Así funcionará el comité que continuará con el legado de la Comisión de la Verdad
El Comité de Seguimiento entrará en funcionamiento luego del 28 de junio, fecha en la que la Comisión de la Verdad publicará el Informe Final sobre la verdad histórica del conflicto.
A cinco días de que el país conozca el Informe Final de la verdad sobre el conflicto armado, la Comisión de la Verdad (CEV) definió cómo funcionará el comité que continuará con su legado una vez esta entidad desaparezca. Aunque aún no se sabe con certeza quiénes integrarán el equipo, El Espectador tuvo acceso al documento que le da vida y cuáles son los lineamientos que lo regirán.
Un poco de contexto
Primero, cabe recordar el porqué se necesita este comité. Como se sabe, el objetivo de la Comisión de la Verdad es construir un relato sobre cómo y por qué se profundizó y degradó el conflicto armado en Colombia, siendo una de las guerras internas más largas del mundo, pues el país duró más de 50 años en enfrentamiento con las antiguas Farc.
El trabajo de la entidad culmina con la entrega del Informe Final de la Verdad, que contendrá, justamente, los factores que hicieron posible una guerra tan larga y con tantos matices, e incluirá hallazgos y recomendaciones para que el nuevo gobierno, en cabeza de Gustavo Petro, las tenga en cuenta y ponga en marcha reformas que ayuden a romper las estructuras de fondo que sostienen los patrones del conflicto.
El informe se entregará el próximo 28 de junio y la Comisión de la Verdad lo socializará hasta el 28 de agosto, fecha en la que la institución desaparece porque cumplió el mandato para el que fue creada. ¿Qué pasará con las recomendaciones que le entregue al país y a Petro?
Pues bien, para responder esa pregunta, la Comisión de la Verdad creará el Comité de Seguimiento y Monitoreo, para que un equipo comprometido con la paz revise que se implementen las recomendaciones. También existirá para cuidar el legado de la entidad que por más de tres años dirigió el padre Francisco de Roux.
¿Cómo funcionará?
Estará integrado por siete personas que han dedicado su vida a trabajar por la construcción de paz y por la defensa de los derechos humanos desde distintos frentes. Todavía no se conocen los nombres oficialmente porque algunos de ellos no han confirmado si, en efecto, aceptarán el cargo. No obstante, desde ya se sabe que el comité tendrá representantes de la población LGBT+ y las negritudes, entre otros. Tendrá una duración de siete años para realizar su labor.
Según la resolución, el Comité entrará en funcionamiento una vez se publique el Informe Final y operará hasta que la CEV misma lo determine. Además, por seis meses (desde el inicio de sus funciones) contará con el acompañamiento de una persona -elegida por el pleno de los comisionados- para que contribuya al empalme del Comité con la Comisión, y en lo que el nuevo grupo requiera en sus inicios.
Según el documento, el Comité deberá sesionar por lo menos dos días al mes: " Los integrantes del Comité podrán invitar a sus sesiones a quienes consideren necesario para el desarrollo de la agenda definida, incluyendo a integrantes de la Comunidad Internacional, ex Comisionados de la Verdad y víctimas del conflicto”.
Funciones
Este equipo tendrá varias funciones, entre ellas publicar informes semestrales en los que evalúen los avances y dificultades en la implementación de estas recomendaciones que, si bien no son obligatorias para el Estado, están hechas para consolidar la reconciliación de la sociedad y la paz.
“Los informes deberán contar con un enfoque territorial, nacional y de los colombianos en el exilio, y un enfoque diferencial y de género. De considerarlo necesario, el Comité podrá rendir informes sobre temáticas específicas relacionadas con su objetivo, previa aprobación por parte de sus integrantes”, dice el documento. Esto es importante porque responde a los temas desde los cuales la Comisión de la Verdad el conflicto armado. Preguntarse sobre el exilio, los horrores cometidos basados en género, y ver cómo los factores de la guerra se arraigaron de forma diferenciada en cada territorio son parte central del trabajo de la CEV.
El seguimiento a la implementación de las recomendaciones será un trabajo que el Comité debe realizar de la mano con organizaciones sociales, en especial de víctimas y de derechos humanos. Para ello, la Comisión de la Verdad ha construido una red de aliados de más de 3.400 entidades y personas de Colombia y de más de 20 países en los que la Comisión ha trabajado.
¿Cómo fueron seleccionados?
