Comisión Primera de Cámara aprueba proyecto para prohibir los biopolímeros

Este miércoles, la Comisión Primera de la Cámara aprobó en primer debate el proyecto Colombia sin biopolímeros, que busca que la extracción de esta sustancia esté cubierta dentro del Plan Obligatorio de Salud (POS) que asumen las EPS y que se tipifique su aplicación con fines estéticos como un delito en el Código Penal.

“El retiro de biopolímeros no se puede seguir considerando como un procedimiento quirúrgico con fines estéticos. La permanencia de esas sustancias en el cuerpo afecta la capacidad funcional y vital de las personas. Al estar en riesgo la vida, el retiro de biopolímeros es un procedimiento que se debe garantizar en el Sistema Nacional de Salud”, fueron los argumentos del representante y autor de la propuesta, José Daniel López, cuando radicó el proyecto.

Lea más: Radican proyecto para que extracción de biopolímeros sea reconocido por el POS.

Además de proteger el derecho a la salud de las pacientes que sufren grandes consecuencias por someterse a procedimientos estéticos mal informados y en el que les aplicaron biopolímeros, la propuesta también contempla darles un acompañamiento psicosocial.

En cuanto a la tipificación del delito, la propuesta propone castigar con 20 y 110 meses de prisión (entre uno y nueve años) y el pago de 100 a 200 salarios mínimos a quienes apliquen bipolímeros con fines estéticos. En caso de que se trate de un médico de profesión, las penas podrían aumentar.

Otros elementos que trae la propuesta son campañas de sensibilización, publicidad con relación a centros especializados y avalados y profesionales habilitados para realizar procedimientos médicos y quirúrgicos, y facultad para que las autoridades visiten sin previo aviso los establecimientos y tomar medidas en cuanto no cumplan los requisitos mínimos.

Entérese de otras noticias de actualidad política.

Más allá de lo que determina este proyecto, la representante Ángela María Robledo dejó una reflexión sobre la cultura de la belleza que impera en el país y que lleva a muchas mujeres a exponerse a procedimientos para cumplir ese estándar. “Qué bueno que podrían incluirse un par de artículos que conminen a los medios a ayudar a transformar esa cultura de esos estándares estéticos que tanto nos están pensando a las mujeres y que incluyan estos asuntos haya una responsabilidad de trabajar estos estereotipos para hombres y mujeres”, dijo Robledo.

Este miércoles, la Comisión Primera de la Cámara aprobó en primer debate el proyecto Colombia sin biopolímeros, que busca que la extracción de esta sustancia esté cubierta dentro del Plan Obligatorio de Salud (POS) que asumen las EPS y que se tipifique su aplicación con fines estéticos como un delito en el Código Penal.

“El retiro de biopolímeros no se puede seguir considerando como un procedimiento quirúrgico con fines estéticos. La permanencia de esas sustancias en el cuerpo afecta la capacidad funcional y vital de las personas. Al estar en riesgo la vida, el retiro de biopolímeros es un procedimiento que se debe garantizar en el Sistema Nacional de Salud”, fueron los argumentos del representante y autor de la propuesta, José Daniel López, cuando radicó el proyecto.

Lea más: Radican proyecto para que extracción de biopolímeros sea reconocido por el POS.

Además de proteger el derecho a la salud de las pacientes que sufren grandes consecuencias por someterse a procedimientos estéticos mal informados y en el que les aplicaron biopolímeros, la propuesta también contempla darles un acompañamiento psicosocial.

En cuanto a la tipificación del delito, la propuesta propone castigar con 20 y 110 meses de prisión (entre uno y nueve años) y el pago de 100 a 200 salarios mínimos a quienes apliquen bipolímeros con fines estéticos. En caso de que se trate de un médico de profesión, las penas podrían aumentar.

Otros elementos que trae la propuesta son campañas de sensibilización, publicidad con relación a centros especializados y avalados y profesionales habilitados para realizar procedimientos médicos y quirúrgicos, y facultad para que las autoridades visiten sin previo aviso los establecimientos y tomar medidas en cuanto no cumplan los requisitos mínimos.

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Más allá de lo que determina este proyecto, la representante Ángela María Robledo dejó una reflexión sobre la cultura de la belleza que impera en el país y que lleva a muchas mujeres a exponerse a procedimientos para cumplir ese estándar. “Qué bueno que podrían incluirse un par de artículos que conminen a los medios a ayudar a transformar esa cultura de esos estándares estéticos que tanto nos están pensando a las mujeres y que incluyan estos asuntos haya una responsabilidad de trabajar estos estereotipos para hombres y mujeres”, dijo Robledo.