Publicidad

Soberbia presidencial


Antieditorial y Juan David Escobar Cubides
22 de julio de 2024 - 05:05 a. m.

En respuesta al editorial del 28 de junio de 2024, titulado “Estigmatizar a la prensa afecta la democracia”.

La conducta del presidente Petro es el espejo de lo que un mandatario no puede hacer: repelencia hacia el ejercicio periodístico, estigmatización irracional y soberbia excesiva en contra del derecho y deber constitucional que tienen los comunicadores de informar lo que los poderosos —como él— pretenden ocultar.

Aunque el asunto es de fondo, porque no se trata de una simple estigmatización, dado que esto va más allá y no tiene límites ni parangón. El presidente Petro ha adquirido un repudiable ADN consistente en agredir abruptamente el derecho y el deber a opinar que tienen no solo los periodistas sino los colombianos que no piensan como él, a quienes les preocupa su conducta y accionar en el ejercicio de la primera magistratura del Estado.

Ahora resulta que no es factible cuestionar al presidente Petro ni a sus cercanos porque de inmediato se enciende el matoneo por este, tal y como ha ocurrido con las periodistas María Jimena Duzán y Vicky Dávila, entre otros.

Lo que preocupa sobremanera es el autoritarismo irracional del presidente Petro, pues pareciere desconocer que sus pronunciamientos están revestidos del respaldo del Estado. Al respecto es prudente preguntarle lo siguiente: ¿por qué le incomoda la labor del periodismo investigativo, principalmente cuando están comprometidos usted y su círculo cercano? ¿Tienen usted y su directora Sarabia algo que ocultar? Si no tiene nada que ocultar, ¿por qué ataca con fiereza al periodismo que lo investiga?

¿Es consciente, señor presidente, de que cada una de sus palabras representan no solo a sus votantes sino al país en su calidad de jefe de Estado, jefe de gobierno y suprema autoridad administrativa? ¿Es usted consciente del cargo que ejerce y del riesgo al que expone a los periodistas señalados en sus redes sociales? ¿Dónde están los parámetros éticos y estéticos que debe observar un presidente en el ejercicio de la primera magistratura del Estado? ¿Dónde quedó el respeto a la prensa y al pluralismo informativo que dijo proteger en campaña?

La soberbia en posiciones de poder es muy mala consejera, principalmente cuando se conjuga con intolerancia. ¿Intolerancia a qué? A la crítica legítima, al derecho a cuestionar, opinar e incomodar del que gozan no solo los periodistas sino los colombianos preocupados por su nación. El periodismo investigativo y de opinión es un límite efectivo al ejercicio del poder político soberano; además, es una garantía constitucional irrefutable en el sistema jurídico colombiano, así como en la Carta Democrática Interamericana y la Carta Internacional de Derechos Humanos, reconocidas expresamente por el Estado colombiano.

Detrás de la extralimitación del presidente al señalar cuál es, a su juicio, el buen periodismo, lo que observamos es una repulsión convulsiva hacia el periodismo investigativo, las sugerencias de la prensa y las observaciones del país que opina, analiza y propone alternativas diferentes a las suyas. El talante de Petro es ciertamente antidemocrático, pero aún está a tiempo de reconsiderar.

¡Serénese, por el bien de Colombia, señor presidente!

Por Juan David Escobar Cubides

Temas recomendados:

 

Usuario(51538)23 de julio de 2024 - 02:20 a. m.
Excelentes preguntas que, como en el caso de las formuladas por la señora Urán o la periodista Duzán se quedarán sin respuestas. Es que la soberbia, la soberbia de don Petrochuspas es monumental.
  • Isidro(43405)26 de julio de 2024 - 06:33 p. m.
    Ala que chirriado
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar