El gobierno intenta relajar ingreso a la diplomacia con una resolución
Si bien el documento aún no ha sido firmado, los sindicatos de la Cancillería y exministros de Exteriores lanzaron alertas por varios puntos. El Ministerio aún no se pronuncia.
Leonardo Botero Fernández
El Gobierno del presidente Gustavo Petro busca, a través de una resolución, que sea más fácil ingresar a la carrera diplomática. Aunque el documento hasta ahora se publicó para comentarios, varios de los cambios que plantea derivaron en alertas entre los principales sindicatos de la Cancillería que –además de ver cómo históricamente a las embajadas y consulados llegan personas que no son de carrera– advirtieron que la nueva vía jurídica relajaría los requisitos para hacer parte del servicio exterior.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
El Gobierno del presidente Gustavo Petro busca, a través de una resolución, que sea más fácil ingresar a la carrera diplomática. Aunque el documento hasta ahora se publicó para comentarios, varios de los cambios que plantea derivaron en alertas entre los principales sindicatos de la Cancillería que –además de ver cómo históricamente a las embajadas y consulados llegan personas que no son de carrera– advirtieron que la nueva vía jurídica relajaría los requisitos para hacer parte del servicio exterior.
El principal propósito, como se lee en el borrador de resolución, es que el ingreso a la carrera diplomática, a la que se entra en el cargo de tercer secretario en periodo de prueba, sea más incluyente.
Para ese propósito, el principal foco de los cambios tiene que ver con las pruebas y criterios de acciones afirmativas, es decir, para facilitar el ingreso de personas de poblaciones vulnerables, dándoles un porcentaje adicional en la evaluación final.
En el concurso pasado se definieron dos fases. La primera, consistente en pruebas de conocimiento de español, de Colombia y de contexto internacional. Y la segunda, una evaluación personal con prueba psicotécnica y entrevista. Para la resolución de la polémica, se mantuvieron esas dos fases y se diseñó una tercera, que consiste en una prueba oral, a través de una presentación en video.
Las personas pertenecientes a pueblos indígenas, comunidades negras, afrocolombianas, palenqueras, pueblo rom o raizales obtendrán 5% en el puntaje de las pruebas escritas. Los aspirantes que estén en el Sisbén A y B recibirán otro 5%. Y las personas reconocidas como víctimas del conflicto armado conseguirán también un 5% adicional. Y todos serían acumulables.
Y aunque no es el principal cambio, uno de los más llamativos es que para ingresar ya no se necesitaría B2 en la segunda lengua, sino B1. En pocas palabras, el B2 se refiere a un nivel en el que se pueden mantener conversaciones en un ámbito profesional y escribir textos complejos. En contraparte, las personas certificadas con B1, aunque tienen una comprensión de la lengua, esta es menos especializada.
Sin embargo, los dos principales sindicatos del Ministerio de Relaciones Exteriores expresaron sus dudas. Tanto la Asociación Diplomática y Consular de Colombia (Asodiplo) como la Unión de Funcionarios de Carrera Diplomática y Consular (Unidiplo) cuestionaron los cambios planteados en la resolución para el concurso de ingreso a la carrera diplomática de 2026.
También hay preocupación entre exdiplomáticos, quienes insisten en que, aunque sí son necesarias estrategias que promuevan una mayor participación en el concurso, no se pueden afectar las exigencias de ingreso.
Al momento del cierre de esta edición, la Cancillería, en cabeza de Luis Gilberto Murillo, no se ha pronunciado.
Un proceso ‘más fácil’
Voces de los sindicatos aceptaron la necesidad de que haya “acciones afirmativas”. Sin embargo, aseguraron que, con las condiciones propuestas en la resolución –que aún no ha sido firmada–, esto se haría de manera “forzosa”. Además, se preguntan por los criterios técnicos para definir dichas acciones.
