Así se elegirán los primeros Consejos de Juventud
Por primera vez participarán candidatos y electores desde los 14 años en comicios nacionales. Hasta ahora van 262 inscripciones con tarjeta de identidad y 794 con cédula. Según autoridades electorales, la idea es que los jóvenes tengan real comunicación con la institucionalidad.
En medio de la efervescencia y el calor que viven las juventudes y la ciudadanía en general, volcadas en las calles en el Paro Nacional, entra en escena un hecho inédito en el país: el desarrollo de las elecciones a los Consejos Municipales y Locales de Juventud. Si bien estos comicios estaban agendados para el año pasado, la pandemia impidió que se realizaran. Ahora, y como antesala a las elecciones presidenciales y de Congreso, por primera vez en la historia del país podrán participar en una carrera electoral ciudadanos menores de edad. Tanto la Registraduría, el Consejo Nacional Electoral (CNE), como la Misión de Observación Electoral (MOE), afirman que estas votaciones son un espacio pedagógico para que los y las adolescentes y adultos jóvenes participen e incidan en las decisiones institucionales que les afectan.
“Son unos escenarios de participación muy importantes donde los jóvenes pueden alzar su voz de forma institucional, opinar sobre las diferentes políticas públicas e incidir en la construcción de las mismas”, destacó Nicolás Farfán, registrador delegado en lo Electoral. Estos sufragios desarrollan el artículo 45 de la Constitución Política que dice que el Estado y la sociedad deben garantizar “la participación activa de los jóvenes en los organismos públicos y privados que tengan a cargo la protección, educación y progreso de la juventud”, y responden a dos leyes estatutarias que, junto con otros mecanismos, conforman el Estatuto de Ciudadanía Juvenil.
Por eso las y los candidatos que se postulen, y las y los electores que voten, deben ser personas entre los 14 hasta los 28 años. “La ley estableció que los menores de edad están en proceso de consolidación de sus criterios y en capacidad de ejercer sus derechos políticos”, agregó Farfán. Indicó, además, que este nuevo proceso representa un desafío logístico para la Registraduría. Como solo las personas mayores de 18 años aparecen en el censo electoral, es necesario que los ciudadanos con tarjeta de identidad se inscriban en la entidad, a través de plataformas habilitadas en todas las sedes. Quienes ya están incorporados en el censo y no hayan cambiado de domicilio, no es necesario que inscriban sus datos, aclaró la Registraduría.
Si bien las elecciones son el próximo 28 de noviembre, las inscripciones de los jóvenes para votar iniciaron el pasado 1 de junio y se extienden hasta el 30 de agosto. A corte del 9 de junio, la Registrauría indicó que van 1.056 inscripciones: 262 de tarjetas de identidad y 794 de cédulas de ciudadanía. Asimismo, el calendario electoral dicta que el período de inscripción de candidatos será del 28 de julio al 28 de agosto. ¿Quiénes pueden aspirar a los Consejos de Juventud? Los y las jóvenes que hagan parte de movimientos o partidos políticos, de listas independientes (que deben recolectar firmas), y los provenientes de procesos y prácticas organizativas (que corresponden a plataformas juveniles registradas en las personerías).
Apropiarse del sistema electoral
Para Marcela Llano, asesora de Prevención, Capacitación y Fortalecimiento Democrático del CNE, los Consejos de Juventud saldan una deuda del Estado con una parte fundamental de la sociedad: “Tienen un componente formativo súper alto. Estamos a favor de propiciar las competencias individuales y colectivas de los y las jóvenes en la construcción de lo público. La idea es que ellos y ellas se acerquen al sistema electoral y empiecen a sentir los valores, principios y reglas sobre las que se fundamenta el Estado social de derecho, y para que en un futuro, cuando sean candidatos de corporaciones del poder público, estén lejos de todas las prácticas antidemocráticas que suelen ocurrir en la política colombiana”, aseguró.
