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El debate sobre si se abre el Congreso, se sesiona de manera virtual o si, definitivamente, permanece cerrado mientras dura la emergencia generada por el brote del nuevo coronavirus en el país sigue su ritmo. Este jueves, nueve congresistas, que representan a siete partidos políticos en el Congreso, les insistieron a los presidentes de Senado y Cámara, Lidio García y Carlos Cuenca, respectivamente, que “cumplan con sus obligaciones constitucionales y legales” e inicien las sesiones ordinarias.
“En estos momentos tan críticos para nuestra vida republicana, el funcionamiento de las tres ramas del poder público no es un pequeño detalle, sino una necesidad fundamental para mantener la democracia”, dice la misiva, y le señalan a García que, como presidente del Senado, debe mantener el funcionamiento de la rama legislativa y, además, adecuarla a las circunstancias actuales. Para los congresistas, es una forma de que el país conozca las necesidades de las regiones y coordinar una respuesta desde el Estado.
Hace un llamado para atender las peticiones de los ciudadanos desde diferentes regiones en medio de la crisis y citan la Ley Quinta de 1992, que es el reglamento del Congreso, cuando señala que “en caso de perturbación del orden público, podrán reunirse en el sitio que designe el presidente del Senado”.
“Es fundamental hacer énfasis en este punto, ya que nos encontramos frente a una norma expedida hace 28 años, por lo que era imposible en ese momento prever las nuevas tecnologías que existen hoy en día y que nos abren un inmenso abanico de posibilidades ante las actuales circunstancias para sesionar”, dice la carta.
Los congresistas argumentan, con relación al estado de emergencia económica y social contemplado en el artículo 215 de la Constitución, que, aunque la iniciativa debe estar en cabeza del Gobierno Nacional, ese punto de la carta magna “no es otra cosa que la materialización del sistema de pesos y contrapesos, que es un eje transversal de la estructura del Estado Social de Derecho que tenemos en Colombia, y con mayor razón en un Estado de Emergencia”.
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“En las actuales circunstancias, renunciar, como congresistas, a ejercer nuestra función de control político de manera inmediata sobre las medidas que el gobierno ha venido adoptando para aliviar la crisis de salud pública y financiera actual, equivale a poner en riesgo la separación de poderes y a dotar al gobierno”, dicen los legisladores.
Por otro parte, citaron varios casos en otros países en donde el los congresos están legislando en medio de la crisis. “Parlamentos como los de España, Francia, Estados Unidos, Italia, Alemania, el Parlamento Europeo, entre otros, que atravesando grandes retos causados por el aumento exponencial de los casos de infectados y muertes en su territorio, han encontrado formas para dar trámite y seguir funcionando para la aprobación de leyes como solución a problemas relacionados con la crisis y la constante evaluación de los estados de emergencia, a través de sesiones mixtas, a través de voceros por partido, en sesiones informales y también de manera virtual”.
Para los congresistas, el Congreso de la República no pude ser un “espectador irresponsable” de la pandemia. “Nuestro deber constitucional es velar porque haya soluciones económicas, sociales y laborales que estén a la altura de nuestro pueblo y que sean abordadas de manera inmediata. ¿Cuántos muertos se necesitan para que el Congreso empiece a trabajar?”, concluye.
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Desde antes de que se decretara la cuarentena, la discusión sobre si el Congreso debe sesionar o no está sobre la mesa. El pasado 16 de marzo se tomó la decisión de suspender el inicio de las sesiones, esa medida iría hasta el 13 de abril, fecha en la que también está prevista la vigencia de la cuarentena, sin embargo, no se descarta una extensión de la medida en caso de que la situación sanitaria sea más grave.
Hasta el momento, el único pronunciamiento que ha hecho el senador Lidio García, presidente del Congreso, es que se está a la espera de la expedición de un decreto legislativo por parte del Gobierno Nacional que habilite la realización de sesiones virtuales, porque, dice García, según la Ley Quinta “solo es legalmente posible sesionar en forma presencial”.
“Toda actividad que se quiera realizar por fuera de estas condiciones carece de las formalidades y requisitos de la ley orgánica del reglamento interno del Congreso y sus cámaras y resulta improcedente por ilegal”, puntualizaron García y el secretario general del Senado, Gregorio Eljach.