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Como todos los años, el Congreso corrió a toda marcha esta última semana para sacar adelante los proyectos que tenía represados y que se podían hundir por falta de trámite ante el fin de la legislatura y la entrada a receso hasta el 20 de julio. Muchas fueron las iniciativas las que se hundieron, entre ellas el proyecto de ley “no todo es color de rosa”.
Este proyecto, cuyo autor es el representante de Centro Democrático Óscar Villamizar, tenía como intención establecer un marco regulatorio en el país para que hubiera “promoción, detección temprana, tratamiento integral, rehabilitación y cuidado paliativo” frente al cáncer de mama, que es el principal cáncer que se reporta en Colombia, con una tasa de incidencia de 63,9 casos por cada 100.000 mujeres.
Según denunció el autor de la iniciativa, al proyecto solo le faltaba el último debate en Senado para convertirse en ley de la República, pero su discusión en esta instancia nunca se dio. “El senado dejo hundir nuestro proyecto de ley no todo es color de rosas, que garantizaba el tratamiento oportuno y tratamiento de cáncer de mama”, expresó el representante Villamizar.
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“Me da tristeza porque ha sido una bandera de nuestro trabajo para salvarle la vida a mas de 15.000 mujeres que se mueren en Colombia al año, pero adicionalmente para eliminar las barreras de acceso para un tratamiento oportuno”, comentó Villamizar, que cuestionó que estuvieran agendados el pasado viernes en el puesto dos y que lo pasaron al doce sin mayor explicación
El autor también señaló que se le dio prelación a iniciativas que no tenían premura para su debate y que podían esperar a la próxima legislatura, mientras que a este texto se lo dejó casi hacia el final. Además, en esta misma línea de reclamos, Villamizar cuestionó que apenas se llegó al punto 11 de las discusiones se levantó la sesión y automáticamente se hundió.
Además, Villamizar expresó sus reparos ante el trámite debido a que obligatoriamente el texto debía ser conciliado porque habían tomado caminos muy diferentes frente a lo que había quedado en Cámara: “En la Comisión Séptima del Senado, el senador Motoa hizo cambios al proyecto que le quitaban la importancia”
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El proyecto se hundió debido a que cumplió el plazo de cuatro periodos -dos años- que tiene los proyectos de ley ordinaria para ser discutidos. En su primer año, la iniciativa no tuvo mayores contratiempos y recorrió sus dos debates antes del 20 de julio de 2020. Sin embargo, su paso por Senado fue más difícil y se quedó a un debate de convertirse en ley.
“No hubo apoyo de la Comisión Séptima del Senado, fue un proyecto que presentamos hace dos legislaturas y lo que vemos es que se demoraron desde que salió de la Cámara a presentar ponencia en la comisión séptima mas de 8 meses”, agregó el autor del proyecto, que confirmó que lo volverá a presentar en la próxima legislatura.
El proyecto de no todo es color de rosa buscaba que fuera desde las EPS que se impulsara las citas a las mujeres para hacerse la mamografía, crear unidades móviles para hacer este tipo de pruebas en las zonas rurales y estandarizar los tiempos de diagnóstico e inicio del tratamiento pues “las mujeres con salud prepagada tienen un tiempo de espera de 30 días, las del régimen contributivo 6 meses y subsidiado 9 meses”.