Disputa electoral confunde a partidos y Gobierno sobre su papel en acuerdo nacional

Los partidos políticos no le caminan formalmente a la propuesta de acuerdo nacional del presidente Gustavo Petro, sin embargo, eso no le ha impedido al Gobierno conseguir los votos para algunas de sus reformas. La aprobación del informe de ponencia de la reforma a la salud en la plenaria de la Cámara, antes de la instalación de la comisión accidental, ha incrementado la hostilidad entre sectores y se han profundizado las diferencias entre los integrantes de las mismas colectividades.

Los partidos políticos no le caminan formalmente a la propuesta de acuerdo nacional del presidente Gustavo Petro, sin embargo, eso no le ha impedido al Gobierno conseguir los votos para algunas de sus reformas. La aprobación del informe de ponencia de la reforma a la salud en la plenaria de la Cámara, antes de la instalación de la comisión accidental, ha incrementado la hostilidad entre sectores y se han profundizado las diferencias entre los integrantes de las mismas colectividades.

Aunque los tropiezos eran por el contenido de las reformas estructurales, ahora se habla de una “traición” al acuerdo, en tanto hay congresistas apoyando los proyectos de forma independiente y además, hay diferencias en materia electoral, obviando las conversaciones en el marco del acuerdo nacional y las reuniones internas de cada una de las bancadas de las colectividades. Precisamente, el acuerdo nacional, según el Gobierno, iniciaría de forma expresa después de los comicios de octubre, para evitar ruidos.

La ponencia de la reforma a la salud para segundo debate fue aprobada este martes 19 de septiembre por la Cámara, con ello el Gobierno tendría un panorama mediamente positivo para el proyecto, pues se abriría la discusión del articulado próximamente. No obstante, sectores de los partidos Alianza Verde, Liberal y la U –que han sido los más afines al acuerdo nacional– vieron dicha aprobación como un acto de deslealtad, pues esperaban que antes de aprobar la ponencia, se definiera un nuevo texto en la subcomisión aprobada. Es más, hablan también de burocracia y apoyos en las elecciones regionales para convencer a representantes para votar positivamente a la reforma.

Así pues, otro de los acuerdos que prematuramente se habría incumplido en el marco del acuerdo nacional es que los partidos afines al Gobierno se abstengan de desprestigiar a candidatos oficiales de cara a las elecciones regionales, así como cuestionar las adhesiones políticas para del 29 de octubre. Esa situación es una de las que tiene dudando a las bancadas y ha generado pugnas internas. De acuerdo con el codirector del Partido de la U, Juan Felipe Lemos, había un compromiso sobre la no agresión, pero han sentido un ataque directo y hasta una campaña sucia desde el Pacto Histórico a algunos de sus candidatos, especialmente dirigida hacia Dilian Francisca Toro, la anterior jefa de la colectividad y actual aspirante a la gobernación del Valle del Cauca.

De acuerdo con Lemos, la U había asumido una posición sumisa frente algunos señalamientos a sus candidatos por el compromiso del acuerdo nacional, pero, según dice, “hemos notado que se trata de una línea política planificada. No tiene sentido que en Bogotá nos inviten a hacer parte de un pacto, pero en las regiones estén enfrascados a atacar a nuestros aspirantes (…) Hay algunos congresistas del Pacto Histórico que se creen los dueños de la moral y se han dedicado a agredir y maltratar”, dijo el senador, quien rechazó el apoyo de los representantes a la reforma a la salud y dijo que ante la fuerte división entre la bancada de la U en Senado y Cámara, no se descartan futuras sanciones.

Y es que el Pacto Histórico se fue sobre la senadora Martha Peralta, pues su partido, el Movimiento Alternativo Indígena y Social (MAIS), se adhirió a la campaña de Dilian Francisca Toro. Según la senadora, no se trató de una decisión que ella hubiese tomado, sino de una directriz colectiva. Eso sí, desató una fuerte tormenta política y rechazo a la candidata de la U en el Valle. Al respecto, Lemos sugirió que la comunicación con el Pacto Histórico está peor que nunca y que el Gobierno está siendo conveniente: “no pueden maltratar a nuestro partido en las regiones y luego en el Congreso decirnos que nos necesitan”. Por esa, entre otras razones, la dirección de la U y la bancada del Senado no quería votar la reforma a la salud, pero, según dijo, “los compañeros de Cámara nos hicieron quedar muy mal”.

