Congresistas de Cambio Radical, de frente contra la reforma tributaria
Los senadores y representantes a la Cámara de esa colectividad se retiraron de la discusión de las comisiones económicas, donde se empezó a tramitar este jueves la reforma tributaria del Gobierno Petro.
En las comisiones económicas de Senado y Cámara arrancó este jueves el trámite formal de la reforma tributaria que planteó el Gobierno Petro. La bancada oficialista es mayoría y tiene cómo aprobar el proyecto del Ministerio de Hacienda, por lo que quienes están en desacuerdo han recurrido a todo tipo de maniobras para disipar la discusión. Luego de más de seis horas de discusión, la primera además, los congresistas de Cambio Radical decidieron abandonar el recinto donde se tramita la iniciativa, con la que se recaudarían $22 billones en el primer año de vigencia (aunque podría llegar hasta los $25 billones en el cuarto año del actual gobierno).
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Desde el pasado 24 de agosto, la colectividad cuyo líder natural es el exvicepresidente Germán Vargas Lleras anunció que no apoyará la iniciativa, argumentando que la carga tributaria y las alzas a ciertos productos básicos podrían afectar a a los hogares más pobres y no golpeará el bolsillo de los más ricos que es, junto a la progresividad, la premisa del Gobierno sobre esta reforma tributaria.
Para los congresistas de Cambio Radical, “lo que Colombia necesita es una reforma que genere desarrollo, progreso, empleo y que proteja al empresariado”. Otra de las conclusiones de la bancada es que la reforma es “inequitativa” y “no es social”, al considerar que podría derivar en un aumento de la inflación, que aumentó un 11,44 %, y del desempleo. “No incentiva el crecimiento económico y destruye el aparato productivo de Colombia”, agregaron los parlamentarios de la colectividad que también se opusieron a la reforma tributaria que propuso hace un año el Gobierno de Iván Duque.
EN VIVO: Así avanza la discusión de la reforma tributaria en el Congreso
El senador David Luna, quien fue cabeza de lista del partido en las elecciones legislativas, explicó por su parte que la bancada decidió no votar la reforma tributaria porque “destruye el aparato productivo” y “va a aumentar la inflación” y los costos básicos de los hogares. “Es una reforma que va a generar desempleo y hace daño a las clases menos favorecidas de este país. Por eso como lo anunciamos hace ya varios meses no votamos la reforma tributaria”, dijo.
Recién empezó el mes septiembre, Cambio Radical presentó sus conclusiones sobre la reforma y le envió al Ministerio de Hacienda una serie de contrapropuestas sobre el proyecto de ley que se tramita en el Congreso con mensaje de urgencia, considerando que con estas se permitiría lograr el recaudo que se requiere para los programas sociales, sin afectar según ellos el crecimiento económico del país.
No obstante, su malestar radica en que de las diez propuestas que enviaron “ninguna fue tenida en cuenta por el ministro de Hacienda”, motivo por el que decidieron apartarse del debate de la reforma que, para los alfiles del Gobierno en el Congreso, es nada menos que la “piedra angular” de este Gobierno para dar cumplimiento a las promesas de campaña.
>LEA: El camino de la reforma tributaria hasta convertirse en ley
De hecho, la reforma que ha despertado dudas no solo entre los partidos de oposición e independencia sino incluso en el mismo oficialismo, es la prioridad de este período legislativo y el objetivo del Gobierno es que se apruebe a más tardar en noviembre.
Cambio Radical, según explicó Germán Córdoba, director de la colectividad, es uno de los partidos que se ha propuesto tener una postura crítica frente al Gobierno Petro. Desde hace un mes, cuando se declararon como partido independiente, destacaron que apoyarán “los proyectos realmente constructivos para el país”, pero reprobarán “las iniciativas del ejecutivo que no aporten al desarrollo y equidad de Colombia”.
En las comisiones económicas de Senado y Cámara arrancó este jueves el trámite formal de la reforma tributaria que planteó el Gobierno Petro. La bancada oficialista es mayoría y tiene cómo aprobar el proyecto del Ministerio de Hacienda, por lo que quienes están en desacuerdo han recurrido a todo tipo de maniobras para disipar la discusión. Luego de más de seis horas de discusión, la primera además, los congresistas de Cambio Radical decidieron abandonar el recinto donde se tramita la iniciativa, con la que se recaudarían $22 billones en el primer año de vigencia (aunque podría llegar hasta los $25 billones en el cuarto año del actual gobierno).
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Desde el pasado 24 de agosto, la colectividad cuyo líder natural es el exvicepresidente Germán Vargas Lleras anunció que no apoyará la iniciativa, argumentando que la carga tributaria y las alzas a ciertos productos básicos podrían afectar a a los hogares más pobres y no golpeará el bolsillo de los más ricos que es, junto a la progresividad, la premisa del Gobierno sobre esta reforma tributaria.
Para los congresistas de Cambio Radical, “lo que Colombia necesita es una reforma que genere desarrollo, progreso, empleo y que proteja al empresariado”. Otra de las conclusiones de la bancada es que la reforma es “inequitativa” y “no es social”, al considerar que podría derivar en un aumento de la inflación, que aumentó un 11,44 %, y del desempleo. “No incentiva el crecimiento económico y destruye el aparato productivo de Colombia”, agregaron los parlamentarios de la colectividad que también se opusieron a la reforma tributaria que propuso hace un año el Gobierno de Iván Duque.
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El senador David Luna, quien fue cabeza de lista del partido en las elecciones legislativas, explicó por su parte que la bancada decidió no votar la reforma tributaria porque “destruye el aparato productivo” y “va a aumentar la inflación” y los costos básicos de los hogares. “Es una reforma que va a generar desempleo y hace daño a las clases menos favorecidas de este país. Por eso como lo anunciamos hace ya varios meses no votamos la reforma tributaria”, dijo.
Recién empezó el mes septiembre, Cambio Radical presentó sus conclusiones sobre la reforma y le envió al Ministerio de Hacienda una serie de contrapropuestas sobre el proyecto de ley que se tramita en el Congreso con mensaje de urgencia, considerando que con estas se permitiría lograr el recaudo que se requiere para los programas sociales, sin afectar según ellos el crecimiento económico del país.
No obstante, su malestar radica en que de las diez propuestas que enviaron “ninguna fue tenida en cuenta por el ministro de Hacienda”, motivo por el que decidieron apartarse del debate de la reforma que, para los alfiles del Gobierno en el Congreso, es nada menos que la “piedra angular” de este Gobierno para dar cumplimiento a las promesas de campaña.
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De hecho, la reforma que ha despertado dudas no solo entre los partidos de oposición e independencia sino incluso en el mismo oficialismo, es la prioridad de este período legislativo y el objetivo del Gobierno es que se apruebe a más tardar en noviembre.
Cambio Radical, según explicó Germán Córdoba, director de la colectividad, es uno de los partidos que se ha propuesto tener una postura crítica frente al Gobierno Petro. Desde hace un mes, cuando se declararon como partido independiente, destacaron que apoyarán “los proyectos realmente constructivos para el país”, pero reprobarán “las iniciativas del ejecutivo que no aporten al desarrollo y equidad de Colombia”.