El preconteo en Facebook
Las cifras del preconteo no coinciden con las actas oficiales de las mesas de votación.
Redacción Política
“¿Cuál primera vuelta?” es el nombre del grupo en la red social de Facebook. Su descripción es concreta: “El 30 de mayo de 2010 ocurrieron cosas muy curiosas en el escrutinio de las elecciones presidenciales de Colombia. Entre todos podemos descubrirlas”. Palabras más, palabras menos, lo que se está denunciando en internet es un supuesto fraude en la primera vuelta de los comicios por la jefatura del Estado.
Como sustento se muestran imágenes de los formularios electorales (E-14) que llenan los jurados y la información que llegó a la Registraduría, en los cuales se puede ver una serie de inconsistencias a favor y en contra de casi todos los candidatos a la Presidencia el pasado 30 de mayo.
El grupo, que ya cuenta con más de 20 mil miembros, plantea realizar una auditoría masiva a esa primera vuelta presidencial y les pide a los internautas enfocarse en reunir evidencias y evitar los comentarios ofensivos. Lo cierto es que las irregularidades que surgen a la vista han generado una lluvia de rumores que hablan de un posible fraude en contra del candidato del Partido Verde, Antanas Mockus, y a favor de Juan Manuel Santos, de la U.
Este miércoles, Adriana Córdoba —esposa de Mockus—, en entrevista con Caracol Radio, señaló que efectivamente hay muchas evidencias que muestran unos datos de los jurados y testigos electorales y otros los reportados a la Registraduría: “Esas inconsistencias les tocará aclararlas a los observadores internacionales y a la misma Registraduría. Nosotros somos conscientes de que eso existe y que nos tenemos que organizar mejor el 20 de junio”, dijo.
Los rumores obligaron al pronunciamiento de los organismos electorales. Adelina Covo, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), manifestó que lo que se denomina “preconteo” es una información que no tiene carácter oficial y que hasta el momento no se ha presentado una sola queja contra los documentos oficiales. Y enfatizó: “La única solución para este tipo de problemas es el voto electrónico”.
A su vez, el registrador Carlos Ariel Sánchez explicó mediante un comunicado que en los escrutinios municipales se revisan los documentos suscritos por los jurados y que, con base en los formularios E-14, las comisiones escrutadoras suman los votos obtenidos por cada candidato y elaboran el formulario E-24, o acta parcial, y el E-26 o acta general de escrutinio. Este último documento es en el que se basa el Consejo Nacional Electoral para consolidar el resultado nacional.
“Por lo anterior, las posibles diferencias entre el proceso de preconteo y los formularios E-14 son irrelevantes para el escrutinio, ya que en éste no se tienen en cuenta los resultados de ese preconteo. El escrutinio se basa en los documentos suscritos por los jurados y se realiza en audiencias públicas, en las que los interesados pueden presentar todas las reclamaciones a que haya lugar, de acuerdo con lo previsto en el Código Electoral”, indicó.
Sánchez aclaró también que las diferencias entre los datos divulgados en el preconteo y los resultados del escrutinio obedecen en su gran mayoría a que el primero se realiza con base en transmisión de datos “voz a voz”, a través de teléfonos fijos, móviles o satelitales, con el fin de brindarle una información rápida a la opinión pública el día de la elección y es posible que existan errores humanos.
Según la Registraduría, la comparación entre la información del preconteo de la primera vuelta y el resultado de los escrutinios generales arroja que las diferencias tanto por mayor o por menor cantidad de votos para todos los candidatos, los votos nulos y las tarjetas no marcadas equivalen al 0,68% de los datos divulgados el 30 de mayo.
De cualquier manera, el tema ha causado roncha, sobre todo en la campaña de Mockus —la más afectada según los documentos que se muestran en Facebook—, donde su directora, Liliana Caballero, expresó que se está “evaluando” la información que les ha llegado de los testigos electorales y del mismo internet. “Hay cosas que nos han pasado y por supuesto que si pensamos que hubo irregularidades las pondremos en conocimiento ante las autoridades correspondientes”, concluyó.