Según la resolución 019 de este año, firmada por el presidente de la Comisión, el padre Francisco de Roux, los miembros del comité fueron seleccionados por medio de una convocatoria privada, en la que los y las comisionadas postularon varias hojas de vida. Que fuera plural para que recogiera “la voz de distintos sectores, poblaciones y de los territorios, y su composición garantice la equidad de género”, fue uno de los requisitos para ser seleccionado.
Estar comprometido con la construcción de paz, tener capacidad para incidir políticamente y capacidad de análisis “de las dinámicas territoriales y poblacionales y los enfoques diferenciales”, fueron algunos de las condiciones que debía cumplir cada seleccionado.
¿Cómo se financiará?
El Comité de Seguimiento y Monitoreo se financiará principalmente por tres vías: a través de recursos provenientes del Presupuesto General “que sean necesarios para el cumplimiento de sus funciones”. Estos deberán asignarse a la JEP y desde allí se usarán para el pago de los siete miembros. Donaciones públicas o privadas, y aportes provenientes de la cooperación internacional son los otros dos caminos que harán viable este comité. “El Comité solicitará anualmente a través de la JEP al Gobierno Nacional los recursos necesarios para garantizar el cumplimiento de sus funciones”, especifica el documento.
A los miembros del Comité de Seguimiento y Monitoreo, se les reconocerá honorarios por la asistencia a cada sesión de trabajo, equivalente al salario diario de un director/a de la Comisión durante el último año de su funcionamiento, con un incremento anual, en proporción al crecimiento del IPC promedio nacional certificado por el DANE. De igual forma, se reconocerá a los miembros del Comité de Seguimiento y Monitoreo, los tiquetes y gastos de viaje necesarios para el desarrollo de sus funciones.
El próximo 28 de junio la Comisión de la Verdad entregará al país el Informe Final de la Verdad. Será un producto transmedia que contendrá la verdad histórica de lo que ocurrió en la guerra en Colombia. Es el resultado de más de tres años de trabajo para escuchar, tejer y narrar lo que nos pasó, a partir de más de 27 mil entrevistas a todas las partes del conflicto, entre otros insumos.
Con esa entrega, y la posterior socialización del contenido del informe, la Comisión de la Verdad terminará su labor, pues finaliza el mandato por el cual fue creada en 2017, gracias a la firma del Acuerdo de Paz entre el Estado y la antigua guerrilla de las Farc, en 2016.
A cinco días de que el país conozca el Informe Final de la verdad sobre el conflicto armado, la Comisión de la Verdad (CEV) definió cómo funcionará el comité que continuará con su legado una vez esta entidad desaparezca. Aunque aún no se sabe con certeza quiénes integrarán el equipo, El Espectador tuvo acceso al documento que le da vida y cuáles son los lineamientos que lo regirán.
Un poco de contexto
Primero, cabe recordar el porqué se necesita este comité. Como se sabe, el objetivo de la Comisión de la Verdad es construir un relato sobre cómo y por qué se profundizó y degradó el conflicto armado en Colombia, siendo una de las guerras internas más largas del mundo, pues el país duró más de 50 años en enfrentamiento con las antiguas Farc.
El trabajo de la entidad culmina con la entrega del Informe Final de la Verdad, que contendrá, justamente, los factores que hicieron posible una guerra tan larga y con tantos matices, e incluirá hallazgos y recomendaciones para que el nuevo gobierno, en cabeza de Gustavo Petro, las tenga en cuenta y ponga en marcha reformas que ayuden a romper las estructuras de fondo que sostienen los patrones del conflicto.
El informe se entregará el próximo 28 de junio y la Comisión de la Verdad lo socializará hasta el 28 de agosto, fecha en la que la institución desaparece porque cumplió el mandato para el que fue creada. ¿Qué pasará con las recomendaciones que le entregue al país y a Petro?
Pues bien, para responder esa pregunta, la Comisión de la Verdad creará el Comité de Seguimiento y Monitoreo, para que un equipo comprometido con la paz revise que se implementen las recomendaciones. También existirá para cuidar el legado de la entidad que por más de tres años dirigió el padre Francisco de Roux.
¿Cómo funcionará?
Estará integrado por siete personas que han dedicado su vida a trabajar por la construcción de paz y por la defensa de los derechos humanos desde distintos frentes. Todavía no se conocen los nombres oficialmente porque algunos de ellos no han confirmado si, en efecto, aceptarán el cargo. No obstante, desde ya se sabe que el comité tendrá representantes de la población LGBT+ y las negritudes, entre otros. Tendrá una duración de siete años para realizar su labor.