Esa sensación no la tiene solo la U; en el Partido Alianza Verde se mantienen las divisiones y ven algunas actitudes del Gobierno y de la bancada del Pacto Histórico como una incongruencia con el acuerdo nacional propuesto. La representante Katherine Miranda, quien ha recibido todo el foco por ser una de las promotoras de la creación de la subcomisión sobre la reforma a la salud, aseveró que la Cámara está siendo manipulada con prácticas tradicionales y rechazó la aprobación del informe de ponencia de la reforma a la salud. “No tengo el objetivo de dañar al Gobierno, sino que se mejoren las iniciativas, pero hay algunos congresistas que creen de manera ingenua que ser partido de Gobierno es votar sí a todo”, aseguró para El Espectador. El partido Alianza Verde está altamente fragmentado, entre varias cosas, por no tener un jefe político.

Ahora, fuentes del Partido Liberal coinciden en que el Gobierno en la Cámara tiene una amplia mayoría y que la aprobación del informe de ponencia de la reforma a la salud es un mensaje negativo. Igualmente, hay un sector inconforme con la presidencia de su partidario, Andrés Calle, que según ellos promovió la aprobación de la ponencia de forma deliberada y sin esperar al resultado de la comisión accidental. Uno de esos es el representante Julián Peinado, de la línea del director del partido, el expresidente César Gaviria: “Calle hizo una jugada con la que no estamos de acuerdo. Se sacó del sombrero, como un mago, la aprobación de la ponencia sin que se hubiese estudiado”, señaló.

Algunos liberales dicen que es en Antioquia en donde sienten que el Gobierno ha confundido el acuerdo nacional con un tema de tipo electoral. Desde el inicio, según un sector del liberalismo, los afines al Gobierno buscaban el aval para la gobernación para Julián Bedoya, sin embargo, quedó Eugenio Prieto, quien hace un par de semanas dejó su aspiración y se unió al candidato de Centro Democrático, Andrés Julián Rendón. “El Pacto Histórico está camuflando sus candidatos en otros movimientos; hasta se han apartado de los avalados por ellos pues no quieren contaminar a nadie”, señalaron desde el Liberal.

¿Se está confundiendo el acuerdo nacional con lo electoral?

Desde el Gobierno dicen que la competencia por los votos en las regiones no tiene nada que ver con el acuerdo nacional y que si hay un sector malinterpretándolo, son los partidos. El ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, dijo en exclusiva a El Espectador que el Gobierno tiene respeto por los candidatos, pero que no le puede pedir a los militantes que no tengan el debate político natural del proceso electoral. “El acuerdo nacional es un acuerdo de todo el país. Yo entiendo la susceptibilidad, pero ambas cosas no se pueden confundir”.

Por su parte, el senador Alexander López (Pacto Histórico) dijo que “el acuerdo nacional pasa por aprobar las reformas que se necesitan y las elecciones regionales son una disputa política de fuerzas”. Contrario a lo que dicen los partidos, el senador afirmó que han sido los mismos congresistas los que “están condicionando el acuerdo nacional al apoyo electoral (…) Si algunos partidos creen que el acuerdo nacional significa que tengamos que apoyar a candidatos de ellos, entonces están equivocados. Es más, haremos protagonistas del acuerdo a los próximos alcaldes y gobernadores, que no tienen que ser necesariamente del Pacto Histórico”, señaló

El ministro Velasco también se refirió a la aprobación de la ponencia de la reforma a la salud y dijo que esa decisión no va a detener el desarrollo de la comisión accidental. “No se tocó ningún artículo, ya se creó la comisión accidental y en unos días nos entregarán un informe a ver si logramos hacer un acuerdo. Nosotros vamos a ser respetuosos del trabajo de la subcomisión”, aseguró. Precisamente, Andrés Calle ya firmó la resolución que la crea y quedó integrada por 23 representantes de distintos partidos. Tendrá 10 días para presentar un informe a la plenaria, es decir, hasta el próximo 29 de septiembre.

Desde el Gobierno ya habían dicho que el acuerdo nacional empezaría a andar formalmente luego de las elecciones regionales de octubre, precisamente para que no se confundiera con temas de materia de política electoral y porque en medio de ese contexto sería muy difícil consolidar los apoyos por la competencia por los votos. Los recientes tropiezos confirman ese panorama.

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