El condenado Pulgar buscaría (nuevamente) tener curul a través de su esposa

El exsenador del Partido de la U, Eduardo Pulgar, condenado el pasado 25 de junio a cuatro años y 10 meses de cárcel por el delito de tráfico de influencias y cohecho, volvería al Congreso de la República. Todo parece indicar que en esta ocasión conservaría su curul por medio de la aspiración de Ana Josefina Ucrós Rosales, más conocida como Any Ucrós, su actual esposa.

Dilian Francisca Toro, directora de la U, reconoció ante este diario que su nombre ya estaba siendo considerado. De hecho, que Ucrós entre a la lista de la colectividad para las elecciones de 2022 es un tema que ya está siendo considerado por sus directivas, pero aún no hay respuesta. Eso sí, la representante Norma Hurtado, de esta organización, lo viene diciendo desde hace semanas.

De igual forma lo expresó este jueves el periodista Daniel Coronell, en W Radio. En su reporte, Coronell mencionó que en principio le preguntó al expresidente César Gaviria, director del Partido Liberal, si le daría el aval a Any Ucrós. Gaviria negó de entrada esa afirmación y recalcó en que no la conoce a ella y tampoco a Pulgar.

La pregunta de Coronell se debe a que Ucrós hizo parte de la Unidad de Trabajo Legislativo de la representante liberal Kelyn Johana González, y por otras posibles conexiones o cercanía entre Eduardo Pulgar y Rodrigo Roncallo, esposo de González, quien coincidió en la cárcel con el exsenador de la U, pues estuvo preso por sus nexos con paramilitares.

Luego de descartar la incursión de Ucrós en las toldas rojas, Coronell se dispuso a indagar en la U. Toro le confirmó que, efectivamente, ella estaba pidiendo aval para lanzarse al Senado en 2022. De hacerse realidad, esta sería la segunda vez que Pulgar conserva su curul en cuerpo ajeno: por medio de sus parejas.

La primera vez fue en 2010, cuando Karime Motta, quien es hoy su exesposa, llegó al Senado...también por el Partido de la U. En ese entonces, Eduardo Pulgar estaba inhabilitado. Cumplía en esos momentos los 18 años de sanción de no poder aspirar a cargos públicos, impuestos por la Procuraduría, luego de que, siendo vicepresidente del Concejo de Barranquilla, firmara actas falsas a gente que no pertenecía a la corporación para que cobraran pagos ilegales.

En esta ocasión, conservaría la curul por medio de Ucrós. Vale la pena recordar que Pulgar consiguió llegar al Senado en 2018 gracias a más de 80.000 votos. Si Dilian Francisca Toro le concede el aval a la hoy esposa del condenado Pulgar, la U podría, también, recuperar dicho puesto, pues por la salida del exsenador se le aplicó silla vacía.

También vale la pena traer a colación el fenómeno que dio paso al ingreso de parejas de políticos condenados al legislativo. Las sentencias que dejó el paramilitarismo dio paso a la parapolítica. Una vez los hombres con curules tuvieron que dejar el Congreso porque se les comprobaron sus nexos con los paramilitares, llegaron las mujeres. En específico, sus esposas o familiares que los reemplazaron en el Capitolio. Si bien esto configuró la permanencia en el poder de estos señores, también resultó en el aumento de la participación política de mujeres y algunas se hicieron una voz y un lugar en estos recintos.

El exsenador del Partido de la U, Eduardo Pulgar, condenado el pasado 25 de junio a cuatro años y 10 meses de cárcel por el delito de tráfico de influencias y cohecho, volvería al Congreso de la República. Todo parece indicar que en esta ocasión conservaría su curul por medio de la aspiración de Ana Josefina Ucrós Rosales, más conocida como Any Ucrós, su actual esposa.

Dilian Francisca Toro, directora de la U, reconoció ante este diario que su nombre ya estaba siendo considerado. De hecho, que Ucrós entre a la lista de la colectividad para las elecciones de 2022 es un tema que ya está siendo considerado por sus directivas, pero aún no hay respuesta. Eso sí, la representante Norma Hurtado, de esta organización, lo viene diciendo desde hace semanas.

De igual forma lo expresó este jueves el periodista Daniel Coronell, en W Radio. En su reporte, Coronell mencionó que en principio le preguntó al expresidente César Gaviria, director del Partido Liberal, si le daría el aval a Any Ucrós. Gaviria negó de entrada esa afirmación y recalcó en que no la conoce a ella y tampoco a Pulgar.

La pregunta de Coronell se debe a que Ucrós hizo parte de la Unidad de Trabajo Legislativo de la representante liberal Kelyn Johana González, y por otras posibles conexiones o cercanía entre Eduardo Pulgar y Rodrigo Roncallo, esposo de González, quien coincidió en la cárcel con el exsenador de la U, pues estuvo preso por sus nexos con paramilitares.

Luego de descartar la incursión de Ucrós en las toldas rojas, Coronell se dispuso a indagar en la U. Toro le confirmó que, efectivamente, ella estaba pidiendo aval para lanzarse al Senado en 2022. De hacerse realidad, esta sería la segunda vez que Pulgar conserva su curul en cuerpo ajeno: por medio de sus parejas.

La primera vez fue en 2010, cuando Karime Motta, quien es hoy su exesposa, llegó al Senado...también por el Partido de la U. En ese entonces, Eduardo Pulgar estaba inhabilitado. Cumplía en esos momentos los 18 años de sanción de no poder aspirar a cargos públicos, impuestos por la Procuraduría, luego de que, siendo vicepresidente del Concejo de Barranquilla, firmara actas falsas a gente que no pertenecía a la corporación para que cobraran pagos ilegales.

En esta ocasión, conservaría la curul por medio de Ucrós. Vale la pena recordar que Pulgar consiguió llegar al Senado en 2018 gracias a más de 80.000 votos. Si Dilian Francisca Toro le concede el aval a la hoy esposa del condenado Pulgar, la U podría, también, recuperar dicho puesto, pues por la salida del exsenador se le aplicó silla vacía.

También vale la pena traer a colación el fenómeno que dio paso al ingreso de parejas de políticos condenados al legislativo. Las sentencias que dejó el paramilitarismo dio paso a la parapolítica. Una vez los hombres con curules tuvieron que dejar el Congreso porque se les comprobaron sus nexos con los paramilitares, llegaron las mujeres. En específico, sus esposas o familiares que los reemplazaron en el Capitolio. Si bien esto configuró la permanencia en el poder de estos señores, también resultó en el aumento de la participación política de mujeres y algunas se hicieron una voz y un lugar en estos recintos.