Según la resolución, el Comité entrará en funcionamiento una vez se publique el Informe Final y operará hasta que la CEV misma lo determine. Además, por seis meses (desde el inicio de sus funciones) contará con el acompañamiento de una persona -elegida por el pleno de los comisionados- para que contribuya al empalme del Comité con la Comisión, y en lo que el nuevo grupo requiera en sus inicios.
Según el documento, el Comité deberá sesionar por lo menos dos días al mes: " Los integrantes del Comité podrán invitar a sus sesiones a quienes consideren necesario para el desarrollo de la agenda definida, incluyendo a integrantes de la Comunidad Internacional, ex Comisionados de la Verdad y víctimas del conflicto”.
Funciones
Este equipo tendrá varias funciones, entre ellas publicar informes semestrales en los que evalúen los avances y dificultades en la implementación de estas recomendaciones que, si bien no son obligatorias para el Estado, están hechas para consolidar la reconciliación de la sociedad y la paz.
“Los informes deberán contar con un enfoque territorial, nacional y de los colombianos en el exilio, y un enfoque diferencial y de género. De considerarlo necesario, el Comité podrá rendir informes sobre temáticas específicas relacionadas con su objetivo, previa aprobación por parte de sus integrantes”, dice el documento. Esto es importante porque responde a los temas desde los cuales la Comisión de la Verdad el conflicto armado. Preguntarse sobre el exilio, los horrores cometidos basados en género, y ver cómo los factores de la guerra se arraigaron de forma diferenciada en cada territorio son parte central del trabajo de la CEV.
El seguimiento a la implementación de las recomendaciones será un trabajo que el Comité debe realizar de la mano con organizaciones sociales, en especial de víctimas y de derechos humanos. Para ello, la Comisión de la Verdad ha construido una red de aliados de más de 3.400 entidades y personas de Colombia y de más de 20 países en los que la Comisión ha trabajado.
¿Cómo fueron seleccionados?
Según la resolución 019 de este año, firmada por el presidente de la Comisión, el padre Francisco de Roux, los miembros del comité fueron seleccionados por medio de una convocatoria privada, en la que los y las comisionadas postularon varias hojas de vida. Que fuera plural para que recogiera “la voz de distintos sectores, poblaciones y de los territorios, y su composición garantice la equidad de género”, fue uno de los requisitos para ser seleccionado.
Estar comprometido con la construcción de paz, tener capacidad para incidir políticamente y capacidad de análisis “de las dinámicas territoriales y poblacionales y los enfoques diferenciales”, fueron algunos de las condiciones que debía cumplir cada seleccionado.
¿Cómo se financiará?
El Comité de Seguimiento y Monitoreo se financiará principalmente por tres vías: a través de recursos provenientes del Presupuesto General “que sean necesarios para el cumplimiento de sus funciones”. Estos deberán asignarse a la JEP y desde allí se usarán para el pago de los siete miembros. Donaciones públicas o privadas, y aportes provenientes de la cooperación internacional son los otros dos caminos que harán viable este comité. “El Comité solicitará anualmente a través de la JEP al Gobierno Nacional los recursos necesarios para garantizar el cumplimiento de sus funciones”, especifica el documento.
A los miembros del Comité de Seguimiento y Monitoreo, se les reconocerá honorarios por la asistencia a cada sesión de trabajo, equivalente al salario diario de un director/a de la Comisión durante el último año de su funcionamiento, con un incremento anual, en proporción al crecimiento del IPC promedio nacional certificado por el DANE. De igual forma, se reconocerá a los miembros del Comité de Seguimiento y Monitoreo, los tiquetes y gastos de viaje necesarios para el desarrollo de sus funciones.
El próximo 28 de junio la Comisión de la Verdad entregará al país el Informe Final de la Verdad. Será un producto transmedia que contendrá la verdad histórica de lo que ocurrió en la guerra en Colombia. Es el resultado de más de tres años de trabajo para escuchar, tejer y narrar lo que nos pasó, a partir de más de 27 mil entrevistas a todas las partes del conflicto, entre otros insumos.
Con esa entrega, y la posterior socialización del contenido del informe, la Comisión de la Verdad terminará su labor, pues finaliza el mandato por el cual fue creada en 2017, gracias a la firma del Acuerdo de Paz entre el Estado y la antigua guerrilla de las Farc, en 2016.