“¿Cuál primera vuelta?” es el nombre del grupo en la red social de Facebook. Su descripción es concreta: “El 30 de mayo de 2010 ocurrieron cosas muy curiosas en el escrutinio de las elecciones presidenciales de Colombia. Entre todos podemos descubrirlas”. Palabras más, palabras menos, lo que se está denunciando en internet es un supuesto fraude en la primera vuelta de los comicios por la jefatura del Estado.
Como sustento se muestran imágenes de los formularios electorales (E-14) que llenan los jurados y la información que llegó a la Registraduría, en los cuales se puede ver una serie de inconsistencias a favor y en contra de casi todos los candidatos a la Presidencia el pasado 30 de mayo.
El grupo, que ya cuenta con más de 20 mil miembros, plantea realizar una auditoría masiva a esa primera vuelta presidencial y les pide a los internautas enfocarse en reunir evidencias y evitar los comentarios ofensivos. Lo cierto es que las irregularidades que surgen a la vista han generado una lluvia de rumores que hablan de un posible fraude en contra del candidato del Partido Verde, Antanas Mockus, y a favor de Juan Manuel Santos, de la U.
Este miércoles, Adriana Córdoba —esposa de Mockus—, en entrevista con Caracol Radio, señaló que efectivamente hay muchas evidencias que muestran unos datos de los jurados y testigos electorales y otros los reportados a la Registraduría: “Esas inconsistencias les tocará aclararlas a los observadores internacionales y a la misma Registraduría. Nosotros somos conscientes de que eso existe y que nos tenemos que organizar mejor el 20 de junio”, dijo.
Los rumores obligaron al pronunciamiento de los organismos electorales. Adelina Covo, presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), manifestó que lo que se denomina “preconteo” es una información que no tiene carácter oficial y que hasta el momento no se ha presentado una sola queja contra los documentos oficiales. Y enfatizó: “La única solución para este tipo de problemas es el voto electrónico”.
A su vez, el registrador Carlos Ariel Sánchez explicó mediante un comunicado que en los escrutinios municipales se revisan los documentos suscritos por los jurados y que, con base en los formularios E-14, las comisiones escrutadoras suman los votos obtenidos por cada candidato y elaboran el formulario E-24, o acta parcial, y el E-26 o acta general de escrutinio. Este último documento es en el que se basa el Consejo Nacional Electoral para consolidar el resultado nacional.
“Por lo anterior, las posibles diferencias entre el proceso de preconteo y los formularios E-14 son irrelevantes para el escrutinio, ya que en éste no se tienen en cuenta los resultados de ese preconteo. El escrutinio se basa en los documentos suscritos por los jurados y se realiza en audiencias públicas, en las que los interesados pueden presentar todas las reclamaciones a que haya lugar, de acuerdo con lo previsto en el Código Electoral”, indicó.
Sánchez aclaró también que las diferencias entre los datos divulgados en el preconteo y los resultados del escrutinio obedecen en su gran mayoría a que el primero se realiza con base en transmisión de datos “voz a voz”, a través de teléfonos fijos, móviles o satelitales, con el fin de brindarle una información rápida a la opinión pública el día de la elección y es posible que existan errores humanos.
Según la Registraduría, la comparación entre la información del preconteo de la primera vuelta y el resultado de los escrutinios generales arroja que las diferencias tanto por mayor o por menor cantidad de votos para todos los candidatos, los votos nulos y las tarjetas no marcadas equivalen al 0,68% de los datos divulgados el 30 de mayo.
De cualquier manera, el tema ha causado roncha, sobre todo en la campaña de Mockus —la más afectada según los documentos que se muestran en Facebook—, donde su directora, Liliana Caballero, expresó que se está “evaluando” la información que les ha llegado de los testigos electorales y del mismo internet. “Hay cosas que nos han pasado y por supuesto que si pensamos que hubo irregularidades las pondremos en conocimiento ante las autoridades correspondientes”, concluyó.