Tanto así que desde el año pasado, el CNE, la Registraduría, la ESAP, la MOE y el PNUD, entre otras entidades, crearon una escuela preparatoria de los Consejos de Juventud. Por motivo del COVID-19 se realizó a distancia, con dificultades, pero lograron capacitar a 27 mil jóvenes. Este año, explicó Llano, abrieron cupo para siete mil más. “En 2020 fue un poco difícil el proceso educativo porque los contenidos no estaban adaptados a la virtualidad y la mayoría de los jóvenes en la ruralidad atienden las actividades por el celular. Entonces, en esta versión adecuamos los contenidos para que los realicen con conexión desde los celulares”, dijo. Adicional a esto, hay comités de elecciones de Consejos de Juventud en cada municipio. “Están conformados por la Fuerza Pública, la Registraduría, las alcaldías y las juventudes y son los encargados de hacer la actividad pedagógica en cada territorio”, añadió.
Aunque la logística está concentrada en la Registraduría, y la ley establece casi todas las normas por las que se deben regir estas elecciones -y da la competencia para regirse bajo las reglas electorales ordinarias en caso de que haya un vacío- el CNE tiene competencia para acompañar dos posibles circunstancias: la trashumancia y la revocatorias de inscripciones. En la primera podrán adelantar investigaciones sobre quejas y denuncias, y adaptar los elementos de revisión a las tarjetas de identidad. En la segunda, observará las inhabilidades para aquellos que sean miembros de corporaciones públicas y, contrario a la ley, participen como candidatos.
El desafío de ampliar la participación
A todo esto, Marlon Pabón, subcoordinador de Justicia Electoral de la MOE, agregó que los comicios servirán a todas luces para ampliar la participación. No obstante, resaltó que, la pandemia, la pedagogía y visibilización que haga la Registraduría, serán factores que definirán el potencial electoral de los jóvenes que ejerzan su derecho al voto. “Sobre todo en los territorios, para que se inscriban candidaturas y se hagan procesos de socialización”expresó. “Hasta el momento no se conocen protocolos para el desarrollo de las campañas, solo los del día de las elecciones y recolección de firmas (por medio de las elecciones atípicas que se han realizado)”, enfatizó. Todas las organizaciones electorales tienen las expectativas puestas en estos sufragios, entre otras cosas por el ambiente de inconformidad que respira el país. Sin embargo, el mensaje de la MOE frente a ello es claro: “Con varias expresiones de liderazgo y culturales los jóvenes han impusaldo las manifestaciones. Este escenario institucional podrá servir para canalizar los reclamos, pero no se puede pensar que recogerá todas las visiones que contiene el Paro. Pero, servirá para ver cómo está el panorama y diversidad de estos Consejos”.
Este es el calendario electoral:
En medio de la efervescencia y el calor que viven las juventudes y la ciudadanía en general, volcadas en las calles en el Paro Nacional, entra en escena un hecho inédito en el país: el desarrollo de las elecciones a los Consejos Municipales y Locales de Juventud. Si bien estos comicios estaban agendados para el año pasado, la pandemia impidió que se realizaran. Ahora, y como antesala a las elecciones presidenciales y de Congreso, por primera vez en la historia del país podrán participar en una carrera electoral ciudadanos menores de edad. Tanto la Registraduría, el Consejo Nacional Electoral (CNE), como la Misión de Observación Electoral (MOE), afirman que estas votaciones son un espacio pedagógico para que los y las adolescentes y adultos jóvenes participen e incidan en las decisiones institucionales que les afectan.
“Son unos escenarios de participación muy importantes donde los jóvenes pueden alzar su voz de forma institucional, opinar sobre las diferentes políticas públicas e incidir en la construcción de las mismas”, destacó Nicolás Farfán, registrador delegado en lo Electoral. Estos sufragios desarrollan el artículo 45 de la Constitución Política que dice que el Estado y la sociedad deben garantizar “la participación activa de los jóvenes en los organismos públicos y privados que tengan a cargo la protección, educación y progreso de la juventud”, y responden a dos leyes estatutarias que, junto con otros mecanismos, conforman el Estatuto de Ciudadanía Juvenil.
Por eso las y los candidatos que se postulen, y las y los electores que voten, deben ser personas entre los 14 hasta los 28 años. “La ley estableció que los menores de edad están en proceso de consolidación de sus criterios y en capacidad de ejercer sus derechos políticos”, agregó Farfán. Indicó, además, que este nuevo proceso representa un desafío logístico para la Registraduría. Como solo las personas mayores de 18 años aparecen en el censo electoral, es necesario que los ciudadanos con tarjeta de identidad se inscriban en la entidad, a través de plataformas habilitadas en todas las sedes. Quienes ya están incorporados en el censo y no hayan cambiado de domicilio, no es necesario que inscriban sus datos, aclaró la Registraduría.
