El antes y el después del uribismo frente a la consulta anticorrupción

A 15 días de que los colombianos acudan a las urnas para decidir si aprueban los siete puntos de la consulta anticorrupción que permitiría reducir los salarios de los congresistas y enviar a la cárcel a quienes cometan actos de corrupción, el compromiso del nuevo gobierno y su partido con esta iniciativa está en duda.

En abril, cuando se discutía el aval del Congreso a la consulta, la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, había manifestado su apoyo a la iniciativa con la condición de que su aprobación en el órgano legislativo se diera después de la primera vuelta de las presidenciales. Esto para que ninguno de los candidatos se viera favorecido.

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En ese momento, Valencia incluso manifestó que su partido haría campaña en las calles por el sí. De igual manera, el senador Álvaro Uribe también manifestaba su apoyo argumentando que la iniciativa permitiría al pueblo colombiano decidir aspectos claves del Congreso de la República. Así quedó registrado en las intervenciones de los dos en el Senado el pasado 17 de abril.

Por su parte, el presidente Iván Duque, en varias intervenciones en medios de comunicación cuando estaba en campaña, señalaba que apoyaría la consulta que ya estaba en marcha.

Todo cambió luego de que el 7 de agosto el nuevo mandatario se posesionara. Tan solo minutos después del acto en el que Duque recibió la banda presidencial, en una reunión privada de su bancada, el senador Uribe manifestaba que “menos mal que el presidente no se metió con eso de la consulta anticorrupción”, sembrando la duda sobre el compromiso del nuevo Gobierno con la iniciativa.

Por su parte, el senador del Centro Democrático y presidente del órgano legislativo, Ernesto Macías, señaló en días pasados que “la consulta anticorrupción no es lo que el país necesita”.

Lea: “La consulta anticorrupción no es lo que el país necesita”: Ernesto Macías

Uribe, el 8 de agosto en el Senado, manifestó que él dice lo mismo en público que en privado (haciendo referencia al video revelado por Noticias Uno) y por tanto ratificó que no acompaña la consulta anticorrupción y pidió apoyar los proyectos que radicó el nuevo Gobierno para combatir la corrupción.

Los mensajes de la bancada del Centro Democrático han resultado contradictorios con lo expresado por el presidente Duque desde San Andrés, cuando afirmó que sí está comprometido con la consulta.

Sin embargo, la senadora Angélica Lozano, quien ha promovido la consulta desde el primer momento, se mostró desconcertada por el cambio de discurso que ha manifestado el uribismo y además, preocupada por el mensaje que se le está enviando al país.

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“Se le está enviando un mensaje equivocado al país para que no acuda a las urnas. Aquí ya hay 37 millones de tarjetones impresos, el pueblo colombiano podrá aprobar lo que el Congreso ha hundido 8 veces desde 2014”, señaló Lozano.

El próximo 26 de agosto, al menos 12 millones trescientas mil personas deberán acudir a las urnas para que la consulta tenga validez. De esas, la mitad más uno debe votar sí a las siete preguntas que componen la iniciativa para que sea aprobada.

A 15 días de que los colombianos acudan a las urnas para decidir si aprueban los siete puntos de la consulta anticorrupción que permitiría reducir los salarios de los congresistas y enviar a la cárcel a quienes cometan actos de corrupción, el compromiso del nuevo gobierno y su partido con esta iniciativa está en duda.

En abril, cuando se discutía el aval del Congreso a la consulta, la senadora del Centro Democrático, Paloma Valencia, había manifestado su apoyo a la iniciativa con la condición de que su aprobación en el órgano legislativo se diera después de la primera vuelta de las presidenciales. Esto para que ninguno de los candidatos se viera favorecido.

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En ese momento, Valencia incluso manifestó que su partido haría campaña en las calles por el sí. De igual manera, el senador Álvaro Uribe también manifestaba su apoyo argumentando que la iniciativa permitiría al pueblo colombiano decidir aspectos claves del Congreso de la República. Así quedó registrado en las intervenciones de los dos en el Senado el pasado 17 de abril.

Por su parte, el presidente Iván Duque, en varias intervenciones en medios de comunicación cuando estaba en campaña, señalaba que apoyaría la consulta que ya estaba en marcha.

Todo cambió luego de que el 7 de agosto el nuevo mandatario se posesionara. Tan solo minutos después del acto en el que Duque recibió la banda presidencial, en una reunión privada de su bancada, el senador Uribe manifestaba que “menos mal que el presidente no se metió con eso de la consulta anticorrupción”, sembrando la duda sobre el compromiso del nuevo Gobierno con la iniciativa.

Por su parte, el senador del Centro Democrático y presidente del órgano legislativo, Ernesto Macías, señaló en días pasados que “la consulta anticorrupción no es lo que el país necesita”.

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Uribe, el 8 de agosto en el Senado, manifestó que él dice lo mismo en público que en privado (haciendo referencia al video revelado por Noticias Uno) y por tanto ratificó que no acompaña la consulta anticorrupción y pidió apoyar los proyectos que radicó el nuevo Gobierno para combatir la corrupción.

Los mensajes de la bancada del Centro Democrático han resultado contradictorios con lo expresado por el presidente Duque desde San Andrés, cuando afirmó que sí está comprometido con la consulta.

Sin embargo, la senadora Angélica Lozano, quien ha promovido la consulta desde el primer momento, se mostró desconcertada por el cambio de discurso que ha manifestado el uribismo y además, preocupada por el mensaje que se le está enviando al país.

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“Se le está enviando un mensaje equivocado al país para que no acuda a las urnas. Aquí ya hay 37 millones de tarjetones impresos, el pueblo colombiano podrá aprobar lo que el Congreso ha hundido 8 veces desde 2014”, señaló Lozano.

El próximo 26 de agosto, al menos 12 millones trescientas mil personas deberán acudir a las urnas para que la consulta tenga validez. De esas, la mitad más uno debe votar sí a las siete preguntas que componen la iniciativa para que sea aprobada.