En la Comisión Primera de Senado está en trámite el proyecto que busca reglamentar las sesiones virtuales y mixtas (semipresencialidad) en el Congreso y en medio de la discusión se aprobó una proposición que busca blindar el Acuerdo de Paz firmado con las Farc.
Es decir, cualquier reforma que se le quiera hacer a los textos de La Habana debe de ser discutida y votada de forma presencial. El principal impulsor de esta proposición fue el senador Roy Barreras, de la U, quien insistió que la virtualidad abre la puerta a que movimientos opositores de los diálogos de paz, como el uribismo, que busca, entre otras cosas, crear una sala especial para las Fuerzas Militares en la JEP, usen esta metodología “con falencias y debilidades para hacer trizas el Acuerdo”.
A esta misma voz de preocupación se unió el senador Rodrigo Lara, de Cambio Radical, que desde inicios de las sesiones virtuales advirtió de los vicios en las votaciones, especialmente de aquellos proyectos de reforma como el que se aprobó de cadena perpetua para violadores y asesinos de menores de edad. “Para la mayoría del Gobierno, es la prioridad número uno (las sesiones virtuales) porque habilita a votar proyectos que en circunstancias normales son imposibles de sacar adelante”, dijo refiriéndose a los textos de La Habana.
Luchando contra la peligrosa ley que permite tramitar reformas virtuales que destruyan los acuerdos y la democracia
— Rodrigo Lara 🇨🇴 (@Rodrigo_Lara_) July 30, 2020
Esta ley es prioridad N1 de la mayoría de gobierno
Sin ella no logran esas reformas
Pido a @lopezjosedaniel autor de la ley y al ponente Varón que recapaciten. pic.twitter.com/U8sKDL2g88
Pese a que los congresistas del Centro Democrático y el Partido Conservador, los demás partidos votaron positivamente a la proposición que también prohibe la discusión y votación de reformas constitucionales, plebiscitos, referendos y otros temas gruesos que pongan en peligro la legalidadde las funciones del Congreso.
Ante la aprobación de esta iniciativa, la senadora Paloma Valencia, del Centro Democrático, dejó una constancia de que demandará dicho artículo porque “las mayorías no pueden restringir las posibilidades de acción de quienes son minorías política”.
Siguió diciendo que la propuesta y su adhesión al proyecto “es un atropello contra el Estado de Derecho y contra los millones de colombianos que están representados en el partido, a quienes se les excluye de manera arbitraria, lo cual es nefasto para la democracia”.
En la discusión, otro tema fuerte que se debatió fue el descuento de los gastos de representación que reciben los congresistas. En otras palabras, el dinero que se les desembolsa para tiquetes, viáticos y estadía en Bogotá para los días en que sesiona el Congreso. El primero en hacer la propuesta fue Gustavo Bolívar, de los Decentes, y dentro de la Comisión fue Temístocles Ortega, de Cambio Radical, quien puso la propuesta sobre la mesa.
Sin embargo, esta propuesta que fue muy bien recibida en redes fue rechazada en la célula legislativa, por lo que los congresistas que sigan sesionando desde sus casas y en sus regiones seguirán recibiendo los $14 millones de gastos de representación. Para el senador Barreras, el resultado es un lamentable mensaje que le envía a la ciudadanía.