“De un examen rápido de los resultados de la Fase 1 del Concurso de Ingreso efectuado en el año 2023, podemos encontrar que la aplicación de las acciones afirmativas acumulables que propone el texto habría permitido, por ejemplo, que el aspirante que ocupó el puesto número 200 en el concurso, incrementa su puntaje lo suficiente para ingresar en los 50 mejores puntajes y avanzar a la siguiente fase”, aseguró Unidiplo sobre el borrador de resolución adelantado por El País de Cali.
Según el sindicato, esto lleva a que se afecte “el derecho a la igualdad de los aspirantes con puntajes superiores”, además de afectar la integridad del concurso al “no garantizar los mínimos necesarios para desempeñar de manera correcta las funciones correspondientes a un funcionario de carrera diplomática”. Algo que pasa también al permitir los porcentajes adicionales y acumulables.
Sobre la prueba oral, para Unidiplo el formato de video podría llevar a que los participantes preparen un libreto y repitan el ejercicio tanto como lo necesiten, lo que pone en entredicho la evaluación certera de las competencias para expresarse de manera espontánea.
Lea también: Migración y economía: estos son los temas de la reunión entre Mulino y Petro
Pero no son solo los sindicatos los que han manifestado su preocupación. En diálogo con El Espectador, Julio Londoño Paredes, canciller de Colombia durante el gobierno de Virgilio Barco (1986 - 1990), le preocupa que se flexibilice la exigencia de la segunda lengua.
“No es posible que haya un diplomático de carrera que no tenga un inglés de alto nivel para desempeñarse en cualquier parte del mundo. No se puede bajar el nivel requerido de inglés, porque afecta gravemente a la persona en un momento determinado”, aseguró el exdiplomático.
Ahora, y más allá de los cuestionamientos directos, hay una preocupación puntual sobre la diplomacia colombiana. Desde hace ya varios años, se ha criticado que los presidentes decidan nombrar a cercanos como embajadores y cónsules generales en vez de optar por candidatos de carrera. Incluso, se ha visto en este Gobierno con políticos como el exsenador Camilo Romero en la Embajada de Argentina –y quien como congresista fue crítico de este tipo de nombramientos–, Roy Barreras en la de Reino Unido y Armando Benedetti como embajador ante la FAO.
Con esta resolución –que se refiere a un proceso distinto, dado que se centra en quienes entran a la carrera– se pondría en entredicho la priorización del mérito para el concurso.
En todo caso, la resolución de la Cancillería para cambiar los requisitos para entrar en la carrera diplomática no está sobre piedra. Aunque, como encontró este diario, el ministro Murillo ya firmó la resolución del contenido del curso que se dictará en 2024 para quienes pasen el concurso, aún no ha hecho lo propio con su convocatoria.
Y, en ese sentido, los mismos sindicatos que se han mostrado críticos de las propuestas, aseguraron que sí ha habido apertura de parte del Gobierno para escuchar los comentarios.
“La administración está revisándolos y entendemos que lo hacen juiciosamente y que se harán algunos cambios a la resolución. Sentimos que sí se ha escuchado el clamor que tenemos para buscar el mérito por sobre todas las cosas. Están reuniéndose y haciéndose varias modificaciones. Esperamos que sea positivo”, le dijo a este diario María Angélica García, presidenta de la Unidiplo.
Así las cosas, están por conocerse los requisitos definitivos para quienes se quieran presentar en la carrera diplomática y determinar cuánto más puede crecer la polémica.
👁🗨 Conozca cómo votan los senadores y representantes a la Cámara en ‘Congreso a la mano’.
👉 Lea más sobre el Congreso, el gobierno Petro y otras noticias del mundo político.
✉️ Si tiene interés en los temas políticos o información que considere oportuno compartirnos, por favor, escríbanos a cualquiera de estos correos: hvalero@elespectador.com; aosorio@elespectador.com; dortega@elespectador.com; dcristancho@elespectador.com; lduarte@elespectador.com; o lperalta@elespectador.com.