Así fue el discurso de Iván Duque ante el Congreso como presidente

El presidente Iván Duque fue chiflado de forma continúa durante su discurso final.

Foto: Mauricio Alvarado Lozada

Más de 16 páginas de extensión tuvo el último discurso de Iván Duque ante el Congreso en pleno. “¡Es con hechos!”, fue el título que recibió el balance que hizo el primer mandatario saliente. Este comenzó su intervención recordando que hace 212 años fue el grito de independencia y a renglón seguido señaló que esa libertada ganada está en peligro en buena parte del mundo.

Uno de los primeros puntos que tocó Iván Duque fue la pandemia. “Atravesamos como Nación por la mayor crisis de la historia reciente de la humanidad que a su vez nos trajo efectos devastadores”, señaló el saliente presidente, que catalogó esta contingencia “como el reto más grande que haya enfrentado presidente colombiano alguno”.

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Además de recordar las consecuencias de la pandemia, destacó los supuestos logros que se tuvieron durante ese tiempo: “Hoy Colombia ha puesto primero a la equidad, logra hitos históricos en el gasto social, avanza en educación, incluyendo la educación universitaria pública gratuita, y tiene la mayor cobertura de salud en su historia”.

El siguiente punto en el discurso fue la denominada paz con legalidad. “Hemos creído en una paz genuina, en la que las víctimas de la violencia son el eje central”, aseveró el presidente. Luego comenzó a hablar de los supuestos logros de su gobierno en cuanto a la paz. En primer orden, mencionó la extensión de la ley de víctimas. Un tema, que a decir verdad, fue por orden de la Corte Constitucional.

También destacó que habría sido el gobiern que más tierras entregó a los campesinos. Allí Iván Duque aprovechó para enviar un “vainazo” a Gustavo Petro y la tesis de que supuestamente recurrirá a la expropiación: “Este proceso de equidad nos demostró que se puede hacer justicia social en el campo,sin expropiaciones ni prejuicios, viendo la alegría de cada nuevo propietario que construye sus sueños”.

Aunque uno de los puntos más flacos de este gobierno y que se ha puesto en duda es el compromiso con la implementación de paz, Iván Duque destacó “que hemos brindado todo el apoyo necesario a la Jurisdicción Especial para la Paz y a la Comisión de la verdad”. En este punto también comentó que hubo un respaldo “institucional y financiero” al sistema de justicia transicional.

Sin hacer clara mención del paro nacional que enfrentó, el presidente saliente habló de que “atendimos el clamor de los jóvenes” y señaló logros como las primeras votaciones de los consejos de juventud, un mayor presupuesto para la educación y la matrícula gratis para los estratos 1,2 y3. Todo esto lo calificó como la mayor “conquista” histórica de un gobierno para los jóvenes.

En cuanto a inversión social, el presidente habló del crecimiento en saneamiento básico y en la instalación de acueductos en el país. Asimismo en el crecimiento en la venta de vivienda en el país. “Con la asignación de 194 mil subsidios VIS empezamos a hacer de Colombia un país de propietarios”, referenció el primer mandatario.

En este capítulo tuvo un reconocimiento especial para la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez: “En este camino, hacia la equidad, las mujeres han sido protagonistas. Colombia contó por primera vez con un gabinete paritario y con una vicepresidenta, que con propósito firme y determinación lideró la equidad de género”. A esta la consideró como una de las grandes impulsoras de programas como “Fondo mujer emprende”.

La creación del Ministerio del Deporte fue otro de los puntos en los que el primer mandatario calificó como uno de sus grandes logros, “Es un ministerio para los deportistas, no para los contratistas”. Para el presidente, fue un gran logro los resultados de los olímpicos y paralímpicos de Tokio 2020. Sin embargo, este no tuvo en cuenta que fue una de las peores olimpiadas de Colombia en el pasado reciente.

Iván Duque consideró que su administración “hizo el compromiso de saldar la deuda histórica con la salud”, por lo que destacó que el acuerdo de punto final. A esto complementó diciendo que dicha decisión habría sido esencial para que Colombia fuera reconocida como uno de los países con “mejor resiliencia al COVID”.

