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Este jueves se llevó a cabo el cierre de la visita de trabajo desarrollada por una delegación de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para observar los hechos de violencia que se han presentado en el país durante los 44 días de paro nacional. Como parte de los actos protocolarios, la vicepresidenta y canciller, Marta lucía Ramírez, despidió a los miembros de la CIDH que estuvieron en Colombia.
“Quiero decirles que nos sentimos muy satisfechos del reconocimiento explícito que hicieron los distintos comisionados a la fortaleza institucional y la fortaleza de nuestra democracia”, de esta manera comenzó su discurso Ramírez, quien aseguró que hay un compromiso en el país para seguir fortaleciendo “nuestras instituciones”.
Luego, la vicepresidenta y canciller se manifestó sobre las muertes que han ocurrido en el marco del paro, y aseveró que desde el Ejecutivo están “tremendamente adoloridos con las vidas que se han perdido” durante las manifestaciones. En este punto, también aprovechó para anunciar el compromiso del presidente Iván Duque y del Estado en general para aclarar las 21 muertes que se han confirmado que se dieron “como consecuencia de estas protestas”.
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La vicepresidenta Ramírez comentó que el gobierno colombiano está a la espera del reporte y las recomendaciones que entregará la CIDH tras su visita a Colombia, acción que se espera que se realice la próxima semana. Se reafirmó “el mayor interés, con la mayor disposición a seguir mejorando todo lo que esté a nuestro alcance para que el Estado colombiano siempre sea un Estado garante de la promoción, del respeto a los derechos humanos”
Frente a los pasos a seguir con la Comisión Interamericana, la también canciller anunció que el representante de Colombia ante la OEA, Alejandro Ordóñez, “ha quedado encargado del trabajo permanente con la CIDH”. Vale recordar que la designación de Ordoñez como el delgado ante la Organización de Estados Americanos ha sido cuestionado desde el comienzo debido a posiciones asumidas por este cuando fue procurador, incluyendo el proceso Petro, acción que implicó un juicio contra el Estado colombiano ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
De acuerdo con la segunda del Ejecutivo, se esperará la entrega del informe por parte de la CIDH para que se defina cómo llevará a cabo Ordóñez el contacto tanto con el ente supranacional como con el Estado colombiano. Sin embargo, se dejó claro que este será responsable de informar a la Comisión periódicamente de los avances que se realicen, como la reforma a la Policía anunciada por el presidente Iván Duque hace uno días.
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Por otro lado, la vicepresidenta aseguró que la CIDH fue testigo de la pérdida económica que ha sufrido el país debido a los bloqueos y a los actos de vandalismo. “Una cosa es el derecho a la protesta, y es importante garantizar siempre ese derecho y nosotros seguiremos siempre garantizándolo. Pero también hay que decir lo que no hace parte del derecho a la protesta: no hace parte del derecho a la protesta toda esta vandalización y esta destrucción a la que han sometido a nuestro país”, agregó en este apartado.
En este mismo camino, Marta Lucía Ramírez pidió que se realice un compromiso en el que se acuerde la posibilidad de “expresar nuestras diferencias” sin tener que recurrir a “destruir el patrimonio que tanto ha costado construir”. Asimismo, señaló que en medio de las varias reuniones que se tuvo con la CIDH, se tuvo la oportunidad de reafirmar la intención de que la Policía tenga un entrenamiento permanente que incluya formación en derechos humanos.
Sobre la Fuerza Pública, la vicepresidenta no hizo referencia directamente a las múltiples denuncias de violaciones de derechos humanos, sino que pidió que recuerden que “esos policías que están en la calle son parte del pueblo colombiano”. Asimismo, se manifestó sobre los actos de violencia en contra de los uniformados y pidió que se tenga en cuenta que “están ofreciendo todos los días su vida, su seguridad, para proteger a los colombianos”.
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Según Ramírez, los enviados de la CIDH expresaron que varios sectores de la sociedad apuntaron a un mismo tema: que se sienten estigmatizados. Por eso pidió que se haga un compromiso de “cuidar la palabra, de cuidar la manera en que nos expresamos de los otros o de lo que dicen otros, porque quizás en las palabras, empieza todo este combustible violento que hemos sufrido los colombianos durante estas últimas semanas”.