Si bien las elecciones son el próximo 28 de noviembre, las inscripciones de los jóvenes para votar iniciaron el pasado 1 de junio y se extienden hasta el 30 de agosto. A corte del 9 de junio, la Registrauría indicó que van 1.056 inscripciones: 262 de tarjetas de identidad y 794 de cédulas de ciudadanía. Asimismo, el calendario electoral dicta que el período de inscripción de candidatos será del 28 de julio al 28 de agosto. ¿Quiénes pueden aspirar a los Consejos de Juventud? Los y las jóvenes que hagan parte de movimientos o partidos políticos, de listas independientes (que deben recolectar firmas), y los provenientes de procesos y prácticas organizativas (que corresponden a plataformas juveniles registradas en las personerías).
Apropiarse del sistema electoral
Para Marcela Llano, asesora de Prevención, Capacitación y Fortalecimiento Democrático del CNE, los Consejos de Juventud saldan una deuda del Estado con una parte fundamental de la sociedad: “Tienen un componente formativo súper alto. Estamos a favor de propiciar las competencias individuales y colectivas de los y las jóvenes en la construcción de lo público. La idea es que ellos y ellas se acerquen al sistema electoral y empiecen a sentir los valores, principios y reglas sobre las que se fundamenta el Estado social de derecho, y para que en un futuro, cuando sean candidatos de corporaciones del poder público, estén lejos de todas las prácticas antidemocráticas que suelen ocurrir en la política colombiana”, aseguró.
Tanto así que desde el año pasado, el CNE, la Registraduría, la ESAP, la MOE y el PNUD, entre otras entidades, crearon una escuela preparatoria de los Consejos de Juventud. Por motivo del COVID-19 se realizó a distancia, con dificultades, pero lograron capacitar a 27 mil jóvenes. Este año, explicó Llano, abrieron cupo para siete mil más. “En 2020 fue un poco difícil el proceso educativo porque los contenidos no estaban adaptados a la virtualidad y la mayoría de los jóvenes en la ruralidad atienden las actividades por el celular. Entonces, en esta versión adecuamos los contenidos para que los realicen con conexión desde los celulares”, dijo. Adicional a esto, hay comités de elecciones de Consejos de Juventud en cada municipio. “Están conformados por la Fuerza Pública, la Registraduría, las alcaldías y las juventudes y son los encargados de hacer la actividad pedagógica en cada territorio”, añadió.
Aunque la logística está concentrada en la Registraduría, y la ley establece casi todas las normas por las que se deben regir estas elecciones -y da la competencia para regirse bajo las reglas electorales ordinarias en caso de que haya un vacío- el CNE tiene competencia para acompañar dos posibles circunstancias: la trashumancia y la revocatorias de inscripciones. En la primera podrán adelantar investigaciones sobre quejas y denuncias, y adaptar los elementos de revisión a las tarjetas de identidad. En la segunda, observará las inhabilidades para aquellos que sean miembros de corporaciones públicas y, contrario a la ley, participen como candidatos.
El desafío de ampliar la participación
A todo esto, Marlon Pabón, subcoordinador de Justicia Electoral de la MOE, agregó que los comicios servirán a todas luces para ampliar la participación. No obstante, resaltó que, la pandemia, la pedagogía y visibilización que haga la Registraduría, serán factores que definirán el potencial electoral de los jóvenes que ejerzan su derecho al voto. “Sobre todo en los territorios, para que se inscriban candidaturas y se hagan procesos de socialización”expresó. “Hasta el momento no se conocen protocolos para el desarrollo de las campañas, solo los del día de las elecciones y recolección de firmas (por medio de las elecciones atípicas que se han realizado)”, enfatizó. Todas las organizaciones electorales tienen las expectativas puestas en estos sufragios, entre otras cosas por el ambiente de inconformidad que respira el país. Sin embargo, el mensaje de la MOE frente a ello es claro: “Con varias expresiones de liderazgo y culturales los jóvenes han impusaldo las manifestaciones. Este escenario institucional podrá servir para canalizar los reclamos, pero no se puede pensar que recogerá todas las visiones que contiene el Paro. Pero, servirá para ver cómo está el panorama y diversidad de estos Consejos”.
Este es el calendario electoral: