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Esta semana, la bancada de Cambio Radical ratificó, una vez más, su apoyo a Arturo Char para ocupar, a partir del próximo 20 de julio, la Presidencia del Senado en el período legislativo 2020-2021. El apoyo se da frente a los cuestionamientos que la oposición y otros sectores le han hecho al legislador tras las declaraciones de la condenada excongresista Aida Merlano, actualmente detenida en Venezuela, en la que lo involucra en presuntos hechos de corrupción electoral e incluso lo señala de haber ayudado a su fuga, en octubre del año pasado, cuando asistía a una cita odontológica al norte de Bogotá.
Ya en septiembre de 2019, en la condena a Merlano, la Corte Suprema de Justicia había compulsado copias a Julio Gerlein (empresario hermano del exsenador conservador Roberto Gerlein) y al mismo Arturo Char, para que se investigara su presunta participación en una red de compra de votos. Y este jueves sobrevino un hecho que podría poner en jaque la aspiración del congresista: La Sala Especial de Instrucción del alto tribunal abrió indagación preliminar en su contra por la supuesta colaboración en la fuga. La decisión fue tomada por el magistrado Francisco Farfán Molina, con base en las declaraciones entregadas por la misma Merlano, el lunes pasado, desde Caracas.
Si bien faltan cinco meses para que se dé la eventual llegada de Char a la Presidencia del Senado, que implica la del Congreso en pleno, lo que se ve venir en este semestre legislativo, que arranca el 16 de marzo, es la agudización política entre las fuerzas afines al gobierno Duque, filas en la que ya se cuenta a Cambio Radical, y la oposición, incluyendo sectores que si bien están en partidos independientes e incluso pertenecen a la coalición oficial, consideran inconveniente que este asuma la cabeza del Poder Legislativo.
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De hecho, ya el senador Jorge Robledo, del Polo y uno de los más críticos de la administración Duque, anunció esa dura batalla: “Es inaceptable que impongan el nombre de Arturo Char como presidente del Congreso. Si intentan sentarlo en esa silla, se encontrarán con un estrellón conmigo de proporciones inmensas. Desde ya le exijo a la coalición de gobierno que retire esa candidatura (…) estoy exigiendo que investiguen a fondo las declaraciones de Aída Merlano. No más 'tapen-tapen'. Desde ya le pregunto a Iván Duque y a Germán Vargas Lleras: ¿van a utilizar toda la mermelada posible para hacer una ‘jugadita’ e imponer a Arturo Char como presidente del Congreso?”, enfatizó.
El senador Antonio Sanguino, de la Alianza Verde, también fijo una postura drástica: “Sería una tremenda equivocación y un acto vergonzoso que eligiéramos como presidente del Congreso al senador Arturo Char, luego de las declaraciones de Aida Merlano que tanto lo comprometen”, aseguró, pidiéndole de paso a Cambio Radical considerar la postulación de otro congresista para ocupar tal dignidad a partir del 20 de julio.
Incluso, reveló Sanguino, la oposición está pensando también en plantear la candidatura de alguien de sus filas, como alternativa, y que sea la plenaria del Senado la que decida. Ello podría implicar la ruptura de los acuerdos que se hacen al comienzo de la Legislatura, cuando los partidos mayoritarios se reparten la configuración de las mesas directivas en el Capitolio.
El meollo del asunto está en que las declaraciones de Aida Merlano no tienen, al menos por ahora, un sustento firme o pruebas sólidas, es decir, documentos que ratifiquen lo dicho. Y en los principales partidos de la coalición oficialista sus palabras son consideradas “inventos”, como dicen algunos congresistas, al menos antes de conocerse la apertura de la indagación preliminar por parte de la Corte, por el caso de la fuga.
“Las historias de Aida Merlano se parecen cada vez más a las del pastorcito mentiroso, o mejor, a las de su protector Nicolás Maduro. Cuando diga algo real, nadie le va a creer”, expresó, por ejemplo, el senador Carlos Fernando Motoa, quien hace parte de la bancada de Cambio Radical. Y a la pregunta sobre si Arturo Char seguirá siendo la carta de su partido para la presidencia del Congreso, otro legislador señaló: “Sí, claro que sí. La única es que él mismo dijera que no. Los compromisos hay que cumplirlos”.
Aun así, en otros partidos como el Liberal y la U, hay quienes consideran que sí debería darse una reconsideración del nombre de Char para la Presidencia del Senado, teniendo en cuenta las sombras que las declaraciones de Merlano ha dejado. “Debería hacerse a un lado. De todos modos los acuerdos se van a respetar y el cargo será para Cambio Radical, pero Arturo debería primero salir de todo ese embrollo”, manifestó un legislador, pidiendo la reserva de su nombre.
Ya en voz baja se ha puesto sobre la mesa el nombre de Germán Varón Cotrino como plan B. Solo que algunos comienzan a hilar delgado, pues este último es cercano a Germán Vargas Lleras, quien supuestamente libra un pulso interno por el poder en Cambio Radical con Alex Char, el exalcalde de Barranquilla, hermano de Arturo y a quien todos dan como inminente candidato presidencial en 2022. Y no falta, además, quien recuerde que teniendo el Congreso de la República una imagen tan negativa para los colombianos, la llegada de Char a su Presidencia le daría más razones a las críticas.