”, dijo que “el resto de la nación ha funcionado adecuadamente en el marco de este día sin IVA”.
Aunque son bien recibidas las noticias económicas y el parte de tranquilidad frente al contagio, el Gobierno deberá analizar cómo evitar cualquier aglomeración en los próximos días sin IVA que ya están programados. Varios alcaldes se quejaron por el caos ocasionado y lo difícil que es controlar el contagio en esos contextos. Los efectos solo se verán hasta dentro de dos semanas. La apertura es necesaria, pero tiene que implementarse de manera cuidadosa.
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