En el punto de las ayudas sociales también destacó las “transferencias monetarias extraordinarias” que hubo durante el punto más difícil de la pandemia. Hubo mención a la devolución del IVA y a la jornada del día sin IVA, criticado por sus posibles implicaciones regresivas en cuanto al erario: “Y también, llevamos a cabo 8 días sin IVA en los que las familias de menores recursos pudieron comprar más a menores precios”.

Duque celebró que durante su gobierno hubo una importante entrega de obras de infraestructura como el túnel de La Línea, algunos proyectos de cuarta generación y en la adjudicación de proyectos 5G. Asimismo destacó el supuesto comienzo de la transición energética.

“Con este mismo empuje, desarrollamos para Colombia una nueva energía. ¡La Transición Energética es una realidad! Presentamos ante este Congreso la Ley de Transición Energética con la que nuestro país está pasando de 28 incipientes MW en 2018 a llegar a 2800 de capacidad instalada, para finales de este año 2022″, añadió el saliente presidente saliente.

Iván Duque insistió en su discurso de hacer Colombia el “Silicon Valley de América Latina”. “De nuestra meta de 100 mil programadores, ya 76 mil colombianos se han formado. Y buscando conectar a los colombianos, con las subastas del espectro y la ley TIC, pasamos de 12 millones de conexiones en tecnología 4G en el año 2018 a más de 29 millones, en este año 2022″, expresó.

Otro de los discursos que Duque volvió a usar en su última intervención ante el Congreso fue el de “la economía naranja”. En este punto celebró los contratos con Netflix y otras plataformas que han permitido ingresar “más de $USD300 millones para invertir en proyectos audiovisuales. Concluyó en este punto que “la cultura, señores congresistas, también es equidad”.

El siguiente apartado fue sobre Providencia y la reconstrucción tras el huracán Iota. “Hoy me enorgullece decir que existe una nueva Providencia. Hemos reconstruido, reparado y construido más de 1.700 viviendas, restablecimos el 100% del servicio de energía eléctrica y de la conectividad, y garantizamos la educación de los niños y niñas”, comentó Duque, que fue bastante criticado en su momento debido a que se comprometió a la total reconstrucción de Providencia en 100 días, cuando la realidad fue que las obras hasta hace poco seguían.

En cuanto a la protección de la biodiversidad y el cambio climático, Duque reseñó que en su administración se tramitó la ley de delitos ambientales, la ley de acción climática y “hemos dado un paso histórico al lograr que el 30% de nuestro territorio marino sea declarado área protegida”. Luego sacó otro de los aforismos típicos de su administración: “Nuestra apuesta de producir conservando y conservar produciendo ya allana el camino de nuestro futuro”.

El siguiente punto de la intervención apuntó a narcotráfico, derechos humanos, la lucha contra los grupos ilegales, y el asesinato de líderes sociales: “Asimismo, creamos una política pública que garantice su labor de defensa de los Derechos Humanos. Y lanzamos la Ley de Comunales para fortalecer su seguridad, promover nuevos liderazgos y fortalecer su capacidad de gestión de proyectos sociales y productivos”.

Duque sacó pecho por las acciones en contra de las disidencias y el Clan del Golfo. Catalogó como sus grandes logros las muertes de alias “Caín”, “Uriel”, “Fabián”, “Guacho”, “Iván Mordisco” y “Rodrigo Cadete”. A este listado añadió el alias de “Otoniel”, que fue capturado y extraditado. Aunque el envío del líder del Clan del Golfo a los Estados Unidos fue rechazada, este aseveró en su discurso “paga sus crímenes internacionales, sin que esto impida que enfrente a la justicia colombiana y retribuya a las víctimas”.

La lucha contra disidencias y el Clan del Golfo fue seguida por un reconocimiento a la Fuerza Pública: “Sea este el momento para recordar a todos los soldados y policías de la patria que han caído en su labor, y honrar de manera especial a los 22 cadetes de la Escuela de Policía General Santander víctimas del cobarde atentado terrorista perpetrado por el ELN en enero del año 2019″.

Por último, el presidente saliente tuvo unas palabras para su sucesor: “le deseamos éxito en su gestión”. A renglón seguido advirtió que su intención no será marginarse como lo hizo Juan Manuel Santos: “El próximo 7 de agosto cuando recupere mi condición de ciudadano, mi voz estará siempre atenta para construir y edificar soluciones para nuestra Nación”.