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La semana pasada, en un evento organizado por la Presidencia de Colombia en Armenia (Quindío), que reunió a medios comunitarios, uno de los panelistas principales fue Juan Carlos Monedero. Se trata de un politólogo español de izquierda, quien ha hecho carrera como analista de medios.
En su conferencia, llamada “Medios alternativos y la comunicación política en la coyuntura actual: movilización social, narrativas poderosas y desafíos democráticos”, Monedero resaltó la reciente propuesta de Gustavo Petro, que denominó como “ley de tercios”, en la que prometió entregar millonarios recursos a medios alternativos y nativos de redes sociales.
Según comentó el concejal de Bogotá Daniel Briceño, el evento realizado los pasados jueves y viernes tuvieron un costo de $2.800 millones.
Pero Monedero no es el único español cercano al Gobierno del presidente Gustavo Petro o, directamente, a él.
Uno de los casos más notables, como bien lo reveló El Espectador en su investigación sobre el rastro de empresarios cercanos y amigos de Petro, es el de Xavier Vendrell Segura, empresario y político independentista catalán, quien llegó a Colombia a mediados de 2011 con intereses en el sector inmobiliario y hotelero. Ese mismo año, un amigo del cual nunca ha querido hablar, le presentó a Gustavo Petro, para entonces alcalde electo de Bogotá. La cita fue un café de poco más de 10 minutos y, según contó muchos años después Vendrell, ese día conectó ideológicamente con el líder de izquierda: “Me enamoré políticamente de Gustavo Petro”.
Trece años después, Vendrell es hoy uno de los hombres más cercanos a Petro; fue el artífice de la organización de los testigos electorales en la campaña del 2022, recibió la nacionalidad de manera exprés, firmó un contrato con una entidad del Ministerio de Trabajo, visita con frecuencia la Casa de Nariño y recorre el país como asesor presidencial y promotor de la reforma agraria de Petro, sin serlo oficialmente. A la par, está en la mira de los medios españoles y colombianos por su pasado político en Barcelona y por su huella en varios negocios con entidades públicas y privadas en Colombia.
Otro catalán, referenciado en la investigación de este medio, es Manuel Grau Pujadas, amigo de Verónica Alcocer desde hace varios años y también cuestionado por algunos de sus negocios.
Grau, sin ser funcionario ni contratista del Gobierno, ha hecho parte de las comitivas de la primera dama en sus viajes a Italia, para una audiencia con el papa Francisco, y a Venezuela, para el encuentro con Nicolás Maduro y su esposa, Cilia Flores. Además, es un invitado recurrente en las reuniones sociales de la primera dama.
Consulte acá la investigación: Este es el rastro de la millonaria ‘rosca’ empresarial que se afianzó con Petro
También figura Eva Ferrer, quien llegó a ser consejera presidencial para la Reconciliación pero que ya salió del gobierno. Fue una de las encargadas de manejar la estrategia de comunicaciones de la primera dama, Verónica Alcocer, y, una vez Petro llegó a la Presidencia, fue noticia por recibir de manera casi inmediata la nacionalidad colombiana.
En septiembre de 2022 fue nombrada consejera presidencial para la niñez y la adolescencia y, aunque en enero ese cargo se suprimió, Petro la reencauchó en enero de este año como consejera para la reconciliación.
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